Fictober: Denji x Power [Chainsaw Man ; au]

13. I don't want to do that

La fiesta apenas había comenzado a ponerse buena. Adentro de la casa olía a caramelo, palomitas y sudor. Algunos chicos estaban bailando en la pequeña pista de baile improvisada que el anfitrión había hecho minutos después de que llegaran los invitados.
La música estaba un poco fuerte.

—Ya es tu turno.

Por el otro lado de la fiesta, un pequeño grupo de invitados se encontraban jugando al mítico y siempre lleno de malentendidos juego de la botella. 

—Aki, ya es tu turno, ¡pon atención! —Himeno, una de las jóvenes que estaban jugando junto con los demás le dio un codazo a otro jugador. Parecía que se llevaban bien.

—¡Ah, lo siento! —Aki tomó la botella y la hizo girar. Se detuvo, apuntando la boquilla a Kobeni, quien abrió los ojos sorprendida.

—Está apuntando a Denji —señaló al susodicho, con el dedo tembloroso.

—¡No seas tan cobarde, Kobeni! ¡Es tu turno para reto!

—¡Noooo! —Kobeni se cubrió el rostro con ambas manos—. No me jodan con eso...

—Kobeni —llamó Aki—. ¡Te reto a que vayas corriendo hasta el medio de la pista y empujes con el trasero al chico más popular!

—¡Jódete, no haré eso!

—¡Entonces te mereces un castigo! —Sakura le señaló con picardía—. ¡Hay que encerrarla en el ropero de la madre de Denji!

—¡No! ¡Mejor hagamosla beber una pasta hecha de papas fritas y refresco!

—¡Me largo de aquí! Quédense con su estúpido juego de retos e idioteces... —Kobeni se puso de pie y se fue directamente a la mesa de botanas. Los demás la miraron alejarse sin preocuparse. Era común que hiciera cosas como esa.

—¡Entonces es el turno de Denji para girar la botella!

—¿Qué? ¿Por qué? Ni siquiera debería ser mi turno si Kobeni no estaba a mi lado.

—Te quejas mucho por un juego tan ñoño como éste —Himeno tomó la botella con una de sus manos y  le dio un golpe en la cabeza a Denji—. Gírala —ordenó.

Denji rodó los ojos, le arrebató la botella y la dejó en el suelo.
—¿Por qué no la giras tú? Parece que estás muriendo porque suceda algo que tú quieres.

Himeno alzó las cejas. Qué astucia.
—¿Piensas que lo estoy haciendo porque espero algo?

—Ya, ya, chicos... Se están tomando muy personal ésto. ¿Por qué no mejor hacemos otra cosa? 

—Parece que tienen ganas de drama —Sakura reviró sus ojos también—. ¡Yo la voy a girar por ustedes, idiotas!

Puso la mano encima del frasco y lo hizo rodar con todas sus fuerzas. La botella se movió un poco de su lugar de origen; casi parecía que iba a romperse.
Sakura celebraba en su lugar su tan buena bateada.

La botella apuntó a Denji. 

—¡Sí! —grito Himeno, extasiada—. ¡Ahora no habrá escapatoria para ti!

—¿Cuál será su reto? —preguntó Aki.

—Quiero que Denji y Sakura se besen. ¿Es mucho pedir?

Denji se puso pálido. Negó con la cabeza e hizo una mueca de desaprobación. Himeno dió palmaditas al aire, y Aki sonrió gustoso por su venganza.
Sakura no perdía la determinación.

—¡Beso, beso, beso! 

—No voy a besar a nadie.

—¿Qué? ¿Te da miedo que alguien como yo te dé un buen beso? Apuesto a que eres bastante malo —Sakura se cruzó de brazos, orgullosa de sus palabras.

—No. Sólo no quiero hacer nada que no me apetezca hacer. ¿Por qué besaría a alguien que ni siquiera me gusta?

—Porque es un reto, imbécil. 

—Reto que no voy a realizar.

—Entonces tu castigo es besar a Sakura —dijo Aki, con la misma sonrisa en su rostro—. ¡Beso, beso, beso!

Sakura se acercó de golpe a Denji.
—No será de lengua. Te lo juro.

—¡Hazte a un lado!

Denji salió disparado de las garras de Sakura, quien no paraba de reír por la situación tan incómoda.
Al final, no se besaron. Aunque las ganas no les faltaron a ninguno de los dos.