Todo ha de oler a café, cocoa, manzana y canela. No a manzanilla.
Nada era como ella en esa época. Tal vez solo la parte fría y la que se oculta para seguir con vida en primavera.
Emma observaba la calle blanca desde la ventana de su sala con un café ya frío entre sus manos. No había visto a Dallas desde la noche en la que le contó lo de sus padres, el accidente, y empapeló su cuarto con manzanillas.
Debía admitir que lo extrañaba.
Había pasado toda la tarde recostada en el sofá viendo series en Netflix con sus hermanas hasta que estas se esfumaron a sus respectivas habitaciones, porque claro esta, hoy no trabajaba Dallas en el videoclub. Solo fue en el momento en el que su padre llego para ver su partido de baisball cuando ella decidio pararse para preparar un café.
Emma finalmente se levanto por segunda vez de su comodo puesto en el que llevaba todo el día para ir a la cocina a dejar su taza y vrindar algo de ayuda a su madre. Al entrar esta estaba colocando algo de sopa en unos platos, Emma se acerco y probó un poco de esta.
-Emma, ¿Quién era aquel chico? El que trajiste hace algunas noches.- Preguntó su madre cuando llego a su lado en la cocina , con el mismo interés sobre la plática como Emma lo tenía ante el ruido que emitia el televisor.
-¿Un chico? ¿Emma con un chico?- dijo su hermana mayor bajando las escaleras en tono de burla, la menor que iba tras de ella se rió ante aquel comentario.
-No importa quién allá sido, lo importante es que finalmente tendrá un novio.
Su madre estaba sirviendo los platos y haciendo pequeños bailes cómicos gracias a que "su pequeña" mostraba señales de interés por un muchacho.
-Hija, ¿Por qué tragiste a un muchacho aquí? No estarán haciéndolo sin protección o si?- preguntó su padre tomando lugar en la mesa junto a sus hermanas.
Todas las mujeres dentro de la casa soltaron una carcajada a excepción de Emma que estaba sintiendo como tonos rojizos pintaban su cara.
-No se burlen, ¡Esto es serio! ¿Y qué si a mi pequeña terminan haciéndole daño?
Ese era su padre, el adulto que intenta proteger a todas las mujeres de la casa, incluso a su pequeña aun cuando esta no era la menor de todas. Ya una vez que estaban todos sentados se acercaron a la mesa y comenzaron a servir comida sobre sus platos.
-No es mi novio ni siquiera se acerca.
Emma sirvio algo de pasta sobre su ensalada. Le dolía admitirlo pero no eran mas que conocidos.
-¿Quién es cielo?-dijo su madre tomando un plato con ensalada.- ¿Alguien de la escuela? Tal vez lo conozca tu hermana.
Su hermana mayor volteo a verla en modo complice, claro que conocia a todos los alumno. Emma trago un pedazo de lechuga en busca de las palabras correctas- Bu- Bueno, si. Es...complicado.- sabía que asistían a la misma escuela, el lugar en donde trabajaba y las cosas que él le había contado cuando pasaron tiempo viendo películas y decorando su habitación, más solo eso.- Su nombre es Dallas.
-¿Qué Dallas? ¿Uno extraño super sexy? Ya sabes el de natación.
-¿No es un Dallas un poco nerd de primer año?
-¿Qué no es Daniel?- no conocía a otro Dallas en toda la escuela, estaba tan desconectada.
-Chicas, de verdad es incomodo escucharlas hablar de esto. Soy su padre tengan piedad.
• • •
-¿Por qué nunca antes había visto esa blusa?
Las hermanas habían conseguido escapar cuando la cena termino, y claro estas aprovecharon la ocasión para seguir con el bombardeo a Emma de preguntas sobre el chico misterioso.
Las tres habían entrado a la habitación, fue ahí cuando Emma se decidió por cerrar la puerta para que en caso de que decidieran escuchar algo sus padres de entre el ruido de la película que acababan de poner, no distinguieran la conversación de las hermana.
-¿Por qué no es mía quizá? -Llevaba puesta la camisa blanca a rayas negras que Dallas le habia prestado despues de aquella tarde lluviosa en la renta de videos.
-¿Es de Dallas?
-¿Desde cuando la tienes? ¿De verdad dormiste con él?.- la menor fue la primera en tomar lugar sobre la cama, dejando caer todo su peso boca abajo sobre las sabanas sin arreglar de Emma.
-Por supuesto que no, él solo me la presto.- De verdad lo habia hecho, no de la forma que sus hermanas esperaban, pero lo hizo. Emma no pensaba devolver esa playera en un futuro próximo.
-Yo creo que te queda bien, pero seguro le queda mejor a él. ¿Qué tal se ve con ella?
-Mejor aún, ¿Cómo se ve sin ella?- prrgunto la mayor mientras tomaba un cojín azul con pequeñas flores blancas sobre él, y lo abrazaba ignorando la mirada que Emma le lanzaba.
-No hice nada con él, de verdad.-dijo ella corriendo a las dos de su cuarto.- sólo pasamos un tiempo juntos eso es todo.
-¿Te gusta Dallas?.- preguntaron las dos viéndose a los ojos y luego a sus hermana.
-Pu-puede que si.- dijo cerrando la puerta frente a ellas.- puede que tal vez hasta lo quiera.
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n/a: *capítulo largo wuhuu* la verdad me cuesta escribir justo ahora. Pero hey, "tarde pero seguro". Disfruten el capítulo, a esto le falta cada vez menos.
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Chamomile [1]
Short Story"Donde la chica de cabello castaño adora la manzanilla. Y el chico que la observa adora que aquel olor sea de ella."