Place of Pleasure | Changlix's one shot's

13er Shot: Un logro

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No dejar que el maknae supiera que pasaba detrás de esa puerta era el objetivo de Félix

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Félix estaba alistándose para irse a dormir, habían regresado de la empresa luego de un día de prácticas y de cuanta cosa se le pudiese ocurrir, pero era él el único despierto todavía en la casa, los dos menores sabían que llegarían directo a sus camas por lo que decidieron bañarse en el edificio, él prefería la intimidad de su baño y no otro, ahora era él quien estaba a cargo luego de que Minho les avisara que dormiría por esta noche en el apartamento de los mayores.  

Salió del baño con una toalla amarrada a su cadera, su cabello aún goteaba y el frío del aire acondicionado erizó su piel, tenía una costumbre y era tomar sus auriculares y cambiarse mientras disfrutaba de la música, le relajaba, y hoy no era la excepción.

Eran cerca de las once de la noche y ya deseaba tirarse a dormir, pero debía hacer su rutina antes. Buscó entre su clóset el pijama y lo dejó sobre su cama para luego seguir con su rostro.

Para cuando terminó con su cara era tiempo de su cuerpo, la toalla que cubría su cuerpo fue retirada, rápidamente quedándose desnudo, esparció entre sus manos la crema hidratante y de a poco fue esparciéndola. La música y sus caricias en sus músculos le relajaban impresionantemente, sentía de a poco como la tensión se iba y dejaba a su cuerpo pesado.

-Félix – llamó alguien desde el pasillo

El rubio no contestó, claramente por estar ensimismado y absorto por la música, haciendo que la persona llamase de nuevo.

Al no recibir contesta y darse cuenta que las puertas de las otras dos habitaciones estaban aseguradas, avanzó hasta la puerta de Lee, tocando nuevamente, pero sin recibir una respuesta, decidió revisar si ya estaba dormido y, al darse cuenta que no estaba asegurada entró.

Antes de poder hablar frente a él la imagen del cuerpo desnudo y de espaldas del menor se plasmó, masajeaba con delicadeza y extremo cuidado cada una de sus extremidades, dejando salir pequeños suspiros en el proceso, dándose cuenta a la vez el porqué de su silencio; los auriculares.

No dijo nada, solo admiró a la persona frente a sí y sus movimientos, haciendo su respiración más pesada con el pasar de los minutos, pero para cuando el rubio movió ligeramente su cabeza y con su vista periférica vio un vistazo de otra persona en la habitación dejó salir un pequeño grito, tomando su toalla para tratar de taparse.

- ¡¿Qué haces aquí?! – por lo brusco de su movimiento había caído sentado en su cama, viendo con sorpresa a la otra persona – Hyung, ¡¿qué haces aquí?!

-Yo..., yo vine por algo de Minho – respondió luego de unos segundos
Le veía fijamente, su mirada se volvió oscura y su rostro serio, así como su respiración se sentía pesada y sus músculos tensos.

-Carajo, ¡¿Podrías salir?!, ¡Me estoy cambiando! –

Las palabras de Félix parecían llevárselas el viento, no escuchaba nada, solo veía el pequeño cuerpo del menor, notando del rojo de sus mejillas

- ¡Changbin! – habló más fuerte, provocando que le viera - ¡Te estoy hablando!, De verdad necesito que salga, ¡Ahora!

Había llegado hasta él aún agarrando la toalla entre sus pequeñas manos, colocando una de ellas en su pecho para intentar empujarlo fuera de la habitación, pero sin lograrlo.