KINNPORSCHE - BETTER ANGELS / THE DANGEROUS DRUG OF SEX

CAPÍTULO 9

ADVERTENCIA: Este capítulo puede contener escenas que afecten a la sensibilidad de los lectores.

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A Kinn le daba vueltas la cabeza de la rabia al punto que se sentía mareado. 

¿Cómo era posible que su vida se repitiera de la misma manera? 

¿Por qué diablos confió en Porsche y en sus palabras vacías?

"Kinn la cena está lista," le dijo Porsche con una sonrisa cuando entró en la habitación a buscarlo.

Pero él sólo lo miró con odio en su mirada mientras sostenía el sobre de manila con las fotos entre sus manos.

 "¿Qué diablos es esto?," le preguntó Kinn mirándolo con una rabia incomprensible.

"Kinn...," dijo Porsche cómo un suspiro cuando vio lo que sujetaba.

"¡¿Qué mierda es esto?!," le gritó furioso mientras sacudía el sobre en las manos y sus ojos se llenaban de odio.

"No es lo que piensas," le dijo Porsche nervioso, tratando de tranquilizarlo.

"¿Acaso crees que soy un estúpido?," le dijo como si se sintiera ofendido por sus palabras.

"Kinn, no es lo que piensas yo..."

"¿Quién tomó estas fotos?," le dijo al borde de las lágrimas de la rabia que sentía.

"Kinn..."

"¡CONTESTAME!," le gritó como un demonio.

"Vegas..," respondió Porsche a punto de llorar.

"Vegas...," dijo Kinn y sentía que la sangre se le subía a la cabeza.

"Pero no es lo que piensas, sacamos esas fotos para..."

"¡No me vengas con estupideces Porsche!," le dijo furioso mirándolo a los ojos ya que sin importar lo que dijera, no quería escuchar sus mentiras, "Estás desnudo en estas fotos..."

"Kinn..."

"Estás desnudo en su cama," le dijo lanzándole las fotos a la cara, "¿Crees que no reconocería ese estudio?"

Porsche se asustó al ver su reacción y de manera calmada trató de decirle, "Por favor Kinn, no es así, él tomó esas fotos porque..."

"¡No me interesa para qué mierda sacó esas fotos!," le dijo con el rostro totalmente transformado, "¡Estás desnudo! ¡En su cama!"

"Por favor Kinn tienes que escucharme y calmarte," le dijo tratando de acercarse, pero Kinn estaba cegado por el odio ya que sentía que toda la confianza que le había dado se había ido por la borda. Se sentía como esa vez... cuando Tawan lo traicionó.

"¡¿Acaso crees que soy un imbécil?!," le gritó como loco y golpeó la mesa de la habitación con el puño, "¡CONTÉSTAME PORSCHE!"

"No Kinn, por favor, escúchame..."

Pero en un ataque de rabia, lo tomó de las muñecas y lo empujó con violencia, golpeando su cabeza contra la pared.

"No voy a dejar que te aparte de mi lado," le dijo Kinn mirándolo con odio y de repente, como si estuviera poseído, comenzó a besarlo a la fuerza, sujetándolo contra la pared con agresividad.

"¡Kinn basta!," le gritó Porsche pero él no quería escucharlo, estaba perdido en la locura y continuaba golpeándolo contra la pared.

"¡Kinn detente!," continuó luchando por soltarse, pero él era más fuerte y continuaba introduciendo sus manos en su ropa.