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Se encontraba mirando las caricaturas en la televisión, Noah estaba en la cocina preparando la cena y sus hijos en su habitación jugando videojuegos. Normalmente Ryland miraba la televisión usando el chupete dado por los gemelos, pero este ya estaba hecho pedazos, así que trataba de reemplazarlo aunque fuera con un biberón lleno de agua.

De repente eschucho el timbre de su casa ser tocado, que él supiera no esperaban visitas. Se puso rápidamente un short para cubrir el pañal que traía puesto, ya estando así abrió la puerta, viendo a una chica que le resultaba conocida.

─ Hola Ryland ¿me recuerdas? ─dijo ella─ que bueno que te encuentro, me resulto un poco complicado hallar en donde vivías. 

─ ¿Grace? ¿la amiga de Alison?

─ Si ─asintió sacando un sobre de su chaqueta─ mira corazón, se que al principio todos creían que yo era prostituta junto a Alison, pero la razón por la que me pasaba tiempo con ella era porque la intentaba ayudar por todo lo que estaba pasando, ella era mi amiga de la infancia. ─suspiro e hizo una pausa─ en realidad soy policía penitenciaria.

─ ¿En serio? ─pregunto sorprendido─

─ Así es, cariño, yo trabajo en la cárcel donde Keisha y Alison eran presas. ─le extendió la carta─ la escribió Alison para ti. Su último deseo fue que cuides de Brendan.

─ ¿Ultimo deseo? ─la miro confundido y asustado a la vez─

─ Pues... Hace dos días ocurrió algo con ellas dos..

Dos días antes

Alison se encontraba aburrida en su celda, las guardias le habían informado acerca de que tendría una nueva compañera de celda. Se sentía miserable allí, la trataban peor que a un perro de la calle, y al menos se había logrado robar una navaja por si acaso alguna de las presas tratara de agredirla.

Estaba acostada boca abajo en la cama, escucho la puerta abrirse y rápidamente ser cerrada, escucho unos pasos, extrañada pero sin muchas ganas volteo. Sus ojos se abrieron como platos.

─ ¡¿Keisha?! ¡¿Qué haces aquí?! ─exclamo enojada─

─ Como si mi vida en esta prisión no fuera lo suficientemente miserable, ahora tengo que estar encerrada con una prostituta y ladrona. ─dijo ella rodando los ojos─

─ Al menos yo no soy una asesina y maltratadora.

─ ¿Lo dices por tu marido? ¿o por la puta de Hilary?

Alison sintió su sangre hervirse, agarro bruscamente la camiseta de Keisha.

─ No encuentro palabras para describir lo miserable que eres.

─ ¡Ja! ─Keisha soltó una risa burlona, importándole poco─ miserable eres tu, vendiendo tu cuerpo y robando para comprarle los útiles escolares a tu hijo.

─ Vamos a ver si te ríes cuando pases por lo mismo. ─Alison sentía que esas palabras habían salido sin su autorización, pero eran muy sinceras─

─ ¡Ay por favor, tras de puta también exagerada! Maté a Jeremy porque creí que me iba a quitar a Ryland, en cuanto a Hilary, ella se lo busco.

─ ¿Te iba a quitar a Ryland? ¡¿acaso olvidaste la razón por la que acepto trabajar para ti?!

─ Si, para recuperarte a ti y a ese mocoso, todo por culpa tuya creyéndote esas fotos. ─se burlo─ eres igual de idiota que Hilary.

─ ¿Cómo vas a culparme a mi por eso, cuando tu eres una toxica? ¿y llamas así a la hermana de Ryland? ─lagrimas ya caían de sus ojos─

Exceso De Dulzura [ABDL] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora