Capítulo 10: "3 de la mañana"

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Cuando Vicky y yo llegamos al apartamento, directamente me voy a la ducha y empiezo a llorar en silencio. El agua logra calmarme un poco, al salir de la ducha me pongo el pijama y me voy a dormir sin comer nada.

Me despierto a las 3 de la mañana para ir al baño y ver mi móvil por si tengo algún mensaje: nada, no tengo nada. Voy al baño y vuelvo a dormir.

La luz del sol me despierta a las 9, me levanto sin apetito. Agarro el móvil y me voy al salón con mi sudadera para llorar. Es raro tener una sudadera para esos momentos, pero yo soy así. Siempre que necesito llorar me meto literalmente entera dentro de la sudadera y no hago nada en todo el día.

Más tarde se despierta Vicky y se dirige hacia la cocina.

—¿Quieres desayunar? Voy a hacer tortitas.—dice Vicky.

—No gracias, no tengo hambre...—le digo desanimada.

—Pero T/N tienes que comer algo.—dice preocupada Vicky buscando la sartén.—Aunque sea un yogur.—sigue diciendo ya con la sartén en la mano.

—De verdad Vicky, no tengo hambre, no quiero comer nada.—le digo.—pero un vaso de agua sí te acepto.—le digo un poco (muy poco) más animada.

—Bueno vale...—dice pensativa. Entonces abre el grifo, coge un vaso de agua y lo llena. Sale de la cocina y me da el vaso.

Un par de horas más tarde, me llega una foto que me ha enviado Sebas, está en el aeropuerto con la capucha puesta y sonriendo (se nota que es una sonrisa medio fingida pero sale hermoso). De repente se me escapa una pequeña sonrisa pero esa pequeña sonrisa viene acompañada de lágrimas.

Vicky se acerca y me pregunta que me pasa.

—Vicky, me ha enviado una foto en el aeropuerto... Está guapísimo, le extraño mucho Vicky.—le digo empezando a llorar.

—Hey T/N tranquila, ya verás como pronto os volveréis a ver. Ya verás como todo estará de nuevo bien.—dice segura de lo que me acaba de decir.

El día se ha pasado demasiado lento, los segundos parecían horas y las horas días. Ya es de noche y la verdad es que el apetito me ha vuelto, tengo bastante hambre. Así que decido levantarme por fin de la cama e ir a la cocina a ver si hay algo rápido en la nevera. Me fijo en que hay unas galletas (mis favoritas, de chocolate blanco rellenas de caramelo). Las cojo y me siento en la encimera. 

Ya han pasado 5 días desde que Sebas se fue...

Le echo muchísimo de menos, él y yo hemos seguido hablando por mensaje, le he dicho lo mucho que lo quiero y lo mucho que me gustaría estar ahí con él. Él me ha dicho que me ama, y que hará lo posible para venir otra temporada a Bogotá. Eso me mantiene algo esperanzada, pero igualmente estoy fatal, llevo 5 días sin hacer nada, sin salir de casa, sin arreglarme.

Vicky ya está muy preocupada por mí, ella sigue intentando animarme, sigue intentando hacer que salga de casa o que salga de una vez de mi sudadera, pero no lo consigue. 

Ahora mismo son las nueve de la noche, Vicky está en la cocina preparando pizza (mi favorita, la de barbacoa). Yo estoy como siempre en el sofá viendo todas y cada una de las fotos de Sebas, las fotos que nos hemos hecho durante el tiempo que hemos estado juntos. Recordando el día en que me subió al escenario, el día en que me estuvo mirando en el restaurante... Recordando cada día que representa nuestra relación. 

Ya hemos cenado, ya me he dado una ducha y ya estoy en pijama para irme a dormir. Son las doce y media de la noche, estoy que me muero del sueño, pero no consigo dormirme. Vicky ya está dormida en su dormitorio, me dijo que cualquier cosa la despertara, pero no la voy a despertar, la pobre necesita descansar. 

Me quedo dormida mirando las fotos de Sebas, pero a las 3 de la mañana me despierto, fijándome en un mensaje que tengo... Ese mensaje es de mi ex, otra vez ese maldito cabrón me está buscando. Directamente no voy a leer su mensaje, así que apago el móvil y me duermo de nuevo.

Ya es por la mañana, y lo primero que encuentro en la barra de notificaciones es una llamada perdida de mi ex y 3 mensajes de Sebas. A la llamada perdida de mi ex no le hago ni caso, pero lo primero que hago es abrir los mensajes de Sebas. Me ha escrito buenos días y poco más. Me ha dicho que la vida allí sin mí está siendo muy dura, que no deja de soñar conmigo, de pensar en mí. 

—Buenos días T/N—dice Vicky—¿Cómo estás hoy?—pregunta preocupada.

—Buenos días, pues hoy estoy igual que ayer... —le digo—anoche me llegó un mensaje de Javier.—le digo sin darle mucha importancia.

—¿Qué quería ese desgraciado?—dijo con cara sarcástica.

—Nada, volver, o decirme que lo siento que me sigue amando...—le digo—Ese tío ya me da igual Vicky, solo me importa Sebas ahora mismo.—le digo otra vez desanimada.

Sin decir nada más, Vicky se va a la cocina y prepara el desayuno. Y me llega un mensaje de Sebas... Es una canción, me ha enviado "Sin ti". Esa canción es una de mis favoritas, es una de las que me ha hecho ser la primera fan de Sebas.

Yo le escribo un Te amo 🥰 y apago el móvil para ir a desayunar. 

Desde que lo escuché cantar (Sebastián Yatra y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora