Parte 10

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Como sabía que su estado anímico no era apropiado para conducir, había traído un chofer y también para poder sentarse a su lado durante el trayecto. así que la acompaño al vehículo con un brazo sobre los hombros para protegerla del viento. Por eso advirtió cuando se quedó dormida, recostada sobre el lateral de su cuerpo y usando su hombro como almohada.

Al llegar no la despertó, la cargo en brazos y la llevo hasta el apartamento, tumbándola en la cama, solo la soltó dos botones para que durmiera más cómoda.

Lo cierto es que estuvo mirándola dormir durante horas, no se cansaba de mirarla, era perfecta, como su cuerpo le indicaba sin descanso cada vez que la veía.

Se tumbó a su lado, no podía permitirse más y no supo cuando se quedó dormido.

Le despertó el olor a beicon y café.

De nuevo solo.

Esa mujer era altamente irritante.

Camino en silencio y la sorprendió comiendo.

-Buenos días ¿Quieres desayunar?

*-Solo tomare café, pero ya me lo sirvo yo, gracias.

-Mejor, porque estoy hambrienta, menos mal que Britany me dejo la nevera llena.

*-Uhmmm

El serbia su café

-¿Por qué no te fuiste anoche?

*-Sinceramente no tengo ningún motivo. Supongo que me dio pena dejarte sola.

¿Qué vas a hacer ahora?¿Volverás a la O.N.G?

-No puedo. Estoy amenazada de muerte, así que me han sacado del circuito de todas las organizaciones por mi propia seguridad.

*-¿Entonces?

-Me tomare una semana de completo relax, creo que no saldré de este apartamento. Leeré, escuchare música, veré televisión, me daré largos y calientes baños de espuma, engordare y después buscare trabajo.

*-Yo puedo ayudarte.

-Don...

*-Por favor. Te prometo que no te impondré nada.

-Iba a decirte que no se hacer nada, nunca he trabajado.

*-Hay un puesto vacante para personas como tú en mi empresa.

-¿Seguro? Entonces me pagaran por estarme quieta?

*-No. Es un puesto de ayudante de secretarias. Hacen recados, fotocopias, reparten el correo, cafés, pequeñas cosas que hacen que ellas pierdan horas de trabajo al cabo de la semana

-¿Y ganare para vivir?

*-De momento no tienes que preocuparte por el dinero del alquiler ¿verdad? Además siempre viene bien contar con referencias de una multinacional, para tu siguiente trabajo.

-Cierto

Se marchó tras hacerla prometer que cenaría con él.

El humor de Don, había cambiado por completo y los empleados se dieron cuenta, aunque naturalmente no se atrevían a comentarlo en voz alta, si se miraban extrañados entre ellos.

Ordeno que crearan ese puesto de trabajo y que la organizaran un lugar para ella, en otra planta, eso sí, y lo más lejos posible del ascensor. No quería verla cada vez que se abriera la puerta del mismo, cada vez que el subiera o bajara. No sería bueno para su salud mental.

Cuando la recogió para la cena, supo que la había dado una buena mirada apreciativa, era la primera vez que la veía con ropa de calle normal.

*-Te queda muy bien.

-Si claro, he perdido muchísimo peso, tengo ojeras que me llegan por la mitad de la cara y los ojos hinchados, además de que este vestido es de Britany y no es mi color preferido.

*-Pero ya has recobrado el humor y tu rostro a pesar de todos esos millones de fallos que te buscas resplandece. Lo demás es circunstancial, y me tienes a mí para ayudarte en lo que pueda, empezando por cebarte como una cerdita.

La llevo a un restaurante italiano en donde era conocido y apreciado, así que sabía que el servicio los trataría con diligencia.

-Buona será, Siñore. Bela picola sigñorina.

*-Yo pienso lo mismo Carlo. Tenemos mucho apetito, así que tráenos algo delicioso por favor.

Enseguida les sirvieron una botella de vino italiano, que ella rehusó beber. También les sirvieron un pan en forma de colines bastantes particulares, que comenzaron a ''desaparecer'' rápidamente.

Carlo a los minutos, les depositó en la mesa unos ravioli rellenos de langosta y luego un osobuco a la pimienta.

El vio como resplandecieron sus ojos ante la comida.

*-Me gustaría saber qué fue lo que te ha pasado con el pistolero.

-Bueno, realmente aun no era un pistolero, sino un muchacho asustado por su entorno.

*-Muchacho y asustado....eso no evito que te amenazara de muerte.

-Solo después de recibir presiones y amenazas por parte de su pandilla. En esas zonas si no te unes a una banda, no puedes casi sobrevivir, no eres nadie y careces de protección contra las bandas.

*-Otra vez hablamos de drogas. Puede ser que sea también el camino más fácil

-Habría que ver si tú en su situación harías otra cosa. Si uno o más de tus familiares no están metido en ese mundo, no hay dinero ni tan solo para comer y además quedas expuesto porque no tienes la protección del grupo. Sinceramente, la culpa no es de ellos que quieren sobrevivir, si no de los que realmente ganan dinero con su pobreza.

*-Entonces intentaste sacar a un joven delincuente de su pandilla?

-No. Intente que no cometiera el asesinato que le habían encargado hacer para entrar en una.

*- ¿Lo conseguiste?

Ella negó con la cabeza tristemente.

-Solo lo retrase y al final se enfadó tanto conmigo que tuve que volver.

*-Quieres pasear o que te acompañe a casa.

-A casa por favor.

La acompaño hasta la puerta del ascensor, no subió.

Y eso es lo que estuvo haciendo durante el resto de la semana, dejarla castamente y a salvo en su domicilio, aunque su cuerpo le doliera por hacerlo.

Mi Querida NoviciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora