Corazon, herido a muerte.

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Sesshomaru estaba sentado en su sillon favorito en la sala de estar mientras observaba el crepitar del fuego en la chimenea. En su mano derecha sostenía una copa recién servida de whisky de fuego y en la otra mano la botella hasta la mitad. Sobre la cómoda reposaba una botella vacía y un libro abierto de willian Shakespeare.

Había perdido la noción del tiempo hacía ya varias horas. Ni siquiera había entrado en su habitación luego de haber llegado a casa del trabajo. Recordaba vagamente descender los escalones y dirigirse a su minibar, sentarse a leer con una simple botella de whisky y lo demás era tinieblas para su mente borracha. Ni siquiera recordaba el momento en que se había levantado en busca de otra botella.

━ Amor.....¡oh sentimiento preñado de juicio y de locura, amargo veneno que mata el alma, dulce bálsamo que prepara y conserva__  agitó la mano que sostenía la copa mientras recitaba aquellos versos que recordaba haber leído minutos atrás.

Inclinó un poco la copa , los cubitos de hielo en su interior bailaron al compaz del movimiento, también inclinó su  cabeza graciosamente admirando el tallado sobre aquel cristal. A través  del fuego ardiente podía visualizar el líquido  ambarino y exótico de una tonalidad brillante.

━Amo a  un ángel con figura de mortal. Pero una mortal invulnerable a los dardos del amor__ acercó el cristal a sus labios y sin pensarlo sorbió aquel líquido del cual pasó por su garganta como lava ardiente, cerró los ojos un momento disfrutando la sensación ━ ¿Qué espíritu infernal eres que así me atormentas?

━ ¿Con que aquí estabas?__ dijo una voz a sus espaldas, abrió los ojos y giró la cabeza en un ángulo de 180°  tratando de enfocar a la persona que estaba parada en el pie de los escalones.

Su vista estaba parcialmente nublada con aquel último sorbo y no podía distinguir bien a la figura. Solo que traía una bata lo que parecia ser blanca o algo por el estilo y el pelo suelto.

━ Rin...¿eres tu?__ preguntó no muy seguro estrechando los ojos para agudizar la visión.

La sombra no contestó, sin embargo apagó la luz ante el asombro de un embriagado peliplata y  mientras era iluminda por la cálida luz de la chimenea se acercó a él. Sesshomaru  coloco la botella junto con la copa en la cómoda con intenciones de levantarse y desechar las intenciones de la chica.

Sin embargo, la chica saltó sobre el en el sillón y se colocó a horcajadas con la manos sobre su cuello.

━ Rin que estas...

Sus palabras fueron silenciadas por una boca demandante y feroz. Intentó empujarla, pero su cuerpo no obedecía a su cerebro. Tampoco el hecho de que la chica estuviera metiendo su lengua hasta su garganta no ayudaba en nada. La sostuvo de la cintura y la acercó aún más a él evitando que se fuese a dar un mal golpe al mismo tiempo que respondía a la ferocidad con la misma hambre. Sabía que el alcohol estaba ejerciendo influencia en el y que probablemente se fuera arrepentir en la mañana, pero, maldición, el era un hombre con desos.

En otro lugar de la casa.

Fue consciente de dos cosas, que estaba sobre una superficie blanda y de que su estomago estaba rugiendo como loco. Abrió lentamente los ojos y se dio cuenta de que estaba sobre su cama en su habitación. Estrujó sus ojos con flojera, no recordaba para nada haberse quedado dormida.

Alejó la manta que la cubría, tiró los pies al vacío y se sentó en la cama ¿cuanto tiempo habrá dormido? No lo recordaba con exactitud. Llegó de la escuela y se echó en su cama a llorar como una magdalena y de allí jamás se levantó. Su estómago volvió a reclamar por comida.

Genial, eso te pasa por saltarte la cena.

Encendió la luz del flash de su telefono e iluminó la obscura habitación en busca de sus pantuflas. Las encontró debajo de la cama junto con una pequeña caja con tapa dorada y un moño. Extrañada la tomó junto con el calzado y la colocó sobre su cama. Observó el reloj y notó que eran ya las 12:00 am, redirigio su mirada hacía la pequeña cajita preguntándose como había llegado alli.

Tu, mi pecado capitalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora