En el ático de uno de los rascacielos de la Port Mafia, Chuuya llegaba gritando de su última revisión, le salía humo por las orejas, cosa que le hacía gracia al castaño, al tiempo que lo intrigaba.
- ¿Qué ha pasado?
- ¡Tú hija es lo que ha pasado! ¡Maldita cría!
- Ni ha nacido y ya debe soportar las broncas de su mami – rio- anda, cuéntame.
- ... aposté con Yosano que si ella se acababa el vino antes que yo la niña llevaría su nombre... ¡tú sabes que nadie me gana bebiendo vino!
- Y aceptaste – afirmó.
- Sí.
- Aunque estabas embarazado.
- ... - con furia se señaló el vientre - ¡Esto es tu culpa, Akiko! ¡Podría haber ganado!
El embarazo de Chuuya fue muy emocional, se enfada y lloraba a partes igual, al igual que sus antojos, que todos iban dirigidos al cuerpo de su pareja.
Llegó el día, Akiko nació totalmente sana, una niña preciosa, algo pequeña, pero bueno, es hija de Chuuya. Su cabello castaño quedaba de miedo con los grandes ojos azules que tenía, sin duda una hermosa princesita que algún día sería la mejor mafiosa o detective de Japón.
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Solo un diamante puede pulir a otro diamante
Fiksi PenggemarUna historia soukoku, shin soukoku y fukumori. Natsume-sensei sabe que las tres parejas del soble negro necesitan un empujón, por lo que prepaara un experimento, ¿podrán convivir estas parejas a solas en un apartamento? Sin poderes, sin matarse... Y...