"𝐑𝐞𝐧𝐚𝐜𝐢 𝐞𝐧 𝐃𝐢𝐚𝐛𝐨𝐥𝐢𝐤 𝐋𝐨𝐯𝐞𝐫𝐬?!".² ⁽ᴾᵃᵘˢᵃᵈᵃ⁾.

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Ambos oji ámbar se miraron con atención hasta que la menor se mostró sorprendida entre abriendo sus labios.

!!!

El rey se hizo para atrás esquivando el intento de la peli marrón en desgarrar su garganta con un wakizashi ónix, sus orbes brillaron viendo con diversión a la oji ámbar menor, que se había sentado en la cama sosteniendo con firmeza su sable.

-que desconfiada -soltó una risita alejándose un poco pero aún sentado en la cama.

-"carajo, sabía que estaría disfrazado pero no pensé en encontrarlo..como sea, en algún momento iba a ocurrir" -lo miro atenta bajando su arma para hacerla desaparecer.

-oh?, no vas a atacarme? -la miro con curiosidad ladeando levemente la cabeza.

-fue un reflejo, además no podría herirlo..o sí? -se mantuvo neutra para opacar la pisca de pánico y terror que comenzaba a querer crecer en su interior.

-no, no podrías -le volvió a sonreír viendo sus orbes para ver atento el aura que la rodeaba.

No podría contener por mucho tiempo su poder y su cuerpo estaba siendo sincero con su debilidad.

-"gonorrea malparido, no entiendo cómo no se dan cuenta que es el conejo si se parece en su forma vampírica, no que muy prodigios los malcriados?".

Era cierto, es como cuando Clark Kent se sacaba los anteojos y hola a su identidad "secreta".

-"su aura no es notoria parece la de un vampiro normal, tiene mucho poder para lograr camuflar tan bien su aura, olor y poder".

-"ya sabemos de quién salieron tan sensuales los malcriados, además de aquellas diosas, pero..sigue siendo un ojete".

Otra vez estuvo de acuerdo con su voz viendo atenta y con recelo al rey que de pronto soltó una carcajada dejándola desconcertada.

-no es propio de una dama pensar esas groserías -abrió sus ojos al extremo ante su sonrisa estilo Cheshire.

Sabía leer los pensamientos como el perezoso?.

-no, no puedo escuchar o ver los pensamientos pero es lógico lo que está pensando de mí gracias a su aura -le señaló con una mano el suelo que tenía ligeras grietas.

-...todavía no lo controlo -susurro tratando de reajar su cuerpo.

Estaba ante el rey omnipotente que la había obligado a unirse al camino de sus crías del mal, además de destruir nuevamente la vida de Yui, era alguien que gritaba peligro en todas sus facetas.

Como Alastor de Hazbin Hotel, pero no podía dejarse llevar por sus emociones u enojo ya que su poder traería consecuencias y podrían ser negativas si el conejo decidía regresar al tiempo mucho antes que haya obtenido sus poderes.

Todo el avance que hizo hasta ahora, ignorando los hechos de aquellos presentes destruidos, se iría al infierno con un solo error.

-no pienses tanto pequeña Asari, solo quiero hablar contigo -la miro divertido al verla más tensionada por sus palabras.

Parecía como un pequeño animal receloso que estaba atento a cualquiera de sus acciones.

-..por qué no evitó que le dijera la verdad a sus hijos? -si iban a hablar se iba a sacar alguna de sus dudas.

-mmm~ eso es sencillo -se levantó para acercarse a un escritorio donde había unas tazas con café -después de ver tantas líneas donde mis niños tardaban tanto tiempo en descubrir mis planes y tratar de acabar conmigo, decidí que alguien debería adelantar las cosas.