Capítulo 31

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A la mañana siguiente, Harry podía decir que despertó siendo el hombre más feliz del mundo.

Su alfa estaba completamente dormido a un lado de él, pero con uno de sus brazos rodeando la cintura de Harry. En algún punto de la noche, Louis le había colocado una playera a Harry, pues él no recordaba haberse puesto una.

Cuando se movió un poco la mordida le dolió, dejó salir un quejido. Su alfa se despertó y se sentó en la cama como un resorte.

—¿Qué sucede? —preguntó con voz ronca.

Harry sonrió por el aspecto de su alfa. Tenía el cabello alborotado y la marca de la almohada en su mejilla derecha, sus ojos apenas estaban abiertos debido al sueño.

—Nada, alfa.

—Bien —. Se dejó caer nuevamente en la cama.

—Podría acostumbrarme a despertarme así —. Se acomodo hasta quedar encima de Louis.

Louis lo rodeó con sus brazos, Harry recostó su cabeza en el pecho del alfa.

—Pues tienes que, omega. No hay salida de esto ya —. Beso la cabeza de Harry.

—No tengo problema.

Volvieron a quedarse dormidos.

[...]

Despertaron una hora y media después. Con un Louis pendiente de Harry. Parecía perrito guardian yendo detrás del omega a cualquier lado al que iban.

—No quiero regresar a la universidad —. Protesto Harry.

—Y yo no quiero que regreses.

—Sacame y mantenme —. Sonrió Harry.

—¿Disculpa? Omega, tú vas a mantenerme, de los dos, tu eres el que estudia aún —. Dijo mientras terminaba de echar sus cosas en el pequeño bolso.

—Que injusticia —. Hizo un puchero, que Louis beso.

Salieron de la cabaña a eso de las cuatro de la tarde, luego de haber comido un sándwich que Harry preparó rápido.

En el camino se detuvieron por gasolina y de paso a comprar frituras y golosinas.

[...]

Llegaron a la casa y todos parecían querer estar encima de Harry.

—¡Es preciosa! —Exclamó Phoebe.

—¡Hasta que haces algo bien, Louis! —Esa fue Daisy.

Louis la miro mal— Alejate de mi omega, fastidiosa.

Harry solo reía, encantado con la situación.

—Me alegro por ustedes chicos, de verdad. Les deseo todo lo bueno, saben que si necesitan algo… —Damon parecía querer llorar.

—Gracias, Damon —. Harry le sonrió.

—Gracias, mamá —. Le mando un beso y sonrió.

Damon jamás terminaría de explicar la felicidad que sintió en ese momento. Viendo a su cachorro ser feliz, tan feliz como le hubiera gustado verlo siempre.

Si tuviera que pasar una y otra vez el infierno que pasó con Jonh simplemente para ver a sus tres cachorros así de felices, con gusto lo haría. Lo único que le agradecía a el desgraciado de Jonh, es que le había dado tres cachorros increíbles.

[...]

El miércoles que Harry tuvo clases libres, fueron a visitar a la familia de Harry. Rosy chillo de la emoción y los abrazo a los dos, Des parecía no estar seguro de las emociones que sentía.

—Es…difícil y doloroso ver cómo mi último cachorro está comenzando a hacer su vida lejos de casa, pero es una felicidad también, son muchas emociones…

Harry corrió a abrazarlo y darle un beso en la mejilla.

—Oh, papá. Nada cambiará, siempre seré tu bebé.

—Claramente.

Rosy y Louis fueron los chefs esa noche. Louis siguiendo las indicaciones, más que nada. Prepararon un rico asado, el cual Louis casi deja quemar, no sucedió, así que en realidad supo riquísimo.

Más tarde, Harry le había hecho videollamada a sus hermanas desde la habitación de Louis. Gemma le había dado otro discurso de hermana protectora a Louis, y Cristina había gritado de emoción, deseándoles lo mejor.

Mientras estaban acostados, Harry se dio cuenta que prácticamente ya vivía en la casa de Louis. Había más ropa ahí que la que había en la habitación de la facultad. Había libros de la universidad, tareas. Todas sus cosas ya estaban ahí. Tenía su habitación en la facultad de adorno.

Louis se acomodó mejor a un lado de Harry, hundiendo su nariz en su cuello, aspirando el aroma del omega y dándole algunos besos en la marca.

—Ay, Louis, no hagas eso —. Se encogió en su lugar.

—¿Por qué, omega? —Bromeo. Siguiendo con los besos y las lamidas.

—Porque estamos en casa de tu madre y…—jadeo  bajito cuando Louis mordió despacio— deja de hacerlo, alfa.

Louis bufó en broma y se separó— Omega aburrido.

—No voy a faltarle el respeto a tu madre.

—Aburrido —. Canto.

Harry le dió un golpecito en el pecho, el alfa se lo regresó pero sin medir su fuerza, dándole un golpe algo fuerte.

—¡Ay, Louis! —se llevó una mano a su pecho. Louis soltó una carcajada.

—Te llevas y no te aguantas, omega —. Siguió riendo.

Harry agarró un cojín y le pegó en la cara, riéndose, pegándole en la nariz.

—¡Carajo! —se quejó el alfa, sobándose su nariz— Si así nos vamos a llevar.

Se subió encima de Harry haciéndole cosquillas.

—¡No, Louis! ¡Las cosquillas no valen!

Louis lo ignoró y siguió con su acción. Con un Harry pegándole con un cojín y tratando de quitárselo de encima. De un momento a otro, cayeron de la cama.

—¡Puta madre! —grito Louis al caer de espalda. Harry rió pues él había caído encima del alfa.

Se quedaron ahí un rato, tratando de regular sus respiraciones a causa de la risa.

—Te amo, omega.

—Te amo, alfa.

»»»»»

penúltimo capítulo.

los, las y les amo <3

blue, xx

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