Tras sellar un trato de amor, ella se volvió su prioridad, la protegeria de todos e incluso de el mismo.
Asta que ella misma decíde dar su alama al mismo demonio tan solo para permanecer siempre a su lado.
✨ Historia 100% mía, cualquier copia o adap...
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La mañana al fin había llegado, los leves rayos de luz comenzaron a entrar por la ventana de la mayor de las Liones, Margaret se levantó de la cama estirando sus brazos mientras un ligero suspiro salia de su boca, despacio camino asta su tocador tomando su cepillo peinando así poco a poco su alborotado cabello, una sonrisa se dibujo en sus labios para después tomar su bata y salir de su habitación.
Mientras cerraba la puerta de esta su hermana Verónica salió también, pero adiferencia de la peli morada, ella si llevaba el cabello alborotado mientras aún mantenía un semblante soñoliento.
–Buenos dias Vero
–waahh Buenos días~
Contesto la menor mientras rascaba su cabeza para después tomar su camino a las escalera y así poder llegar a la cocina, su hermana iba a seguirla si no fuera por qué se dió cuenta de que faltaba una de ellas, su cabeza se giró a ver la puerta de la habitación de la mas pequeña de las tres, miro el reloj de la pared y se le hizo un poco raro que elizabeth no haya despertado aún.
Un suspiro salió de su boca y camino asta la puerta,para poder despertarla.
–¿Elizabeth?
Tocó tres veces la puerta,pero al no recibir respuesta pensó que su hermana seguiria durmiendo, nego con la cabeza mientras sonreía para después tomar la perilla y abrir pero lo que encontró, la dejo helada...
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Su cuerpo sentía calidez, sentía paz y se sentía total mente completa, sus ojos se abrieron poco a poco y miro que aún estaba siendo rodeada por los brazos del rubio, con las mejillas rojas llevo su mano asta acariciar el rostro del chico y así quitar un par de mechones de su cabello despeinado, en verdad el era muy atractivo.
–Jeje ¿te gusta mucho mirarme?
La voz del chico la hizo dar un pequeño brinco en la cama, el ya estaba despierto desde hace un rato solo que no quiso despertarla,aunque tenía que admitir que también la estubo admirando mientras ella dormía, el corazón de elizabeth latio rápidamente mientras el se acercaba para besarla, un beso que hizo que su cuerpo se herizara y se llenará de felicidad.
Al separarse ambos se miraron a los ojos, ese momento era más que perfecto, pero sabía que no podia quedarse mucho más tiempo.
–Tengo que irme
–Pero porque ¿No podrías quedarte un poco más conmigo?
