—Listo- me quejé saliendo debajo del auto mientras el intenso sol golpeaba mi rostro y me cubrí con una de mis manos.
— ¿Terminaste Edd?- preguntó el señor Mason colocándose frente a mí y yo asentí mientras me sentaba.
—Sí, creo que está listo.
—Bien- respondió mirando el reloj en su muñeca y luego me miró. —Puedes irte- parpadeé un poco y miré mi reloj.
—Pero si son las 5:00 pm- levanté la vista y fruncí el ceño.
—Lo sé, pero preferiría que te fueras temprano para que pases un poco de tiempo con tu familia, tómalo como un regalo.
El señor Mason era amable... En ningún momento me juzgó a mí ni mucho menos a Steve cuando le conté sobre su condición... Tal vez después de todo si existen las buenas personas.
—En verdad gracias- dije con una sonrisa que él correspondió.
Recogí mis cosas y al salir decidí llevarle una sorpresa a mi Tev.
Las últimas semanas tanto él como mi pequeña tenían demasiadas ganas de comer hamburguesas, para mi mala suerte esos antojos siempre ocurrían de madrugada, hoy al fin cumpliría ese deseo de ambos...
—Edd- susurró sacudiendo mi hombro y rápidamente me giré para verlo.
— ¿Qué pasó?
—Tenemos hambre- murmuró algo apenado y yo me senté sobre la cama para tallar mis ojos.
—Qué novedad- respondí sarcástico y él miró sus manos mientras jugaba con ellas. — ¿De qué tienes ganas?
—Hamburguesas, con queso, sí, mucho queso- fruncí el ceño y miré el despertador.
—Amor, son las 2 de la mañana ¿Dónde se supone que voy a encontrar eso a esta hora?
—Pero tenemos hambre...- se quejó haciendo un pequeño puchero y yo solté un poco de aire.
—Tev, ¿No puedes comer algo que tengamos en la nevera?- negó.
—Es que no lo entiendes Edd, Mary y yo en verdad necesitamos comer eso.
—Pero Steve, no hay ningún lugar de comida rápida abierto a esta hora- hizo un puchero mostrando su labio inferior y miró hacia otro lado.
Verlo así me partía el corazón.
— ¿Puedo prepararles algo más?- pregunté acercándome a él para acariciar su cabello y negó. —Por favor.
—No, no quiero nada- respondió con molestia y yo separé mi mano de su cabello con cuidado para después soltar aire por la nariz. — ¿Suspiraste?
— ¿Qué?
— ¿Qué fue ese sonido?
— ¿Cuál sonido?
—Eso que hiciste, el sonido que hiciste cuando separaste tu mano de mi cabello.
—Steve por dios, no son horas de pelear, estoy cansado, tengo que dormir porque tengo que levantarme temprano para el trabajo- me quejé intentando no ser rudo, pero al parecer ni siquiera eso había servido de mucho.
—Perdón- sollozó colocando sus manos sobre sus ojos. —Soy un desconsiderado que te despierta de madrugada por culpa de mis antojos- hipó y yo ladeé la cabeza mientras lo miraba sin entender. —Soy una mala persona...- sobé su espalda con cuidado sin decir nada. —Si quieres dejarnos lo entiendo Edd, somos muy molestos.
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ᴍᴀʀʏ ||ꜱᴛᴇᴅᴅɪᴇ||
Fanfiction𝐀 𝐯𝐞𝐜𝐞𝐬 𝐥𝐨 ú𝐧𝐢𝐜𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐧𝐞𝐜𝐞𝐬𝐢𝐭𝐚𝐬 𝐞𝐬 𝐚𝐦𝐨𝐫 𝐲 𝐮𝐧𝐚 𝐩𝐞𝐪𝐮𝐞ñ𝐚 𝐟𝐚𝐦𝐢𝐥𝐢𝐚.