Capítulo 19

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El padrino pasó toda la noche esperando a que saliera su amada, pero dieron las 3:00 de la mañana y nadie asomaba a la puerta, pasando 15 min se abrió la puerta, el padrino se levantó inmediatamente, él creía que era su pequeña amada pero era su amigo y hermano...

-me imaginé que estarías esperando aquí-
-¿está despierta?-
-no, se durmió hace media hora...-
-puedo...-
-llorando... ¿que pasó?-
-creo que Taylor creyó que... ni Ty ni yo hablamos de terminar cuando nos separamos-
-¿nunca le dijiste de ella?-
-creí que para ella y para mi ya había terminado todo-
-creíste mal hermano debiste hablar con ambas en su momento... pero como el hubiera no existe, debes solucionarlo... ella es la hermana de la mujer a la que amo... no quiero que las cosas se pongan incómodas, tú eres mi hermano y se que Esme no dirá nada pero Elizabeth...-
-lo sé... hablaré con Elizabeth, definitivamente con Ty... espero que Lizzie me escuche-
-¿crees que lo haga?-
-... no, pero espero equivocarme-

Al otro día Elizabeth despertó con las marcas de su corazón roto reflejadas en su rostro, sin embargo tragó todo ese dolor, pues pensaba que su hermana no necesitaba una nube negra sobre su cabeza y aún que Esmeralda no dejaba de sentirse preocupada, si no continuaba con su boda sería peor para su pequeña hermana.
Thomas por otra parte se encontraba en busca de la señorita Taylor, al encontrarla en un hotel a las afueras del lugar donde sería la boda le tomó un considerable tiempo llegar a ella...

-Ty lamentó todo lo qué pasó-
-ya se, yo también lo lamento, supongo que tanto trabajo no me dejó enterarme de que ya no teníamos nada-
-consideró que también pasé por ello-
-eres un caballero Thomas, es triste lo que vivimos pero... no lo cambiaria por nada-
-Ty tu eres una mujer tan llena de magia, estoy seguro que alguien llegará para adorarte más de lo que yo intenté-
-Thomas gracias por haber llegado como un gran amor, pero ahora me toca verte feliz con el amor de tu vida, ¿puedo saber su nombre?-
-no creo que se resuelva pero... su nombre es Elizabeth-
-¿porque no crees que se resuelva?-
-es complicado... es una persona complicada...-
-¿vale la pena?-
-es una persona complicada... pero no es su culpa... y cuando trata de abrirse a mi, siento que respiro y vivo-
-¿y que estás esperando? Debiste haber ido en su búsqueda-
-quería hablar contigo primero-
-ya lo hiciste, ahora ve tras ella-
-Gracias Ty- le dijo con un beso en la frente.
-vaya- dijo estando sola -me duele el corazón... bueno- suspiró levantándose -los artistas hacen arte con el dolor, veamos que puedo hacer...-

La hora de la boda comenzó, y el padrino logró llegar a tiempo para ponerse a un lado del novio, quien lo vio preocupado, se sentía demasiada tensión.

-hablé con Ty, todo quedó claro-
-que bien hermano-

La música comenzó a escucharse, mientras el novio se ponía nervioso, se abrieron las puertas de par en par de la hermosa iglesia que estaba decorada con flores de tonos blancos y verde esmeralda que se iluminaron con la luz del son cuando la primera persona entró por esa puerta, era Elizabeth delicadamente maquillada, reluciente y hermosa, con su vestido amarillo adornando su figura y haciendo ver su piel tan brillante y dorada como el mismo sol que entrenaba detrás de ella, ella caminaba lentamente viendo a Edward con con una sonrisa fingida debido al dolor que sentía, ella trataba con todo su ser sonreír para Edward, en ningún momento ella ve a al padrino, mientras sonreía ampliamente para su hermana, el momento más esperado llegó, la novia entró, con los ojos aperlados por las lagrimas.

-sus votos, Edward, por favor-
-Esmeralda, te amo, la primera vez que te vi con tus gafas y cabello negro suelto pérdida en los pasillos de la universidad y me preguntaste donde quedaba la clase del Dr. Bell mi corazón se detuvo y creo que lo notaste, me enamoré y debo darte las gracias por llenar mi vida de alegría, colores y música, te amo- dijo Edward al borde de las lágrimas.
-¿Esmeralda?-
-Edward, si supieras que quede embobada cuando te vi y no pude evitar acercarme- la iglesia se llenó de sonrisas -pero definitivamente tu apoyo y corazón enorme, que no me abandonó en los momentos más difíciles y que aún no me abandonan, hace que día a día me enamore aún más de ti, te amo Edward-
-y con el poder que se me ha confiado, los declaró marido y mujer, puede besar a la novia-

Las palabras tan cálidas que se compartieron en la iglesia y aún habiéndolas dicho en público siendo tan intimas hizo que el dolor de la pequeña Coral disminuyera un poco.
Terminando la ceremonia todos se dirigieron al lugar en donde sería la fiesta...

-hola- dijo el padrino.

La pequeña coral se había ido con su hermana, pero mientras todos los invitados felicitaban a la joven pareja la pequeña los veía a lo lejos con dulzura, mientras, Thomas se acercó a hablar con ella, el primer reflejo de Elizabeth fue alejarse, pero él habló con prontitud.

-la canción, ¿la vas a cantar?-
-no lo sé- dijo intentando huir.
-todo fue un malentendido... necesitamos hablar y aclarar las cosas- dijo rápidamente.
-un paso a la vez- dijo la pequeña-

El padrino sintió un gran alivio pues ella no le rechazó enteramente, él pasó a traer su guitarra cuando la pequeña le hizo una seña hacia el escenario...

-Esmeralda, se que esto es poco usual en mi, pero... quería darte un pequeño regalo... que más que regalo es solo una señal, de que todo está bien y todo estará bien...-

El padrino comenzó a tocar el instrumento de manera tan linda que el ambiente del lugar se aligeró en demasía... la pequeña coral se acercó lentamente al micrófono que se encontraba en el pedestal al centro del salón, tanto ella como el padrino, la novia y el novio notaron las temblorosas manos de Elizabeth mientras trataba de tomar el micrófono.
En ese momento Elizabeth vio como el piso se alejaba de su vista, sintió como le sudaban las manos sentía como se oprimía su cuerpo de adentro hacia afuera como si fuera a explotar pero sin contención para no lastimar a nadie.
De pronto escuchó la música de la guitarra más de cerca, Thomas se había acercado para que no escuchara más que la música, ella lo vio con sus ojos llenos de ansiedad cuando él con un gesto le dijo que viera hacia el frente, donde se encontraba Esmeralda y Edward abrasados viéndola con mucha amor, solo cantaría Para ellos, sonrió y le regaló una mirada más tranquila a su músico acompañante, buscó justamente el momento para comenzar a cantar...

"Wise men say
"Only fools rush in"
But I can't help falling in love with you...

Take my hand, take my whole life too
'Cause I can't help falling in love with you
'Cause I can't help falling in love with you
But I can't help falling in love with you..."

Mi caballero usa un Ralph Lauren [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora