Miremos la historia desde otro punto de vista.
Estaba en su asiento de clase habitual mirando con desinterés la pizzara esperando a que llegase la maestra para dar clase. Escribía una que otra cosa en su cuaderno con relación a su interés amoroso, provenía de la alta cuna con la expectativa de que triunfara par finalmente casarse con otro hombre de la misma posición para aumentar su fortuna,es solo que entre esos planes de vida que estaba dispuesta a seguir por órdenes de su madre.
Era Chloe quién le hacía dudar de sus expectativas de futuro.
Al principió no le prestó atención ni a ella ni a nada que le pasará por su alrededor,era una niña mimada según todos por eso mismo no se molestaba en acercarse o prestarle atención de ningún tipo. Todo fue cambiado con el pasó del tiempo donde fue llamando su atención con pequeñas acciones,su postura altenera,su voz arrogante y su mirada orgullosa le hacía prestarle atención,era gracioso ver como discutia con todos dejandolos callados en una mala posición para luego todos concluir con que era malvada.
Ahora defenderse era malo.
Claro que no veía injusto que cada palabra que salía de sus labios fuera juzgada,cada cosa que hacía era reprochable,en definitiva era alguien que todos denigraban si hacía algo bueno o malo. Quizás por eso llamó su atención.
Luego su belleza la deslumbro,su cabello dorado era precioso era como un par de hilos de oro,esa piel era canela tan bella con ligeros toques rojizos,pero lo que más le fascinaba eran sus increíbles ojos azules,eran grandes tan expresivos y con un brillo único,era como ver un manantial.
Quiso acercarse de alguna forma a ella,pero entre la timidez y frialdad que tenía, junto al pequeño y cerrado círculo de amistad de la rubia se le hizo imposible continuar o más bien entablar una amistad.
"¿Quieres salir a tomar un helado?
Escribió eso en una nota pequeña en forma de propuesta la cuál antes de que todos llegasen le entregó aprovechando que llego temprano,la verdad la respuesta la sorprendió,un rápido y rotundo,sí.
Tras esa primera salida ambas descubrieron su interés compartido por los paisajes y música clásica siendo fantástico pues en esta época no era normal menos entre jóvenes gustar de ésas cosas. Disfrutaron y compartieron un delicioso helado del heladero Andre junto al río Sena.
Vainilla como su pelo,chocolate como sus ojos y frambuesa como sus labios.
Un precioso helado para compartir.
Ese sería el comienzo de una hermosa relación entre las chicas que inició como una amistad desinteresada donde compartían secretos,anhelos,sueños,temores e ilusiones. Poco a poco la relación fue escalando hasta que un día sin darse cuenta su relación fue amorosa.
La asiática amaba con profundidad a la burguesa,la burguesa de igual forma,pero esto no es un cuento de hadas. Un cuento de hadas,es la realidad,la realidad duele.
No sabe si fue por casualidad o se trato de algo aproposito,pero cuándo un suave beso se hizo entre ambas en clase aparecieron las más chismosas de clase logrando que su amor fuera un gran rumor de pasillos. No se avergonzaba de amarla,¿que tenía de malo? Malo sería estar con alguien a quién le jurase amor eterno cuando no lo quería para nada. Malo era engañarse.
Lo malo fue cuando el chisme llegó a oídos de su madre,fue algo muy difícil de explicar,pero más complicado de entender para la señora. Su respuesta final fue un no. Ella hubiera luchado por su amor,pero eso junto a las habladurías de la gente lograron que agachara la cabeza y aguantase todas esas estupidas cosas,hasta que ya no aguanto.
Se la paso media noche pensando que decir,como hacer que la relación fluya,más bien como decirle que la relación no podia seguir. Que no era lo suficientemente fuerte para enfrentarse a la gente hablando,a su madre a nadie.
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¡Date cuenta! ||En Edición||
Historia CortaEl rubio no sabía como hacer que los demás se dieran cuenta,no era muy inocente ni ciego,¡la estaba rechazando!