¿Por qué a mí?

El comienzo de mi nueva vida

Narra Kagome

Ya han pasado tres años desde que el pozo que había en el templo de mi familia despareciera por tres días...

Para mí fueron minutos en medio de una obscuridad, una obscuridad que casi me consume, de no haber sido por Inuyasha hubiera pedido un deseo incorrecto a la Shikon no tama y me hubiera quedado encerrada en la oscuridad por la eternidad junto con la Sacerdotisa Midoriko y los monstruos de la perla.

Le pedí a la perla como deseo que desapareciera, luego de eso todo se iluminó, Inuyasha y yo salimos abrazados del otro lado del pozo, mi familia dice que un pilar de luz los alertó, ellos estaban muy preocupados por mí, vi a mi madre y corrí a sus brazos, no soporto verla llorar, siento su calidez y creo que al fin todo estará bien, una sonrisa se escapa de mi rostro.

Pero mi alegría no duró mucho, cuando me di la vuelta para agradecerle a Inuyasha el haberme salvado el pozo empezó a brillar e Inuyasha desapareció rodeado de una luz, desde entonces el pozo no ha vuelto a funcionar y ya no puedo ver a Inuyasha, hoy me gradué de la secundaria y no sé qué voy a hacer con mi vida, no sé qué estudiar o a que dedicarme, ya estoy de vuelta en mi casa con mi familia, pero por alguna razón me dirijo al pozo otra vez.

¿El pozo dejó de funcionar debido a mis sentimientos?

Cuando el pozo desapareció y quedé atrapada en la oscuridad, tenía tanto miedo y estaba tan triste, pero no me di cuenta de que había estado en la oscuridad por 3 días enteros e hice que mi familia se preocupara y estuvieran tan tristes como yo, me sentí muy mal por eso, pero estaba muy feliz de poder volver aquí, luego de eso, el pozo se cerró.

Inuyasha he estado pensando en ti todo este tiempo...
la razón por la cual fui enviada a la época Sengoku...
y la razón de que la Shikon no tama desapareciera, mi trabajo está terminando y pasaré el resto de mi vida en este mundo...

Un mundo sin ti...

Pero Inuyasha...

¡Yo quiero...verte!

¿Kagome que sucede hija? Me preguntó mi madre, la madre a la cual amo tanto.

Mamá...el cielo, mamá yo...dije al ver al interior del pozo

Kagome, hija está bien me dijo mi madre entendiendo mi mirada, me dedicó una sonrisa y me sentí libre.

Entonces salté adentro del pozo y una mano me recibió, era Inuyasha, él me sacó del pozo y nuestras miradas se conectaron.

Inuyasha, lo siento ¿me estabas esperando? Le dije.

Kago...baka me dijo Inuyasha y me abrazó; le correspondí, antes de darnos un beso llegaron Shippo, Sango y Miroku.

Chicos regresé dije al ver de nuevo a mis amigos. Me sentía muy feliz, no recuerdo mucho sobre lo que pasó después, supongo que de la emoción y el cansancio no me ha dado tiempo de procesar toda la información.

Tiempo después...

Ya han pasado tres meses desde que volví a la época Sengoku. Las cosas han cambiado un poco, Miroku y Sango se casaron al poco tiempo de la derrota de Naraku, los casó el maestro Mushin, el que crió a Miroku desde que perdió a su padre, tuvieron unas gemelas y un niño que nació hace poco, Rin vive en la aldea con Kaede, ella ahora es su cuidadora, pero la trata como a una nieta consentida, Shippo se va de vez en cuando a sus exámenes de zorro mágico para subir de nivel.

Por mi parte, trato de adaptarme, antes podía viajar entre las dos épocas y era más fácil vivir aquí, ahora este es mi presente y debo ajustarme a mi nueva realidad. Aquí no tengo tantas comodidades como antes.

Las cosas van bien, una vez al mes voy a clases con Jinenji a aprender sobre las plantas medicinales y su uso, el campo volvió a prosperar, pero su madre murió, fue muy duro para él, pero logró salir adelante además la relación con los aldeanos mejoró notablemente, a veces llevó a Rin conmigo Jinenji insiste en que nos parecemos.

La anciana Kaede cada día me enseña cómo manejar mejor mis poderes espirituales para que me pueda defender y ayudar a las personas, admito que como nunca pensé que podría volver dejé de practicar, hay muchas cosas que debo reaprender, después de todo tengo uno que otro conocimiento. La anciana Kaede dice que no es necesario que entrene en el mismo lugar que lo hicieron Tsubaki y Kikyo.

Aún no logro meditar como lo hace ella, pero estoy poniendo mucho de mi parte, cerca de la aldea no hay más sacerdotisas y la anciana Kaede no da abasto ella sola, no sé cómo hizo todos estos años para cuidar de Rin y de los aldeanos, algún día quisiera ser como ella.

Las cosas con Inuyasha van bien o eso creo, lo veo feliz, pero no me ha vuelto a besar desde que quedamos atrapados en el interior de la perla, las cosas en parte son como en los viejos tiempos, Inuyasha me lleva en su espalda cada vez que vamos donde Jinenji, pues como mencioné, cuando regresé a la época Sengoku no traje nada de mi época más que la ropa que traía puesta aunque ya no la uso, ya que uso la ropa de Sacerdotisa.

He avanzado mucho en este tema, ya no me siento mal por ser la reencarnación de Kikyo, no soy ella, pero de alguna forma ella y yo compartimos muchas cosas, debo admitir que es extraño usar la misma ropa que usaba ella, pero después de todo así es que se visten la mayoría de Sacerdotisas. El lazo que me une a Kikyo seguirá presente, pero más allá de hacerme sentir insegura ahora lo veo como algo único, si yo no fuera la reencarnación de Kikyo mi destino no hubiera sido este, no hubiera conocido a Inuyasha de una u otra forma Kikyo me ayudó y ella ya no está en este mundo, su alma por fin encontró descanso, o eso creo, la verdad el tema es algo complicado. 

Sango y yo somos más unidas que antes, ella siempre fue mi mejor amiga y la considero mi hermana de corazón, ahora de vez en cuando le ayudo con las gemelas. Miroku es más respetuoso que antes y Shippo no cambia, al único que no he visto es a Sesshomaru el medio hermano de Inuyasha, bueno, si lo vi pero volar a lo lejos pero no hablamos, creo que es mi "cuñado" aunque no sé si ese sea el tipo de relación que tenemos, después de todo Inuyasha no me ha pedido nada formalmente aunque vivamos en la misma cabaña lo cual es extraño, no se siente como un hogar, dormimos en cuartos separados, no es que no aprecie mi privacidad pero no sé, es extraño, cuando volví no le dí mucha importancia a ese detalle pero conforme pasan los días más extraña me siento con respecto a la situación no obstante trato de no pensar mucho en ello, en algún momento lo hablaré con Inuyasha. 

Los días siguen pasando y me siento muy feliz por estar con las personas que quiero, no niego que extraño mucho a mi familia, lamento mucho no haberme despedido del abuelo y de Souta, pero sé que ellos me entendieron. Además, mientras Inuyasha este a mi lado no me puedo sentir sola. ¿Qué más puedo pedir?

#MiracleDR

#Editado 16-23/07/2020 y el 26/1/2021