Parte 14

45 5 0
                                    


Era una tortura.

Desde la fiesta, Naya había cambiado.

Empezando por su forma de vestir, ya que ahora llevaba blusas ajustadas y minifaldas estrechas y muy cortas.

¿El culpable?

Un joven ejecutivo de su planta, que la hacía reír.

-¿Puedo pasar?

*-Claro ¿No está la secretaria?

-No...es por eso ¿Dónde te dejo el correo?

*-Dámelo a mí

Parecía nerviosa al acercársele.

*-Estas diferente

-Es por mi forma de vestir – le sonrió-

*-Me he dado cuenta ¿Mini faldas?

-Es por Jarrel. Le gustan y dice que aun puedo vestirme así.

*-¿Aun?

-Dice que esta ropa está bien en mujeres solteras, pero que cuando...

*-¿Cuándo qué? ¿Qué ocurre?

-Puedo sentarme y hablarte....? Como antes cuando éramos amigos?

*-Por supuesto, nunca hemos dejado de ser amigos, eso siempre será así.

-Quería decirte...que tenías razón, que siempre la has tenido.

*-Suele ocurrirme, pero en qué tema tengo razón.

-Pronto dejare de trabajar en la empresa. Voy a casarme Don. Y a tener un par de críos. A cuidar una casita con jardín, con un pequeño huerto de hierbas aromáticas y a tener un perrote grande que cuide de todo.

Le vio palidecer

*-¿Vas a casarte?

Ella asintió con la cabeza.

*-¿Con Jarrel?

Ella volvió a asentir.

*-Vaya. Ha sido una rápida decisión.

-Naturalmente que estas invitado y espero que puedas acceder a hacerme un favor.

*-¿De qué se trata?

-Britany me ayudara a preparar todo lo referente al acontecimiento, pero aun no he hecho las paces con mis padres y me preguntaba si tu podridas entregarme en el altar cuando llegue el momento.

Don se levantó como por resorte, asustándola y haciendo que ella también se levantara.

*-¡Maldita seas si eso...

-¿Don que te pasa?

Camino hacia ella, la agarro entre sus brazos y la tomo los labios, con una pasión y ferocidad extrema.

Ese beso, era un bálsamo para todas las heridas del alma y no pudo dejar de corresponder a ese hombre que siempre la hacía revivir.

*-No estas enamorada de Jarrel

-No sé porque dices eso.

*-Ninguna mujer besa como tú lo has hecho si está enamorada de otro.

-Yo siempre he besado así. Ademes tu eres mi maestro. Tú me enseñaste que no hay que confundir amor con sexo.

*-¿Y?

-Lo que existe entre nosotros, lo que siempre a existido entre nosotros ha sido atracción física y buen sexo Don.-El sonrió cínicamente- Si eres bueno, pero hay más cosas, necesito más cosas.

*-¿Qué que no tengas conmigo?

*-Un hombre.

*-Me estas desafiando?

-No. No estoy loca, se de lo que puedes llegar a conseguir, lo que puedes llegar a hacer, pero necesito un hombre que se quede a mi lado y no huya.

*-¿Qué yo huyo?

-Por supuesto Don. Sé que en un principio fui yo la que se marchó, pero cuando volví, no te impuse ninguna condición para estar conmigo, nunca te dije no, nunca te dije ven o dame. Venias cuando querías y te ibas de igual manera. Pero tú estabas obsesionado con que yo no podía llevar esa vida, que no me convenía, que necesitaba otra más clásica y normal. Ahora la tengo. Ahora ya no estas conforme ¿Quieres darme otra? ¿De qué se trata tu juego Don?

*-¡Maldita sea! No lo sé, pero no concibo que te cases sin amor.

-Soy buena sirviendo al prójimo, aprenderé.

Don estaba muy serio y negaba con la cabeza.

*-Haremos un trato. Yo te ayudare en todo lo que quieras respecto a la bosa, pero a cambio me permitirás abrirte los ojos respecto a Jarrel.

-¿Y si finalmente deseo casarme?

*-Podrás arruinar tu vida.

Ella sonrió, se alzó sobre las puntas de sus pies y le beso en la mejilla.

-Gracias.

Britany fue a buscar a su prima a la salida del trabajo y antes se pasó a saludarle.

-¿Qué te parece la noticia?

*-Creo que está totalmente confundida.

-¿Por qué? ¿Acaso hay algo de Jarrel que debas contarnos?

*-No le conozco, pero no te preocupes, mandare que le investigan

-¿Entonces porque lo dices?

*-Naya no está enamorada de él.

-Bueno eso es solo asunto de ella, no sé en qué te influye

*-Si no está enamorada, a la larga no será feliz. Créeme, quiero que sea feliz, es impórtate para mí que lo sea.

Naya entro en el despacho

-Estoy lista ¿Nos vamos?

*-¿Qué vais a hacer?

-Tengo tres días a solas con Naya, a antes de que llegue Pol, así que vamos a comprar le vestido, reservar el salón y el cáterin, las flores y los recordatorios. Hay poco tiempo.

Cuando ambas mujeres se fueron, respiro hondo para calmar la ansiedad...la estaba perdiendo.

Llamo mandar a Jarrel que se presentó a los diez minutos.

*-Jarrel, sé que usted se va a casar con Naya ¿Está usted seguro de eso?

-Muy seguro señor. Aunque sé que ella tuvo una relación anterior ya que ella misma me lo a contado, creo que es maravillosa. Usted la conoce hace más tiempo que yo señor, así que no le cuento nada que ya no sepa. Es una mujer de su casa, la mujer perfecta para formar una familia y criar unos niños sanos, señor.

Jarrel, salió del despacho, sin decir ni una sola vez que amara a Naya.

Apretó los dientes ''Cretino''

Tuvo que realizar algunas llamadas pero al final sonrió satisfecho.

Mi Querida NoviciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora