Jungkook
Apago la ducha y alegues los pensamientos dejaron mi mente tranquila. Me cambie rápidamente, tomé una toalla para ponérmela en el cuello y secar mi cabello que aún está mojado, abrí la puerta pero...
—Y-Yo...
Adelaida estaba frente a la puerta del baño un tanto aturdida
¿M-Me escuchó?
—¿Qué tanto escuchaste?
—Lo.. Lo siento, venia por un vaso de agua y... —dijo con un leve sonrojo en sus mejillas, definitivamente se dio cuenta de lo que estaba haciendo. —¿Sabes qué? Creo que regresaré a la habitación.
Dio media vuelta para regresar pero la sujete de la muñeca atrayéndola hacia mi quedando su espalda en mi pecho dándome la oportunidad se sentir ese rico trasero entre mi miembro.
—¿A donde crees que vas, nena? —susurre con picardía —¿Piensas escapar así como así? —mordí el lóbulo de su oreja y ella se estremeció —¿Qué ocurre? ¿Acaso te pongo nerviosa?
—Jeon, por favor detente, quedamos en que no me harías daño y mucho menos me forzarías —añadió.
—Mi amor, pero si estuvieras de acuerdo entonces no estaré faltando a mi palabra. —dije con diversión.
—No lo estoy, ¡así que suéltame! —dijo mientras intentaba liberarse de mi agarre —¿Crees que estoy aquí soportándote por gusto?
¿Qué?...¿Entonces por qué aceptó venir conmigo?
La hice girar y la estampe contra la pared, soltó un quejido de dolor pero no le tomé importancia, la sujete de ambas manos a los costados de su cabeza, quiero ser amable con ella pero simplemente me saca de quicio.
¿Qué no está aquí por gusto? ¡¿Entonces por qué demonios acepto?!
—¿Entonces por qué aceptaste venir conmigo?
Se queda en silencio, esto me esta colmando la paciencia.
—¡¡POR UN DEMONIO, RESPONDE!! —grité con furia.
—¡Maldita sea! ¡¿Hasta cuando cambiaras ese carácter?! —respondió —¡Si digo que no es por gusto es por que te odio y aún así acepte venir hasta aquí! ¡Confórmate con tenerme a tu lado y deja de interrogarme!
Esta bien, creo que eso me lo merecía.
Tome una bocanada de aire para tranquilizarme
—¿Entonces cual es la razón? —pregunté.
—¡¡Lo que yo haga a ti no te incumbe en lo más mínimo, Jeon!!
En su rostro podía notar enojo, asco y peor aún, demasiado odio y todo eso era hacia mí, ¿Qué acaso no importa lo que yo siento por ella?
La amo y me trata como un mísero bastardo.
—Por favor, dame amor... Es lo único que necesito de tí, ¿acaso estoy pidiendo demasiado? —mis ojos comenzaron a picar, lágrimas amenazaban por salir —Yo... Yo te amo ¿y crees que lo que tú hagas no me incumbe? ¿Estás bromeando? —añadí con una pequeña sonrisa que estaba intentando forzar. —¿Qué puedo hacer para que seas feliz? ¿Qué más quieres aparte de amor para que sientas algo por mí que ya no sea odio? ¡¿Qué es lo que quieres, joder?!
—Libertad...
Su voz apenas era audible.
—Eso es lo que quiero, ¡y tú me la estas quitando! —sus ojos estaban cristalizándose y lágrimas rodaron por sus delicadas mejillas una vez más, solté sus manos y di un paso atrás —Si me amas... —seca sus lágrimas —Déjame ser feliz con la persona que yo amo.
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© Hasta Tu Último Aliento [JJK] (1)
FanfictionEres mía. Aún así tenga que cortar las cabezas que sean necesarias para que nadie más pueda mirarte, ¿escuchaste?