Capítulo XLIII Love Me Back Again Parte I

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Zayn POV:

Mis días desde que llegue a Doncaster me sorprendieron mucho más de lo que me esperé, el dolor poco a poco fue desapareciendo, aunque quise eliminarlo de raíz, y en un instante no fue nada fácil, pero poco a poco se fue mitigando, pero no ha desaparecido a la fecha, y sinceramente no creo que desaparezca.

El amor no es algo diferente al dolor, el amor sigue aquí, y de eso no estoy seguro de querer que desaparezca, pero tampoco estoy dispuesto a creer en nadie que me diga que me quiere como algo más que amigos, eso no es para mí, a menos no por el momento, ya amé una vez, y no creo amar de nuevo con esa intensidad, no puedo, ni quiero.

Mis amigos, mis inseparables Louis y Harry, mis incondicionales, siempre están ahí para sacarme una risa cuando la melancolía ataca mis días, y siempre tienen su postura un poco agresiva ante Liam, creo que si por ellos fueran lo tendrían tres metros bajo tierra y aunque he insistido en que no vale la pena que hagan eso, que ni yo le guardo rencor, siempre me ignoran, dicen que ellos guardan el rencor que yo no, y no creo poderlos hacer cambiar de opinión, aunque eso si quisiera hacerlo. Ceci es una de las grandes sorpresas que me llevé aquí, ella es una de esas personas que se escapan del cielo, en verdad sin exagerar, estar a su lado es sentir una paz increíble, por eso siempre procuro estar cerca de ella, me contagia todos sus buenos sentimientos, y es una excelente consejera, aunque a veces siento que ella da mucho más de lo que yo en esta amistad, pero ella dice que no, que yo también he puesto mucho de mí, y para evitar discusiones elimino esos pensamientos, o al menos no se los comparto, Harry y Louis le adoran y hemos logrado hacer una armonía increíble, somos como una orquesta, donde cada instrumento aporta todo de sí para hacer una hermosa armonía que el público disfruta.

Y en resumen esto ha sido mi vida los últimos meses, muy buena para ser verdad, o al menos más de lo que creí, lejos de sentir mi vida monótona, me siento como si cada día me reinventaba, aunque hiciera casi las mismas actividades todos los días, pero cuando das amor, recibes amor y yo amo a mis amigos, es el amor que por el momento puedo compartir. Y soy feliz.

Me encuentro cerrando los botones de mi uniforme, ya que tiempo después de empezar a trabajar en la librería tuve que usar uniforme, consistente en un pantalón, que por lo común tenía libertad de elegir el color, el material y la forma, pero en cuanto la camisa, tenía que acatar el color estipulado para cada día, era una camisa manga corta, color azul celeste para los lunes, verde pistache para los martes, amarillo pastel los miércoles, gris los jueves, rojo los viernes, caqui los sábados y rosa los domingos.

Miraba un poco extraño la combinación que el rojo hacía con mi piel, no me quedaba tan mal, pero no sé, quizás me gustaba más de lo que quería aceptar, el rojo es un color fuerte, poderoso, cálido, lo asocio con la vitalidad, una chica una vez me dijo que como terapia debía usar este color, porque me daría confianza en mí mismo, coraje y una actitud positiva ante todo, pero me advirtió que si lo usaba en exceso podría tener ataques de rabia, por eso usarlo una vez a la semana en el trabajo y alguna que otra vez cuando no estaba en él, era más que suficiente. No es que tuviera mi autoestima por el subsuelo, pero aceptaba que necesitaba recobrar fuerzas.

Pongo algo de perfume en mi cuerpo y me arreglo por última vez mi cabello, estoy listo, hemos tenido en estos últimos días recepción de material, y usar un día más zapatos sería condenar a la hoguera a mis pobres pies, por eso en esta ocasión calzo unos vans rojos de lo más cómodos, seguramente Ceci se reiría de mí, pero más vale soportar un poco de bromas que más martirio, además amo la sonrisa de mi amiga, y si yo soy el causante mucho mejor.

Bajo de mi habitación y la feliz pareja está en su maratón de besos con sabor a algo más, y aunque esto es habitual, odio interrumpirlos, y no dejarlos ser libres de amarse como conejos alrededor de toda la casa y en el momento que ellos deseen, pero si sigo aquí es porque ellos me han amenazado que si me voy, me castran y creo que por el bienestar de mis futuros bebés, si es que tengo tales, debo quedarme con ellos aunque tenga que ser el réferi en momentos como este.

La Fuerza del Destino (Ziam)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora