Capítulo 31. Causa y Efecto.

15 4 4
                                    

La ortorexia es un trastorno de la conducta alimentaria que consiste en la obsesión por la comida sana.
Las personas que sufren esta patología se sienten obligadas a seguir una dieta restrictiva.
Suele comenzar con hábitos de vida saludables que se convierten en obsesión y puede provocar en los pacientes grandes pérdidas de peso y problemas de salud.
Suelen ser tan estrictos que incluso se sienten culpables cuando lo incumplen y se castigan con dietas y ayunos aún más rígidos.

Leía Jacklyn en una página de internet acerca de algunos trastornos de la conducta alimentaria.

-Jacklyn ¿Sabés en donde está mi saco vino?- preguntó Bruno pero ella estaba en trance leyendo la información- Amor- insistió al ver qué no respondía y seguía sumida en la pantalla de la laptop.

Los trastornos de la conducta alimentaria se han ido intensificando con el paso de los años, existiendo muchos de ellos de los que la gente ni siquiera ha oído hablar.
A estos estereotipos se les aplaude día con día pero cuando se da la aparición de uno de ellos en alguien de nuestro entorno decimos que está loco.
Es importante enfatizar que un trastorno de la conducta alimentaria puede llegar a la muerte.

-¡Ay por Dios!- exclamó angustiada tocándose el pecho con las manos.

-¿Qué, qué ocurre?- preguntó Bruno preocupado al ver su cara de shock- ¿Qué viste?- preguntó otra vez sentandose con ella en la cama.

-Estamos a tiempo con Matt- reaccionó luego de que Bruno terminó de leer- No soy psicóloga, ni especialista, no se que le está sucediendo, no se que tiene o en qué consiste ni cómo puedo ayudarlo pero se que estamos a tiempo- continuó levantándose y arreglándose lo más rápido que pudo- Aquí está tu saco- se lo arrojó dejando en evidencia que sí lo había escuchado antes.

-¿Qué hacemos?- preguntó Brun
no poniendoselo.

-Tengo que hacer que vaya a terapia, tengo que convencerlo de platicar por lo menos una vez con alguien que sí pueda ayudarle de verdad- contestó poniéndose las zapatillas lo más rápido que pudo -Creo que he me acercado mal, creo que estaba tan preocupada porque no comiera más que comida sana, por informarlo sobre la enfermedad que no me di cuenta que de esa forma se sentía amenazado. ¿Cómo esperaba que confiara en mí si ni siquiera le pregunté el por qué?- analizó lamentandose.

-Tú misma lo dijiste, no eres profesional, no lo somos. Hiciste lo que pudiste de la forma que creíste era correcta- animó Bruno rodeándola con los brazos- Todo va a estar bien- aseguró para suavizar su angustia.

-Te amo- contestó dándole un beso rápido - Y no podemos llegar tarde otra vez a White Bridge porque Galloway ahora sí nos correra- bromeó para que se apresuraran a iniciar su día.

...

-¡¿Cuánto más has conseguido?!- gritó Alfred arrojando los pocos billetes que tenían para pasar la semana sobre la mesa.

-¡Perdón pero mi novia no es un banco!- defendió sin darse cuenta de lo dicho.

-¡¿Mi novia?! ¿Así le llamas ahora? ¡Por esa etiqueta debió haberte dado más que esto!- gritó furioso.

Aunque ya no intentaba robarle sí le pedía dinero prestado constantemente.

-¡Nos alcanzaría más si no te lo gastaras todo en cervezas!- atacó cuando lo vió las latas que se había terminado ayer.

-¡Nos alcanzaría si no nos hubieran robado!- atacó azotando la puerta del refrigerador.

-¡Sí, fue muy bajo lo que les hicieron pero eso no es culpa nuestra!- gritó.

-¿Qué dices Caleb?- preguntó con confusión su padre.
Anteriormente cuando discutían ese asunto, siempre estaba de acuerdo con él, pero desde hacía meses su hijo lo había evitado, diciendo que tenía trabajo que hacer o que iría a tomar talleres de la escuela, lo cual era cierto, pero la verdadera razón era que ya no disfrutaba esos planes malévolos.

-¡Te acuestas con ella y no es capaz de darte mínimo el dinero que necesitamos para comer en la semana!- gritó.

-¡No es obligación suya darme el dinero que tú no puedes conseguir!- defendió furioso.

-¡¿Qué es lo que te pasa eh?!- preguntó- ¿Solo por haberte metido en sus calzones crees que le debes respeto?- se burló.

Caleb no resistió más la ira y le soltó un golpe en la mejilla.

-¡No vuelvas a decir nada más sobre ella!- amenazó iracundo cerca de su rostro.

-¡Eres un imbécil Caleb, lo has arruinado todo!- gritó cuando se dio cuenta que a su hijo ya le importaba la Clark- ¡Será tu culpa que nos hundamos en la pobreza, piensa la cara moribunda de tu madre antes de morir, quizá eso te ayude a recordar porque estás con ella en primer lugar!- añadió a las espaldas de Caleb que salía de la casa.

...

-Se supone que la clase debió empezar hace como quince minutos- se quejó Lindsey tratando de convencer a sus compañeros de fugarse.

Biología era su última clase del día y su profesor no se había aparecido, los chicos estaban impacientes por irse.

-Sí nos vamos ahora, ella se lo diría a su padre- susurró Evan a su oído dirigiendo la mirada a Addison.

Muchos evitaban amistarse con ella por esa razón, sin mencionar que era racista y demasiado egocéntrica.

-En realidad si el profesor no llega y sólo hay el 1% de la clase el otro restante quedará impune- informó Sophie.

-Bien, entonces vayámonos- exclamaron felices y todos se fueron del aula, a excepción de Ricky que estaba sentado al final del salón con la mirada fija siendo el único que conocía el paradero de su profesor, pues estaba cayendo a manos de su padre. La complicidad lo hacía sentirse sucio, una persona estaba siendo asesinada en ese momento y más tarde él junto a otros harían ver qué había sido cualquier cosa menos un homicidio.

Un montón de drama en sus vidas jaja.
Cómo siempre les digo el tema de la historia de Matt es con sumo cuidado, respeto y desde mi experiencia y la de otros que me han permitido adaptarla, del mismo modo la historia de Hannah.

Shut Up.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora