La Fuerza del Destino (Ziam)

Capítulo XIV La Fuerza del Destino Parte IV

Liam POV:

Estábamos recostados los dos en la cama, Zayn estaba cantando para mí una canción de cuna, realmente estaba logrando su propósito, cada vez sentía pesar más mis párpados, estaba realmente cayendo en brazos de Morfeo, una idea pasó por mi cabeza antes de quedarme completamente dormido, así que la dije antes de que no pudiera hacerlo.

-Mi amor, por favor quédate a dormir conmigo esta noche- dije con una voz poca audible.

Entreabrí los ojos para ver la reacción de Zayn, sus ojos se hicieron más grandes por la impresión, sus mejillas se tornaron rojas y sus labios se curvaron dejando ver una sonrisa, se acomodó mejor, me acurrucó en sus brazos y sentir su cuerpo trabajado hizo que me durmiera con facilidad, a pesar de que sabía que la posición que tenía Zayn no era precisamente la más cómoda, a él no parecía importarle, por lo que me dejé hacer, sentía que jugaba lentamente con mi cabello, pero pronto dejé de sentir sus movimientos. Morfeo había ganado la batalla.

Aquélla noche en los brazos del amor de mi vida, tuve una infinidad de sueños, todos hermosos, donde los protagonistas en su mayoría éramos él y yo, aunque en algunos estábamos acompañados por Larry y por Pipe y Sofi, en mis sueños todos éramos realmente felices, añoraba que se cumplieran.

No sé realmente cuantas horas duró mi estado de reposo, pero sentía mi cuerpo realmente relajado, definitivamente la presencia de Zayn me causa una paz inigualable. Sentí que mi cuerpo se movía al compás de la respiración de él, era tan tranquila que me hacía sentir tan maravillosamente. Poco a poco abrí los ojos, admiré el cuerpo del amor de mi vida, subí mi mirada y se encontró con la mirada más hermosa del universo, Zayn me miraba con una gran admiración y con una tierna sonrisa, se veía radiante, y pensar que yo, Liam Payne soy el dueño y el causante de la misma.

-Buenos días bello durmiente, pensé que tendría que hacerla de príncipe Felipe y levantarte con un beso de amor- dijo burlón besando mi frente.

-Quiero amanecer todos los días de mi vida así, sólo contigo- dije recibiendo el beso.

-Oww, mi Leeyum-dijo repartiendo besos por todo mi rostro.

-¿Hace mucho tiempo que estás despierto amor?- pregunté

-Amm, no mucho realmente- dijo nervioso, claramente me estaba mintiendo.

-Seguramente Javadd- dije indignado.

-Está bien amor, no te enojes, la verdad es que no pude cerrar los ojos en toda la noche, verte dormir debería ser considerada la primer maravilla del mundo, te ves realmente hermoso, velé tus sueños, si no me equivoco fueron muy bonitos todos, sonreías mucho cuando estabas dormido- dijo frotando mis mejillas.

-Gracias bebé pero me siento culpable de que no hayas pegado el ojo en toda la noche, así que quédate en cama mientras yo preparo el desayuno para mi adorado y tierno príncipe- le contesté preparándome para salir de la cama.

-Pero amor... -trató de decir.

-No hay pero que valga jovencito, usted quédese aquí y duerma un poco, yo me encargo del desayuno, recuerda que quedamos de salir con Larry, así que es mejor que descanses un poco- dije arropándolo.

-Está bien, pero no tardes mucho- suplicó.

Le di un beso en la frente y salí de la habitación. Al parecer no fuimos los únicos que dormimos acurrucados, en el mueble más largo de la sala me encontré con una escena romántica, un chico de cabello rizado tenía acurrucada en sus brazos a una chica un poco más chaparra con cabello lacio, era un momento digno de una foto del recuerdo: Pipe y Sofi estaban profundamente dormidos sentados.