La Fuerza del Destino (Ziam)

Capítulo III: Me cuesta tanto olvidarte

Capítulo III: Me cuesta tanto olvidarte

Liam POV:

Camino por las calles de Wolverhampton, es una tarde muy gris, como suelen ser las tardes londinenses, me dirijo hacia mi departamento con una sonrisa en mis labios. Soy Liam Payne,  tengo 20 años y estudio Música en la Universidad Autónoma de Wolverhampton. Mi departamento se encuentra tan solo a unas cuadras de mi universidad. Lo comparto con una chica que estudia en mi misma universidad Diseño y Marketing de Modas, su nombre es Sofi. Compartimos gastos desde hace un año cuando ella colgaba en los tableros de opinión de la uni un papel con sus datos en búsqueda de un departamento compartido o no. hicimos click desde un principio, pero de ella hablaré más adelante.

Yo ya llevaba un año viviendo solo antes de que Sofi compartiera conmigo el departamento, lo tengo desde los 18 años, cuando decidí correr con mis propios gastos, y conseguí un trabajo en una academia cultural donde imparto clases de piano y guitarra por las tardes, mi sueldo es suficientemente bueno y me alcanza para solventar mis gastos, pero el compartir el depa me ha servido para ahorrar dinero para mi futuro. Mi trabajo lo disfruto mucho porque hago lo que más me apasiona en la vida después de Zayn: la música. Oh, Zayn. Mi Zayn. Pienso en él todos los días y sueño con él todas las noches. No hay en este mundo un ser tan perfecto como él. He aprendido a vivir con su recuerdo, pero hay días que simplemente no puedo más y en la penumbra de mi habitación rompo en un escandaloso y dolido llanto. No he permitido que nadie me vea así. Para los demás yo soy una persona feliz, que siempre va por la vida sonriendo, pensando positivamente, buen estudiante y un sinfín de cosas positivas, nadie sabe que eso sólo es una máscara que cree a base del sufrimiento del ser más maravilloso de mundo entero y mi propio sufrimiento. Sé que soy el tonto más estúpido de la Vía Láctea al dejar ir un amor tan puro como el de Zayn y el mío y todo por los constantes señalamientos de la sociedad. Contábamos con el apoyo de nuestras familias y mejores amigos, pero no, el infantil de Liam no es capaz de soportar que lo miren feo y lo llamen puto homosexual. Soy un imbécil lo sé. Ahora seguramente Zayn está feliz con alguien más y que por supuesto no soy yo. Ni siquiera se debe acordar de mi existencia, porque seamos sinceros, quién en su sano juicio recordaría a la persona que te destruyó con su partida. Yo fingí no amarlo, yo y mis estúpidas máscaras, pero lo hice por su bien, yo no podría soportar todo eso y decidí regresar a Wolverhampton, lo hice por amor, porque el merecía a alguien mejor que yo, fingí no amarlo para que le doliera menos cuando lo abandonara. Fue lo mejor, aunque Sofi piensa que fui un egoísta por decidir por los dos.

Por fin llego a la puerta de mi departamento e introduzco la llave y giro la perilla. Camino por la sala y afortunadamente Sofi no está. Vengo roto y más que triste por los recuerdos tan dolorosos que rondaban por mi cabeza. Me dirijo a mi habitación ya que no siento nada de hambre. Me desnudo y dirijo mi mirada hacia un espejo de cuerpo completo que está a un costado de mi cama. Miro a un apuesto y feliz joven con una sonrisa que demuestra lo feliz que es su vida. ¿Quién es ese muchacho que me observa fijamente? El reflejo es alguien que no conozco. Imagino que las personas que miran al muchacho que miro en mi reflejo piensan saber quién soy, sin embargo eso es mentira. Lo que realmente pasa es que después de vestirme y antes de salir de casa diseño una máscara con la que juego a ser feliz, lo hago desde que descubrí que hacer esto me permite engañar a mi mundo exterior, lo triste es que no logro engañar a mi corazón. Regreso la mirada al espejo y no reconozco al chico que refleja, ¿cuándo reflejará a quien soy en verdad? Sufro la enfermedad que la mayoría de las personas débiles sufren en el mundo, el esconder  mis sentimientos, el mundo exige que haga eso, tengo que esconder mi corazón, mi sentir y lo que pienso. ¿Debo fingir todo el tiempo que soy alguien diferente? ¿Por qué debemos ocultar todo lo que pensamos lo que sentimos? ¿Debe haber un secreto al cual estoy obligado a ocultar? Pero ya basta, de alguna forma le mostraré al mundo lo que está dentro de mi corazón, ya no quiero aparentar, quiero ser realidad. Quiero ser amado por quién soy. Tengo un corazón que debe estar libre para volar, que se quema con la necesidad de amar y ser amado. No fingiré todo el tiempo que soy alguien diferente. No soy, como quiero y voy a cambiar. No debe ser así, el fingir no es vivir, el que veo frente a mi no aguanta más. Ya no voy a ocultar el que soy, nunca más, espero el día en que el amor de Zayn me rescate y ese día  quien yo soy se reflejará. Golpeo el espejo y siento brotar sangre de mi puño y deslizarse por todo mi brazo, rompo en llanto y me dejo caer entre los pedazos desiguales de cristal, me arrastro por ellos, me detengo en la esquina de mi habitación y abrazo mis rodillas.