VIII

258 17 0
                                        


Maddys POV:

— Maddy hay una señora buscándote en sala de espera

— ¿Si? ¿Quién?

— No sé, dice que es familiar de un paciente y que es muy importante.

Fruncí el ceño y guardé mi mitad de sandwich que aun no terminaba, generalmente no interrumpía mis horas de comida, solo si era importante y en este caso al parecer lo era asi que arreglé mi pitufo y dejé encargado mi lonche con Kang antes de irme,

Tomé las escaleras para llegar más rápido y al llegar a la sala de espera sentí mi estómago caer, ¿era ella?.

— Hola... —saludó fría como siempre—.

— Señora Chalamet... Hola.. ¿Es usted quien me buscaba?

Asintió.

— Dígame —sonreí, escondiendo mi incomodidad—.

— Te seré breve. No quiero que sigas atendiendo a mi nieta.

Hice todo mi esfuerzo para no desfigurar mi cara, antes de su ex-cuñada, soy doctora de su nieta y tenía que mantenerme profesional.

— Disculpe, ¿hice algo malo?. Puede platicarme sus inconformidades para brindarle una mejor atención a Rosie..

— Eres la ex de mi hijo. No te quiero cerca de el.

Tragué saliva.

— Entonces no es porque hice algo mal.... no veo por qué tendría que retirarme de su cuidado entonces —me defendí—.

— ¿Acaso te crees la unica oncologa pediatra del mundo? —negué— tan egoísta como siempre.

— Señora por favor... no le he faltado el respeto en ningún momento, he cumplido profesionalmente con mi deber como su pediatra...

— ¿Entonces ignorarás mi petición de retirarte?

Mi piel se erizo.

— Asi es. No hay justificación para ello, yo estoy manejando bien el caso, no...

— Bien, tendré que hablar y reportarte con tu superior.

Ahora si no pude evitar fruncir el ceño.

— ¿Reportarme?

— Estás acostandote con mi hijo. Estoy segura con esto te pueden despedir.

— ¡Yo no estoy..!

— Las fotos muestran lo contrario —dijo extendiendo su celular mostrando fotos de Timothée saliendo de mi departamento—.

Apreté los puños.

— Usted sabe bien que no es verdad...

— ¿A quién le importa si te revolcaste con el realmente? Las pruebas son sugirientes y puedo inventar cualquier historia, como doctora de su hija no debiste aceptarlo en tu casa toda la noche. Tengo mas fotos.

Touché. Me habia ganado. Tenía razón, podría ser despedida por esto. No pude creer el odio inexplicable que esta mujer aun me tenía.

— Está bien. Renunciaré al caso.

— Gracias a Dios.

— Pero por favor, no utilice esas fotos contra mi —pedí con mis ojos luchando contra lágrimas que querían ser liberadas— No sé por que me odia, como siempre lo ha hecho, pero por favor no cometa la bajes de arruinar mi carrera que tanto me he esforzado en construir por ser un apoyo para su hijo. Jamás tuve ni he tenido malas intenciones con el ni con Rosie. Por favor, déjeme en paz.

20 cm // Timothee ChalametDonde viven las historias. Descúbrelo ahora