4 de octubre del 2022Los chicos estaban preocupados por la cita. Obvio, ellos ya se habían juntado antes, pero esta era diferente, ahora era una juntada de dos jóvenes amantes. Spreen era el más nervioso de los dos como siempre, era el más fácil de poner nervioso de los dos, era una cosa bastante relajada, pero el chico de la máscara iba a ir más elegante que nunca. El usaba un traje negro con una camisa blanca, el hechicero usaba una camisa azul con un pantalón de vestir negro y un saco del mismo color.
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Ya era hora, Spreen había llegado bastante temprano, entonces se había apoyado en una columna del restaurante mirando el celular.
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Cinco minutos tarde, Spreen seguía esperando, eran sólo las nueve y cinco. Estaba un poco cansado de estar parado, llevaba parado unos 18 minutos. Aún tenía la esperanza de que Juan iba a ir.
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Ya eran 20 minutos, se había cansado. Lo aceptó, lo habían dejado plantado. Se dio la vuelta y se fue a su casa. Sus hermosos ojos marrones se habían empezado a cristalizar lentamente, una lágrima traicionera lo expuso, su nariz se había puesto un poco roja. Más lágrimas salieron de sus ojos, el chico se sacó la máscara, no quería saber nada, estaba lleno de ira y tristeza, hasta que le pareció escuchar algo...
- ¡Spreen! - el chico mencionado volteó a verle, era Juan - ¡Perdóname, mi amor, me atrasé por el profeta que me había citado a ultimo momento y me había olvidado el celular para hablarte!
- ¿Sos pelotudo o te haces, Juan?
- ¿Me perdonas? - se fue acercando a Spreen, algo llamaba su atención.
- Si, ya fue. Te perdono - Juan colocó su mano izquierda en el mentón del otro, para después volver a unir sus labios, como esa cálida noche... Spreen correspondió el beso, era un beso suave, pero se fue transformando en un beso intenso, Juan quería llegar a otro nivel pero a Spreen le parecía muy temprano para eso, ni siquiera eran pareja. Se terminaron separando por la falta de aire, a sus lenguas las unía un hilo de saliva. Spreen tomó la iniciativa de la situación, era el momento perfecto, la Luna les deba directamente...- Oye, Juan
- ¿Si?
- ¿Queres ser mi novio?
- Acepto, SpreensitoDespués de eso, Spreen le dió un pico al otro, era obvio, esta perdidamente enamorado.
- ¿Entramos al restaurante?
- Para eso vinimosJuan y Spreen entraron al restaurante, la pasaron bastante bien y la comida era exquisita, fue una noche sumamente hermosa para ambos. Juan no pudo parar de ver ni por un segundo a Spreen, su novio, él no lo iba a abandonar como Rubi, Spreen va a ser la luz de Juan por el resto de su vida, ya estaba decidido, lo iba a amar para siempre y por siempre.
Salieron del restaurante a las diez y media pasadas, se estaban riendo, ¿de qué? Ni idea. Lentamente la luna brillaba cada vez más, como ya era tarde Juan invitó a Spreen a dormir a su casa, el otro acepto esa propuesta.
Durmieron en la cama de una plaza y media del hechicero, durmieron bastante pegados, como ya dije, no era una cama matrimonial (dos plazas).___
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Entonces esto es amor... - Spruan
FanfictionUna historia, en donde los cubitos Spreen e Juan, se enamoran y llegan a ser novios. _ Si se lo mandan a los stramers elimino la historia. Bottom!Spreen Top!Juan