Junio, 1985.
5 meses.
— ¿Otra carta de tu extraño amiguito de pocos dientes?- preguntó Robin recargándose a mi lado sobre el mostrador y yo asentí terminando de sobar mi espalda mientras separaba la vista de la hoja.
—La recogí esta mañana del buzón de mis padres sin que se dieran cuenta.
—Aún no sabe que ya no vives con ellos ¿Verdad?- negué.
—Le diremos todo cuando vuelva del campamento.
—De igual forma no es como que sea necesario que le digan una sola palabra, creo que es lo suficientemente inteligente como para deducirlo- bromeó picando el costado de mi vientre y sonreí.
— ¿Se nota mucho?- pregunté parándome recto y colocando mi mano en la parte baja de mi abdomen. —Ya tengo 19 semanas.
— ¿Cuánto es eso?- preguntó colocando sus audífonos de diadema en su cuello.
—5 meses.
—Pues...- dijo y tomó una pausa. —Si te ven muy fijamente sí se nota, aunque el uniforme sea un par de tallas más grande, se nota- sonreí un poco bajando la vista. — ¿Piensas seguir trabajando los meses que te restan?
—No creo tener de otra.
—Deberías hablar con el gerente sobre esto Steve, es un poco peligroso.
—No, estaré bien Robin, en serio- sacudió la cabeza como negación y apretó los labios.
— ¿Ya hay alguna noticia sobre qué será?- preguntó y asentí.
Un día antes al fin pulguita se había dejado ver...
—Creo que su bebé sabe que mueren por saber su sexo.
— ¿Por qué lo dice?- preguntó Eddie frunciendo el ceño.
—Está en la posición exacta para poder verlo- dijo y Eddie y yo nos miramos con una sonrisa. — ¿Quieren saber qué es?- preguntó el médico y ambos asentimos con felicidad.
—Es una niña- susurré con un brillo en los ojos y ella cubrió su boca con ambas manos.
—Mierda, eso es increíble, felicidades- se acercó a abrazarme un poco y yo sonreí.
Con mi embarazo, Robin estaba esforzándose un poco en ser más afectiva.
—Gracias- musité y nos separamos.
— ¿Y qué tal lo tomó Eddie?
—Pues...
— ¿Cómo crees que sea? ¿Crees que su cabello sea como el tuyo o como el mío? ¿Crees que tenga tus ojos? Espero tenga tus mismos ojos, cuando era niño el tío Wayne me decía que tenía ojos de botón de chocolate, y los niños en la escuela primaria me molestaban por eso- dijo tomando una pausa después de tantas preguntas. —Uh... Nombres, necesitamos nombres ¿Qué nombre te gustaría? ¿Tienes uno en mente?
—Edd ¿No podemos discutir esto mañana?- pregunté removiéndome en la cama. —Son las 12:30 am y no has parado de hablar de eso desde que volvimos de consulta, mañana tienes trabajo.
—Sí, definitivamente no pude pararle la boca desde que nos enteramos- reí y Robin también.
—Oh, la emoción del padre primerizo- dijo con tono sarcástico.
—Exactamente.
—Pero en serio ¿Aún no tienen algún nombre?- negué. —Pueden llamarla Robin.
—Ni en tus sueños.
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ᴍᴀʀʏ ||ꜱᴛᴇᴅᴅɪᴇ||
Fanfiction𝐀 𝐯𝐞𝐜𝐞𝐬 𝐥𝐨 ú𝐧𝐢𝐜𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐧𝐞𝐜𝐞𝐬𝐢𝐭𝐚𝐬 𝐞𝐬 𝐚𝐦𝐨𝐫 𝐲 𝐮𝐧𝐚 𝐩𝐞𝐪𝐮𝐞ñ𝐚 𝐟𝐚𝐦𝐢𝐥𝐢𝐚.