°• 𝕷𝖔𝖘 𝖕𝖊𝖙𝖆𝖑𝖔𝖘 𝖉𝖊 𝖚𝖓 𝖆𝖒𝖔𝖗 𝖋𝖆𝖑𝖑𝖎𝖉𝖔•° [𝒞𝑅𝒦]

°▪︎CAPITULO #11 "Una compañía inesperada"▪︎°

Ya habían pasado unos duros y largos días desde que aquel pelirrojo se fue del castillo y tuvo los síntomas de esa peligrosa y hermosa enfermedad Aquel pelirrojo de corazón triste decidió cubrir esas flores que brotaban de su ojo con vendas algo apretadas pero al menos cumplían su función de tapar aquellas flores sangrientas de su rostro pero aún así no podía evitar escupir aquellos pétalos sangrientos que a veces no lo dejaban respirar y tapaban su garganta..

todo ese amor fallido lo había empeorado todo desde las raíces y Red velvet ya no sabia que más hacer no tenía más compañía que solo el viento frío y grueso de las mañanas y los pajaros cantando por las tardes nubladas..

...
[Red Velvet]: Llevo días aquí ¿Ahora que debería de hacer? No tengo ningún propósito por delante..

[Red Velvet]: Mi único labor fue obedecer a mi "Madre" y ahora terminé de esta horrible manera.

[Red Velvet]: Estoy enfermo gravemente y mi corazón ya no aguanta el dolor de este amor que jamás se dio por completo..

[Red Velvet]: Ya no se que más hacer ¿Pronto hallaré algún otro motivo de estar aquí?..

[Red Velvet]: No quisiera volver al oscuro lugar de esa torre..

al decir esas palabras el joven de cabello rojo solo se levanto del suelo de donde estaba y salió de su lugar de donde descansaba y al que lo llamaba refugio, Solo se quedó sentado en un tronco al lado de una fogata que el mismo había hecho para calentar sus provisiones y protegerse del frío de aquel bosque.

Era una mañana tranquila como todas aunque el ambiente se sentía algo tenso y frío, las mañanas resultaban ser el momento más tranquilo de los días de aquel pelirrojo solitario en su lugar donde acampaba ya que en el resto del día el se dedicaba a esforzarse para no vomitar aquellos pétalos y sobre todo igual salía a cazar algo para comer.. 

las provisiones no iban a durar por siempre así que el se esforzaba al buscar al sus alrededores, por suerte habían lagos cercanos donde podía pescar algunos peces y por el bosque habían demasiados animales.

Aquel pelirrojo para distraerse de su miseria y corazón roto solo se ocupaba en esforzarse en esas labores que se proponía y en no tratar de vomitar los pétalos sangrientos que salían de su garganta..