Capitulo IV

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Habiamos recorrido un par de calles cuando empezó a amanecer.

El hotel dónde Camila vivía estaba al otro lado de Miami, asi que decidí que primero iríamos por Rosie y luego la llevaria hasta alli.

Ella estuvo de acuerdo.

-¿Es hermoso no? - Dije al verla como observaba el amanecer, tenia su mano y su cabeza apoyada sobre la ventana.

-Si... sabes, esta es mi parte favorita del dia. El poder ver como la noche desaparece lentamente, como los colores se van mezclando cuando el sol empieza a salir formando millones de tonalidades distintas.

Pude ver un dejo de nostalgia en su mirada.

Continúo con su relato:-Cuando era niña solia levantarme temprano solo para verlos, la casa de mis padres tenia una gran terraza donde yo amaba pasar el tiempo, era el lugar perfecto para ver un amanecer.

-Supongo que todo se ve mejor desde arriba ¿no? Sientes que no eres tan insignificante.

Se giró a mi y dijo:-Exactamente. Extraño eso.

-¿Los amaneceres en anterior hogar?

-El no sentirme insignificante.

Eso si era una revelación. La divertida, hermosa e inteligente Camila se sentia insignificante.

-Extraño todo en realidad, los amaneceres en mi casa... mis padres... mi... - Hizo una leve pausa y pude notar sus ojos llorosos - mi hermana...

Necesitaba saber mas de ella.

Queria comprenderla, queria ser esa persona con quien pudiera desahogarse.

Queria ser alguien que significara algo en su vida. Y ni siquiera sabía por que.

-¿De dónde eres Camz?

¿Camz? ¿De donde habia sacado eso?
No tenia idea, sólo sabia que lo habia dicho antes de que mi cerebro pudiera procesarlo.

Sonrió ante mi apodo. Pero no dijo nada al respecto. Volvió su vista hacia la ventana y dijo:-De Cuba.

Pero ¿Porque estaba aqui? ¿Porque habia dejado a su familia?
Tambien me pareció una extraña conicidencia, mis padres tambien eran cubanos.
Sin embargo, al no darme mas detalles al respecto, deduje que no queria hablar de eso.
Supongo que seria tema de charla para otra ocasión.

Nos mantuvimos en silencio durante unos pocos minutos hasta que llegamos a casa de mis padres.

Detuve el auto y dije:-Regreso en un momento.

Mamá abrió la puerta, tenia a Rosie en sus brazos, aún dormia.
La recibí y la subí a su asiento en la parte trasera.
Volvi a mi lugar y vi a Camila observando a mi hija.

Cualquiera creeria que era una idiota por dejar a una extraña viajar conmigo y Rosie.

Pero no sentia que Camila fuera una extraña, por raro que parezca ella me inspiraba mucha confianza, mas de las que muchas personas que conocia hace años me inspiraban.

-Ella es preciosa Lauren -Dijo girando su vista hacia mi, tenia una de esas sonrisas que podia enamorar a cualquier persona.

-Lo se... - Dije y tome el camino para ir a la dirección que Camila me habia indicado antes.

-Puedes preguntar lo que quieras Camila - Dije luego de unos minutos. Sabia que ella queria saber acerca de mi historia tanto como yo queria saber de la suya.

-Cuentáme de Rosie.

Sabia que era eso lo que mas le intrigaba. Asi que sin negarme, le conté.

-Había empezado la universidad. Era la primera vez que vivia sola, por mi cuenta, sábes. Y me descontrole por completo. Salia de fiesta todas las noches, bebia... incluso llegue a hacer cosas de las que siempre voy a arrepentirme.
Logré pasar el primer con bajas notas claro, y mis padres se pusieron completamente estrictos conmigo. Pero ya no estaban alli para controlarme asi que seguia haciendo lo que no habia hecho en toda mi adolescencia, divertirme, exageradamente, pero diversión al fin.
Una de esas noches conocí a un muchacho, y me enamoré, si, asi de estúpido como suena.
Cuando me entere que estaba embarazada mis padres pensaron que debia dar a Rosie en adopción para que pudiera seguir mis estudios. Pero jamás podria habermelo perdonado, haber abandonado a mi bebe.
Asi que sólo dejé la universidad y estuve trabajando en distinto lugares hasta que llegue al club. Empecé a ganar mucho dinero y por fin pude irme de casa, consegui mi propio departamento. Todo simplemente de acomodó.

-¿Que hay de su padre?

-Es un imbécil, es hijo de una familia rica. Me dijo que yo iba a arruinarle la vida y que hice todo esto sólo para quedarme con su dinero.

-Que pedazo de mierda.

-Lo se, como sea, no volvi a saber de él y tampoco me interesó. Tenia algo mas importante y valioso por que preocuparme.

-Eres una gran madre Lauren.

-Me impresiona que digas eso... apenas me conoces.

-No hace falta conocer mucho a una persona para saber si es buena o no.
Tú lo eres Lauren y me di cuenta de eso desde el momento en el que te conoci. - Su mirada estaba fija en el ahora iluminado cielo, el sol brillaba fuertemente, casi no habia nubes. - Aqui es donde me bajo - Me dijo señalando la fachada de un modesto hotel.

Bajo del auto y asomándose por la ventana de su asiento me dijo:-Bueno, supongo que te vere en algunas horas, gracias por todo.

Tan solo asenti y esbocé una sonrisa.

Y entonces se fue.

Aunque no queria que se fuera. Si hubiese sido por mi, habria pasado el resto del dia en ese auto hablando con ella, o tan solo mirandola de reojo mientras observaba el cielo por la ventana.

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Se que este capitulo es un poco corto, pero el próximo va a ser cómo el doble de largo.

P/d: no dejen de leer mi otra historia que escribo junto a @thesefourmix, a quien le dedico este capitulo.

¡Que tengan un lindo dia!

Burn with you (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora