O19.

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──¿personaje favorito? ──cuestionó hyunjin, haciendo referencia al libro del cual habían estado hablando las últimas dos horas, Una Lista Peligrosa.

habían acordado mutuamente dejar de pelear mientras hablaban sobre los libros; ahora, estaban en una sesión de preguntas para conocer lo que a cada uno les gustaba de la lectura. minho estaba por responder la interrogante número 5 del azabache, quien no parecía tan interesado al tema; mientras que minho no podía dejar de dibujar estrellas sobre los orbes avellana del menor.

── que pregunta tan cliché, niño. ── bufó el pelirrojo, evitando la mirada del chico quien le lanzó su más profundo fastidio con aquellos ojos que le hacían delirar.

habían dejado la música clásica por petición del roñoso azabache, ahora escuchaban a Imagine Dragons. y aunque al pelimorado no le agradase demasiado la música popular, no objetó nada. minho estaba al tanto de los gustos de su dongsaeng, así que sabía a lo que se atenía cuando le cedió el poder de lo que fueran a escuchar.

── sólo responde y ahórrate tus comentarios. ──le lanzó un cojín marrón, que adornaba la cama del anfitrión.

minho lo atrapó audaz, mirándolo mal. ¿intentó atacarlo? bah~ estaba seguro que mentalmente había hecho más que "atacarlo". sabrá kamisama cuántas veces lo asesinó en sus pensamientos.

── candace, definitivamente candace. ── respondió sin dudar, ignorando la violencia y centrándose en la libreta entre sus manos, donde había estando haciendo apuntes de su sesión con preguntas.

──¿qué? ¿por qué? es una perra. ── reclamó, integrándose más al tema que llevaban tocando desde horas atrás.

──¡hey! no insultes a candace. ── amenazó, aunque sus palabras fuesen vacías. no podría hacerle daño incluso si lo insultase a él, y vaya que lo hacía.

── okey okey~──alzó sus palmas en señal de derrota, haciéndose notar inocente. ── ¿pero por qué es tu personaje favorito?── quiso saber, tomando una postura recta y curiosa.

── por eso, todos la toman como una perra. ──su respuesta fue simple, pero escondía más de 6 huecas palabras.

──¿así que te gustan las perras sin corazón, eh?── la coquetería en su voz hizo enrojecer levemente al mayor.

── n-no me refería a eso, idiota. ── bufó, haciendo reír al menor. segundos más tarde, el pelimorado se unió a su burbujeante risa. ── quiero decir, siento que es un personaje odiado con prejuicios. okey, sí, es una perra y trata mal a todos, ¿pero alguien se puso a pensar por qué? ── señaló a hyunjin con su bolígrafo, haciendo dinámica su explicación incluso si no tomase en cuenta lo que fuera a decir. ── sólo deseaba su atención. ── concluyó, como si se tratara de algo obvio.

──¿tú... molestarías a alguien sólo para llamar su atención? ──le miró con incredulidad, como si la psicología inversa fuese a servirle para ganar su cometido. tener la razón.

── sí. ── ni siquiera dudó en responder.

── sí, parece tu estilo. vamos, hay muchas otras formas de conseguir atención.

──¿así? ¿cómo cuales?── le miró interesado al tema, quien sabe, podría conseguir alguna nueva forma de conquistarlo. se le agotaban las ideas.

── regalarle golosinas. ── una boba sonrisa adornó sus labios, llevando su mente hacia el recuerdo de cierto admirador secreto. era sorprendente como es que podía hacerlo sentir mejor con sólo un par de versos.

──¿así como tu ciego enamorado? ── soltó con diversión, mirándolo burlón.

── eres tan grosero. ── gruñó, evitando el impulso de lanzarle lo primero que tuviera a la mano. ── él es un chico agradable. ── defendió, cruzándose de brazos e instalando un tierno puchero.

── sólo porque te da golosinas. ──dijo con obviedad, regresando la vista hacia su libreta.

──¡no!── negó rápidamente, sacudiendo sus hebras azabache de un lado a otro. en total negación. ── sus notas. ── murmuró, ligeramente apenado. pareciendo que contase su más profundo secreto.

──¿qué tienen sus notas? ──no se atrevió a despegar la vista de lo que escribía, avergonzado de que su mirada delatara cualquier indicio.

── siento muy al fondo de mí que me conoce tan bien que sabe que decir cuando lo necesito. ──suspiró, realmente quería saber quien era. ── es como...

── a lo mejor tiene telequinesis, y es un fenómeno. ── interrumpió, desesperado por romper el ambiente que se había formado.

── que chistoso. ── bufó, sarcástico.

──¿qué sucede si es feo? ¿o tiene barros? ¿o está calvo? ¡o peor aun! ¿qué sucede si es el ser que más odias en el mundo? ──cuestionó, riéndose en la cara del azabache enamorado. sus intenciones no eran molestarlo, pero necesitaba desviar la atención.

── el físico no importa, el chico misterioso me ha ganado con sus palabras. ──replicó, decidido. definitivamente no le importaría quien fuese, aunque quizás se estaba precipitando.

──¿me lo dice el chico prejuicios? ──lo miró juguetón, mordisqueando la base del bolígrafo que había estado usando.

──¡ya te dije que no soy prejuicioso!── exclamó, fastidiado.

── demuéstralo. ── le retó con la mirada, haciendo fruncir el ceño del menor.

──¿cómo?

── te reto a salir conmigo una semana, si para el final de la semana te sigo pareciendo el ser más despreciable y molesto de la Tierra, te daré...──pensó, sin saber que ofrecerle──... te daré una canasta repleta de golosinas.

pequeñas galaxias brillaron en el de ojos avellana ante la mención de azúcar que ensuciaran su sistema, ¿quién podía rechazar caramelos tan a la ligera?

──¿a qué te refieres...con salir contigo?── el brillar de su mirada se opacó en duda.

── no sé, salir en citas o así. conocernos mejor, no sé. ── se encogió de hombros, restándole importancia a su necesidad por pasar más tiempo con él.

──¿y en todo caso de que tú ganes?── hyunjin realmente lo estaba considerando, no tenía nada que perder. era una oferta tentadora

── nada, ganaré el placer de verte tragar tus palabras. ──sonrió con autosuficiencia, haciendo gruñir al menor.

aquel comentario sólo pinchó el orgullo del azabache.

── bien, trato hecho. ve preparando bolsas enormes con gominolas. ── amenazó mientras le tendía la mano para cerrar el trato, minho sonrió triunfal... vaya que tenía enormes bolsas de gominolas, el pensamiento le hizo reír internamente.

ambos estrecharon su mano aceptando el reto.

love gummy ─ minjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora