Capítulo II: Cruz de Navajas Parte II.

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Capítulo II: Cruz de Navajas Parte II.

Zayn POV.

Al cerrar la puerta que me conecta con el exterior, no sólo me desconecto del mundo sino también me encierro en mí mismo, percibo esa sensación de tranquilidad que tanto me gusta, mi departamento está inmerso en un silencio sepulcral, el que me acompaña desde que el no está conmigo.

De repente me siento muy cansado y dudo si comer algo, ducharme o irme a dormir para cargar energías y rendir en lo que significa pasar una noche de un sábado de barman en el 33. Opto por la tercera opción, ya habrá tiempo de satisfacer mis otras necesidades humanas. Me dirijo a mi habitación y como todos los días el departamento está reluciente, gracias a la labor de Perrie, todo encuentro en orden, así que sin más me quito los zapatos y los calcetines, después el pantalón y la camisa y los deposito en el lugar correspondiente a la ropa sucia, me propongo despertar un poco más temprano de mi siesta para así lavarla y no cargarle más la mano a Perrie, si es que eso es posible. Con sólo unos bóxers negros súper ajustados a mi cuerpo me tiro en la cama y quizás por el cansancio me quedo completamente dormido con facilidad.

De repente me veo envuelto en un aura de ensueño, donde Liam y yo estamos juntos disfrutando de nuestro amor, paseando por un hermoso jardín con una infinidad de flores, de diversas formas, tamaños y colores, en el fondo se apreciaba la luna brillando en su esplendor y dejando reflejar su faz en un lago cristalino de aguas tranquilas, Liam toma de mi mano y me dirige hacia el mismo, al parecer teníamos mucha prisa por llegar porque se percibía en el ambiente esas ansias de estar juntos, encontramos una banca donde no dudamos en sentarnos, él con su espectacular mirada color miel no para de escudriñar en mis brillantes y dilatados ojos marrones el amor infinito que le tengo, unos segundos más y lentamente suelta mis manos, lo cual me desconcierta mucho y cuando apenas iba a protestar dirige sus suaves y delicadas manos hacia mi rostro, tocando primero mi barbilla, luego mis labios, pasa por mis mejillas y finalizan detrás de mi cabeza, nos miramos fijamente y en nuestros ojos solo encontramos una gran dilatación de pupilas, es indiscutible nos amamos como la primera vez, a pesar de que amo admirar su mirada no puedo más y lo atrapo entre mis brazos, el al instante se adhiere con más fuerza al mío y percibo ese olor tan natural, una fragancia que combina los olores más hermosos del universo, una mezcla entre frutos frescos y naturaleza combinado con un aroma de masculinidad, es perfecto, Liam es mi fragancia preferida, me dejo llevar por el momento y lágrimas sin frenos corren por mis mejillas, le digo cuánto lo amo y cuánta falta me había hecho todo  este tiempo, él se suelta de mi abrazo e inmediatamente con sus delicados dedos borra cada una de mis lágrimas y después hace un camino de tiernos besos por el lugar donde éstas escurrieron, me estremezco y miro sus labios gruesos y rosados y sin pensarlo dos besos los beso tiernamente, siento que la prisa desaparece de mi cuerpo, los beso delicada y pausadamente, él me responde al instante y me responde de la misma forma en que yo le beso, siento arder mi interior y percibo el amor en el ambiente, poco a poco y sin ninguna prisa nos dejamos llevar por lo que sentimos y cada segundo que pasa profundizamos nuestro beso, yo lo sostengo por su cintura, mientras que él juega con mi lacio cabello, el tiempo nos hace reverencia y se detiene, dando paso a nuestra demostración de amor, pero al aire nos hace recordar que somos humanos y que necesitamos de él para vivir y nos obliga a separarnos, rompiendo ese momento que bien podría asemejarse a una experiencia religiosa, nos separamos poco a poco e inhalo aire y siento como se distribuye por mis pulmones, no separamos nuestras miradas y nos acariciamos las mejillas el uno al otro.

Sonreímos como dos tontos y veo como se va desvaneciendo su figura de mis manos, dejando un sinfín de luces en donde se encontraba su cuerpo, desesperado comienzo a llamarlo como loco, pero él no me responde.

-¡LIIIAAAM!, Por favor no, no otra vez, no me dejes de nuevo, nos amamos, me lo demostraste, ¿por qué te empeñas en alejarte de mí?- grito desesperado.

La Fuerza del Destino (Ziam)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora