Abrió los ojos viendo que estaba en la cama de su habitación completamente desnudo y un poco adolorido, Ryland estuvo a punto de preguntarse porque estaba así, pero de manera inmediata recordó que ayer había tenido una noche de placer con Noah.
Volteo al lado a ver a su lado viendo que su esposo estaba despierto mirándolo.
─ ¿Cómo amaneció el hombre mas guapo y dulce que he conocido en mis 27 años? ─pregunto con una sonrisa coqueta─
─ Bien, es solo que-
─ Lo siento si te lastime, pero tu no parabas de pedirme mas y mas, así que... jamás seria capaz de negar tan hermosa petición. ─lo interrumpió ya sabiendo lo que iba a decir─
─ ¡Cierra la boca! ─exclamo cerrando los ojos con fuerza, debido a el dolor─
Noah rio, le paso a su esposo unas pastillas para el dolor. Ese era el día en el que irían a casa de los padres de Ryland junto a los gemelos, Ryland no quería que todos se dieran cuenta, y había tenido suerte al las pastillas haberle hecho un buen efecto.
No les tomo mucho tiempo llegar a los cuatro, Ryland estaciono el auto y entraron. Lixue y Mathew estaban de pie en la puerta con una sonrisa, Ryland corrió para abrazar a su madre pero su padre se puso al frente tomándolo en brazos, algo que lo sorprendió a él y a los que lo acompañaban.
─ ¡Papá! ¿Qué haces?
─ Esa es la pregunta que te debería hacer yo a ti, hijo. ─dijo levantando una ceja─ ¿Cómo es posible que después que no pude visitarte por el trabajo a la primera que saludas es a tu mamá? ¿Ya no importo?
─ ¡Por supuesto que importas! Pero bájame que ahí están Noah y mis hijos... ─dijo avergonzado─
Mathew rio e hizo lo pedido, en ese momento los mellizos fueron a abrazar a Lixue.
─ Hola abuela, de seguro nos extrañaste. ─Izzie soltó una carcajada─
─ Obvio, si ustedes son los bebés de mi bebé. ─sonrió mirando a su hijo─
─ ¡Mamá!
Todos rieron ante la expresión de Ryland. Para él no existía nada mejor que los cariños de sus padres, pero no estaba del todo acostumbrado a que se los diera delante de Noah y sus bendiciones, dado a que a veces lo molestaban con ello.
En ese momento se encontraba con Tyler acostado en su regazo, este le había contado que a noche no había podido dormir, así que lo estaba tratando de dormir haciéndole caricias en su cabello en el sofá de la casa ajena.
─ Esto de mimar siempre a los hijos ha ido de generación en generación. ─dijo Izzie riendo─
─ Cállate, tu lo que tienes es envidia. ─respondió Tyler con simpleza─
El mestizo le hizo señas a su hija para que se sentara a su lado, ella la abrazo y él correspondió, Lixue lo miro con una sonrisa, tanto ella como su marido lo habían criado de manera respetuosa y amorosa, eso hizo que Ryland creciera teniendo una personalidad muy dulce y pacifica, y le orgullecía que él estuviera aplicando esa misma técnica de crianza con Izzie y Tyler.
Hubo un momento en el que los hermanos se habían quedado dormidos en el sofá, su padre se quito con cuidado y fue a sacar una botella de coca cola del refrigerador, camino a su habitación mientras la tomaba, se encerró allí para sacar el chupete que le habían regalado Izzie y Tyler e introducírselo en la boca.
La puerta se comenzó a abrir lentamente, Noah entro con sus cosas pues dormiría ahí con él, al verlo con ese chupete y al no reconocerlo pregunto.
─ Bebé, ¿De donde sacaste eso tan lindo?

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Exceso De Dulzura [ABDL]
RandomEsta historia trata de Ryland, un hombre de 32 años quien luce muy joven y hasta se puede decir adorable para su edad. Después de haberse divorciado de su antigua esposa tenía una buena vida con su familia y casado con otra persona. Pero en el pasad...