VEREMOS - Juan Pablo Villamil

volvería.

-Bien, ¿necesitan decirme algo más que quieran para el nuevo escenario?- pregunto Olvia.

-Creo que eso es todo- respondio Isaza.

-Okey, haré un repaso por si se me olvido algo. -Todos asintieron- El concepto es "Si ayer fuera hoy", quieren que quede reflejado en parte de la escenografía. Les gustaría que haya forma de interactuar con el público a través del escenario y la ambientación de este. Necesitan un anexo paralelo. Y la torre de control no debe interrumpir la visión de la gente, ¿verdad?.

-Eso es todo- afirmo Juan Pablo.

-Perfecto, la fecha sería 20 de Julio y la locación seria Miami. Okey, con todo esto ya mi equipo puede ponerse a diseñar opciones. ¿Les parece tener una llamada finalizando la semana entrante?- sugirió.

-Si, claro. Deje que sus diseñadores vuelen la imaginación queremos algo disruptivo, distinto a lo que veníamos pero que conserve nuestra esencia- confirmo Isaza.

-Usted nos conoce Oli, sabe como somos- dijo Simon.

-Claro los conozco, pero hacen cuantos años no nos vemos...-hizo una pausa pensando- casi 8 años, que locura.

-Si, mucho tiempo- dijo casi en un susurro Juan Pablo.

-Bien para la próxima semana tendré varios bocetos para presentarles. Les dejo mi número de teléfono. Pueden escribirme para cualquier cosa que necesiten o por si tienen nuevas ideas.

-Gracias Oli, es un placer trabajar con usted- dijo Isaza.

Los cuatro chicos se despidieron de ella y finalizó la videollamada.

Cerro su computador y se apoyo totalmente sobre el respaldo de su silla. Todavía estaba procesando aquella sorpresa.
A menudo pensaba en Juan Pablo, pero su recuerdo era amargo.

Aunque habían pasado 8 años desde la última vez que se vieron, no le perdonaba que luego de decirle que la buscaría, no le haya escrito una sola vez.

Él por su lado tenía miedo de escribirle por lo que ella había dicho antes de irse. La pensaba de vez en cuando, quería saber de Olivia pero se limitaba a solo leer noticias sobre sus éxitos.

Ella, testaruda, queriendo saber de él, lo hacía a través de sus canciones. Sabía la discografia de Morat del derecho y del revés.
Sabía que canciones habían sido escritas por Juan Pablo, a pesar de que su voz no salga en ellas. Lo conocía tanto aún a pesar de tantos años.

Es que la gente crece y cambia también, pero no su esencia. Y ambos conocían a la perfección la esencia del otro. Por eso se habían vuelto tan buenos amigos.

Desde que Olivia había emigrado a Estados Unidos, Juan Pablo se había vuelto una persona más solitaria. Luego de ensayar con sus amigos, volvía a su casa y se dedicaba a mirar partidos de fútbol, jugar play y estudiar.

Había tenido varias novias, de poca duración, porque el compromiso no era lo suyo. No sabía cómo tener un vínculo sano con las personas, y creía que la mejor forma de sanar sus penas era vivir de fiesta en fiesta.

A pesar de tanta rumba, había logrado terminar la carrera de Ingeniería. Pero el día de su graduación había sido algo triste y nostálgico. No sólo por el final de algo que había sido una experiencia enriquecedora, sino también porque alguna vez había soñado estar recibiendo su diploma junto con Olivia.

Luego de haber finalizado la carrera, su banda había despegado a la fama. Sus canciones sonaban en todas las radios de Colombia, y habían logrado hacer un tour nacional.

Actualmente estaban por lanzar su cuarto disco. Algo nuevo y distinto a lo que acostumbraban a hacer.
Su fama había alcanzado hasta Europa, y en toda latinoamerica eran aclamados por miles de fans.

Para la presentación del nuevo Disco harían un show en Miami, que querían luego repetir en toda la gira de ser posible.
Siendo fieles a estilo del nuevo disco buscaban hacer un show también innovador.

Una tarde de ensayo, Isaza había llevado para mostrarles una noticia sobre una chica que había diseñado el mejor escenario del Festival Coachella.

-Encontré quien nos puede ayudar hacer el mejor escenario para nuestra gira- dijo mostrandoles la noticia- Olivia.

El ya sabía de esa noticia. Siempre leía los artículos donde ella era mencionada.

-Me parece una gran idea- dijo sin dejar que otro lo haga- deberíamos contactarla.

Y así fue como excusado por su gira, tendría motivos para volver a hablarle e intentar volver a tener un vínculo.

-Hola- dijo entrando en la oficina de Esteban- veamos el presupuesto.

-Oiga anda enojada- dijo él agudizando su voz.

-No, estoy ocupada- respondió cortante.

-Liv, te conozco, se perfectamente que estás de mal humor, ¿que sucede ahora?-pregunto.

-Tuve una reunión, con Morat- respondio quitándose lo lentes.

-No joda, ¿y lo vio?- pregunto.

Esteban se había vuelto su mejor amigo, y este tenia la habilidad de persuadir a las personas hasta sacar toda la información necesaria. Así es como había logrado que Olivia le cuente todo sobre Juan Pablo.

-No, decidió dejar Morat ayer- respondio sarcasticamente- y si- rodó los ojos.

-¿Y que paso?, es decir, ¿intercambiaron palabras?.

-Casi nada, fue Isaza el que más hablo- respondio- el muy hijoeputa sigue increíblemente bueno- dijo resoplando.

-Ay no, no diga que ya volvió a otra vez a enamorarse.

-Volvería si alguna vez hubiera dejado de estarlo- cerró sus ojos- no puedo ser tan imbecil, ocho años sin verlo y como gran psicópata en vez de olvidarlo me dedique a seguir enamorada de él a través de sus temas.

-Parce ¿usted no para de tomar mala decisiones nocierto?, ¿para que acepto?

-Porque quería saber de él, ¿no es obvio?

-Pues claro mija, yo lo sabía. Solo quería que usted se de cuenta- la golpeó suavemente en el brazo- Liv, han pasado ocho años, deja ir ese rencor de una vez. Vuelve a ser amiga de ellos, de él especialmente. Según tu era los mejores amigos, recupera eso.

-Te odio, ¿lo sabias no?- dijo Olvia mirándolo.

-No lo haces- respondió Esteban concentrándose en su computador- ahora miremos tu puto presupuesto que ya hastiado me tiene.

Intento poner toda su concentración en las cuentas que le nombraba su amigo, pero no pudo hacerlo.

En su mente solo resonaba el volver a ser amigos con Juan Pablo. Y aunque eso le generaba ansiedad y miedo, una parte de ella quería correr a escribirle para volver a hablar como si nada entre ellos hubiera sucedido.