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Los alumnos se dirigieron a las salas comunes junto a los jefes de sus casas para recoger sus cosas y los padres fueron a esperarlos al gran comedor.
Los miembros del ministerio salieron del despacho dejando a Harry con Minerva y Neville.

- Así que Jefe del departamento de seguridad mágica eh, Potter. No todo han sido malas noticias hoy.- dijo Minerva sonriendo.

- No será oficial hasta mañana, yo mismo me he enterado hoy. Pero lo que ha pasado aquí requería la presencia del departamento.- contestó Potter.

- Enhorabuena, amigo, te lo mereces.- lo felicitó Neville dándole un apretón de mano.

- Estoy orgullosa se ustedes señores, ¿Quien me lo iba a decir cuando eran mis alumnos que pasarían de infringir las normas a hacerlas cumplir? En fin, voy a hacer compañía a los padres de esos chicos. Que descansen señores.- dijo Minerva antes de salir del despacho.

- ¿Te desapareces o usas los polvos flu?

- Soy más de polvos flu, del despacho a casa directamente.- respondió Neville.

Los dos amigos salieron juntos del despacho de la directora.

- ¿Esos chicos son los que nos comentaste en noche vieja?

- Los mismos, sabíamos que trataban algo pero no pensamos nunca que fuera algo tan grave. Según los otros profesores, que llevan más tiempo dándoles clase, siempre han sido buenos chicos, algo revoltosos, pero buenos al fin y al cabo, sus notas han sido bastante buenas durante los dos primeros años.

- Es una pena, ellos solos se han arruinado la vida. Y esa pobre niña...

- Ya... Me da mucha rabia no haber hecho nada antes, igual si hubiésemos hablado antes con ellos podríamos haber evitado algo.

- Ya te digo yo que no Nev, no teníais pruebas ¿Crees que os iban a confesar sus planes solo porque alguna vez los habéis pillado hablando en corrillo? Es imposible. Además han sido listos, han elegido un día en el que todo el mundo estaría en el campo viendo el partido. No te tortures, los únicos culpables son ellos.

- No es que me consuele demasiado.

- Intentaremos que esos críos vayan por el buen camino, que en unos años puedan volver al mundo mágico con todas sus condiciones. Bueno Neville, te dejo aquí.- Dijo Harry cuando llegaron al invernadero.- Dale un abrazo a Hannah.

- De tu parte, saluda a Ginny y a los niños. Espero verlos pronto.- respondió Neville.

- El próximo fin de semana organizamos una comida en casa, los niños se alegrarán de ver al tío Neville.

Se despidieron con un abrazo, Neville se dirigió a su despacho y Harry al exterior de los terrenos de Hogwarts para poder desaparecerse.

******

- ¿Nev?.- Hannah se asomó al salón.

- Hola cielo.- Dijo Neville muy cansado.

- ¿La encontrasteis?

- Sí, está a salvo, en la enfermería pero a salvo.

- ¿Que ha pasado? En el Caldero chorreante no paraban de circular rumores sobre que los del Ministerio iban de camino a Hogwarts.

Neville le contó a au mujer todo lo sucedido ese día, cenó algo ligero y se fue a la cama. Aquel había sido el día más duro desde que había entrado en Hogwarts. Tenía una mezcla extraña de sentimientos, por un lado lástima por lo que había pasado esa pobre niña y alivio porque esté sana y salva y por otro lado mucha rabia y tristeza por lo que habían hecho esos niños y el futuro que les aguardaba. Con esa sensación se quedó dormido.

Neville LongbottomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora