My Baby girl And Daddy

Capitulo 3

Al llegar a su oficina el abrió un cajón de su escritorio y sacó un folder verde con 2 lapiceros y me lo entregó.

— Allí está todo lo que debes saber, cuando termines de leer me dices tu respuesta.

— -al tenerlo en mis manos lo abrí y empecé a leer-

DDLG
Es "Daddy Dom, Little Girl" y es una dinámica BDSM (Bondage, disciplina, dominación y sumisión, sadismo y masoquismo) en la que uno asume el papel de "Daddy" o "Mommy" y el otro asume el papel de "baby" que imita cualidades infantiles.

Daddy Dom
Daddy representa una figura de autoridad y también cuida a su "baby" como si fuera su pequeña hijita; también existen premios, castigos y reglas para respetar.

Little Girl
Baby tiene un alma de niña pequeña.
Baby necesita ser cuidada, protegida y querida.
Baby debe acatar las órdenes y reglas de Daddy; también puede ser sumisa o no, si no lo es no hay ningún problema.
Baby puede disfrutar de actividades infantiles (ver dibujos animados, colorear, usar biberón, chupete, vaso entrenador, tener muñecos y peluches, etc..)

Reglas para Daddy
Así como Baby tiene reglas, Daddy también las debe de tener. Las reglas deben ser cosas que Baby exigía para Daddy.

Castigos
Los castigos pueden ser físicos o no físicos y se dan cuando Baby no cumple las reglas de Daddy.

Hay advertencias para los castigos. Ejemplo: si Baby rompe una regla, daddy solo la regañará, si Baby continúa rompiendo una de las reglas de Daddy recurrirá al castigo.

Los castigos pueden ser detenidos por Baby en caso de que ella no los soporte. Pueden detenerse con la palabra de seguridad.

Palabra de seguridad
Puede ser cualquier palabra. Lo importante es que no se mencione casualmente en una práctica sexual.

Premios
Daddy puede premiar a Baby por su buen comportamiento, por algo que ella haya prometido o realizado. Es para recordarle a Baby de que lo que está haciendo está bien.

Después de leer me quede un rato mirando esta última pagina, ya comprendí todo, si digo que si, tendré todas las comodidades del mundo y a este caliente pelinegro dominándome, si digo que no, regresaré a la calle, así que dije...

— Acepto.

— Genial. -dijo regalándome una sonrisa-

— Pero antes.. una pregunta más.

— Claro, dime.

— ¿Porque yo?

— Tienes todas las cualidades que necesito, excepto una, creo..

— ¿Cual es esa?

— Tienes una gran máscara de rudeza y no me dejas ver como eres en realidad.

— Si lo hago.. ¿Que gano? ¿Tu también me mostrarás tu verdadero tu?

— En los próximos días me conocerás más.

— Eso es una condición que tengo. -el me clavo sus hermosos ojos azules mientras esperaba que continúe- Hay que conocernos por lo menos 2 meses.

— ¿2 meses?

— Si.

— Empiezo la escuela en 3 meses así que creo que estaría bien.

— Como quieras, mañana ya estarás en tu propio cuarto. -dijo mientras se levantaba de su silla y se dirigía afuera-

— Cole.. -lo llamé-

— ¿Si?

— Yo.. ¿puedo dormir contigo?

No quería, no podía dormir sola, no otra vez, si este es el ángel que me cuidará por siempre entonces debía confiar en el, ya que es todo lo que tengo.

— -me observó por unos segundos- Si, claro, vamos..

Lo seguí hasta su habitación, era muy grande y muuuy bonita, también cálida, no iba para nada con la personalidad que me muestra hasta ahora.

— Iré a ducharme, ponte cómoda, ya regreso. -entró al baño-

Me recosté en su enorme cama, mientras pensaba en cómo mi vida iba a cambiara a partir de ahora, mis pensamientos se esfumaron al verlo a él salir con una toalla atada a su cintura y al ver esos bíceps, no tan marcados pero igual de atractivos, también sus músculos, su espalda, su cabello mojado.. dioss, hacía mucho calor.

— Hola. -me dijo al darse cuenta que lo miraba descaradamente-

— Yo.. lo siento.

— ¿Te gusta lo que ves?

— -solo desvíe la mirada y asentí, por favor, no podía mentir, rió un poco-

— Ten. -dijo dándome una camiseta suya-

— Gracias.

— Usarás mi ropa y algunas de las prendas de mi hermana durante 2 meses como dijiste.

— Está bien, de todas formas iba a perder todo.

— Buenas noches. -dijo acostándose a mi lado-

— Buenas noches..

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Al despertar noté que estaba abrazando algo, o a alguien.. al darme cuenta traté de soltarlo, pero el también me abrazaba así que solo me quede contemplándolo dormido...

— Es tan hermoso...

— Tu igual... -me respondió abriendo sus párpados y dejándome ver sus hermosos ojos azules, me sonrojé- no te avergüences, sabes que no mientes -el era atractivo y estaba consiente de eso, dios- ¿Tienes hambre?

— Si..

— Vamos a desayunar.

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holi! No olviden votar y comentar <3 Subiré un capítulo por día.