20 cm // Timothee Chalamet

XIV

Maddy:

— ¡Corre! ¡Nos dejarán fuera!

Sujeté mas fuerte mi bolso para que no cayera, cuando este extendió su mano tomé de ella y trotamos juntos hasta la larga fila, ya se escuchaba musica desde dentro del recinto y habían montones de personas, dejar de tomar a penas hace un rato y venir asi habia sido un riesgo, pero lo logramos. La fila avanzó rápidamente y buscamos asientos entre la multitud, platicamos un poco de lo bonito que era el lugar y cuanto nos sorprendió la cantidad de gente presente. El espectáculo empezó y una chica vestida como diosa griega comenzó a narrar algunas leyendas de mitología griega, mientras actores personificaban con música la narración, fue un show increíblemente bonito, las luces y el anochecer congeniaban formando un espectáculo de primera.

En un momento me dediqué a mirar alrededor, el lugar estaba lleno de gente, de parejas y familias todos disfrutando un agradable rato. Y entonces me pregunté a mi misma si algun dia llegaria a ser mi caso. ¿Encontraria el amor? ¿Me llegaria a casar? ¿Podré algun dia concebir un hijo sin problemas?. Nada de ello sonaba difícil de hacer pero la vida me habia demostrado que en realidad todo es mas complicado de lo que esperaba.

¿Algun día sere feliz?

— ¿Todo bien?

Su voz me sacó de mi mente de la nada.  Lo miré de reojo, nostalgica. Pero cambie mi semblante y sonrei.

— Si, todo bien.

Los aplausos no pararon por todo el show hasta el final de este.

Tras una ceremonía final de fuegos artificiales, salimos todos del recinto, debido a la gran cantidad de gente no tuvimos mucha opción más que seguir la multitud quien nos terminó arrastrando hasta lo que parecía ser avenida principal. La noche ya era completamente oscura pero la luz del sol fue remplazada por las luces artificiales que iluminaban la ciudad, ahora locales que estaban previamente cerrados estaban abiertos.

— Parece que los clubs ya abrieron —comentó mientras mirabamos alrededor los locales donde la música ya resonaba alto y estaban repletos de adultos fumando y tomando—.

— ¿Deberíamos entrar a alguno? —sugerí tras un impulso repentino de hacer algo fuera de lo común—.

— ¿Segura? —asentí— Va.

Tomé su camisa y lo arrastré hacia el primero que nos topamos, pasamos sin problema, de inmediato me dediqué a juzgar el lugar, en realidad no estaba nada mal pero no era algo diferente a cualquier club nocturno: sillones lounge, musica, un dj, luces parpadeantes, muchísima gente y un muy, muy, fuerte olor a cigarro.

— Vamos a la barra —sugirió, asentí—.

Una vez allí, pedimos nuestras respectivas bebidas, nada complicado: una copa de champaña para mi, un ron con coca para el. El ambiente estaba un poco incómodo pero igualmente logramos pasar el rato cuando el bartender apareció con una mini ruleta de juegos de bebidas la cual nos prestó y comenzamos a jugar.

— ¡No se vale! ¡Ya me tocó shot por tercera vez seguida! —se quejó—

— Bueno, no te lo tomes... COBARDE —bromeé—.

Este achicó sus ojos en rechazo antes de tomar el shot que ya estaba servido y pasarselo de un solo trago

— Te reto a que tomes uno igual —alzó su ceja—.

— Oyeee... ¡eso no viene en la ruleta! —apunté el pequeño juguete—.

— Entonces no lo vas a hacer, ¿COBARDE?