Un rato después de que Jackson se fuera, me senté en el pequeño sillón frente al tocador que se encontraba en la habitación.Con un peine que tomé de ahí, peiné las puntas enredadas.
Claramente con mi brazo bueno.
Mis ojos fueron a mi nariz morada, si que se veía mal. Estaba hinchada hasta más no poder. Una uva gigante en el medio de mi cara.
No obstante, algo llamó mi atención.
El reflejo de mi secuestrador dándome la espalda, dado que estaba viendo a la ventana. No lo escuché entrar.
- Quiero irme.
- lo sé.
- No entiend...
- Hoy mismo te vas.
¿Oí bien? No, no lo creo, es una alucinación de mi mente debido al golpe.
Eso es ¿No?.
- Repítelo.
Para cuando iba a hacer lo pedido, un pájaro se estrella contra la ventana.
El golpe en seco me sobresalta y a Lían lo inmuta.
Luego, el pájaro blanco se recompone aún pegado al cristal y empieza a picotear. Fuerte y decidido.
- Cristin- Le presto atención, su espalda se ha tensado y sus manos están a la lados de su cuerpo- Escóndete.
El oxígeno no está llegando por completo a mí tonto cerebro, porque en estos momentos de mi vida estoy tratando de encontrar un lugar el cual ocultarme.
Bajo a la primera planta y voy a la cocina buscando algún hueco pequeño. Entonces es cuando veo una puerta gris aún lado del refrigerador y la abro.
La primera impresión que tengo es oscuridad, y fue predecible saber que era un cuarto de tamaño reducido. Con mis manos palpé los posibles objetivo y si, me topé con cosas de limpieza.
Hasta ahora me doy cuenta que tengo el pecho agitado y la respiración dificultosa.
Unos minutos después se escuchan pisadas afuera, y eso me aterra, porque estoy segura de que esas pisadas no son de Lían.
Mucho menos de Jackson.
Mi estómago se retorció por dentro al oir oir cristales quebrarse.
Rápidamente agarré lo primero a mi alcance y lista para salir, la puerta se abrió.
Y el golpe que le hice un su cabeza con la escoba fue en parte algo satisfactorio, sustituyendo mis nervios nerviosos.
- No lo siento.
Suelto la escoba y muro el desastre en la cocina llena de vidrios rotos y sangre escurriendo de la encimera, me acerco mientras observo al pájaro blanco destripado.
Literalmente.
Cuatro zarpazos se denotan en su pequeño estómago, y sigue brotando más sangre de esas pequeñas pero profundas cortadas.
- ¿Que fue eso?
Lían carraspea.
- Ve a tu habitación, necesito terminar con el lazo.
- Lían, ¿Que está pasando?.
- Te di una orden Cristin.
¿Acaso es sordo?
- Y yo te pregunté.
Niega con la cabeza, acabando con todas mis esperanzas a que me contestase.
Palpo el estómago del ave, por consiguiente mi dedo se unta de su sangre, de inmediato esta suelta un olor putrefacto.
![](https://img.wattpad.com/cover/287393556-288-k686710.jpg)
ESTÁS LEYENDO
El Rey Alfa
Manusia SerigalaCristin Wilson una joven de 18 años de Nueva York, con una vida normal como cualquier adolescente,que se muda con su madre a Wyoming por un cambio de ambiente pero pronto estara por descubrir una mundo totalmente diferente, un mundo sobrenatural . ...