Capitulo 12

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Cole
A la mañana siguiente me desperté esperando que todo lo de ayer haya sido una pesadilla. Pero no fue así. Había perdido el control. Y lo sentía... Lo primero que hice fue ir al baño y hacer mi rutina. Luego me senté en mi cama a pensar... ¿Debería entrar a su habitación? ¿O no? ¿Ella querría verme? ¿O no? ¿Debería perdonarla? y la peor pregunta... ¿Me odiaba?
Después de tanto pensar me decidí y entré a su habitación. Ella aún estaba dormida... Así que me acosté a su lado y mi pecho chocó con su espalda lo cual causó que ella se despertara, al abrir sus ojos, me vió y se separó de inmediato.

Vete. -dijo dejando de mirarme y dándome la espalda.- Hoy no quiero ir a la escuela.

— Está bien nena. -dije serio pero con intención de solucionar las cosas-

— No me llames así.

— Michelle... ¿Podemos hablar sobre lo de ayer?

— No.  -ella estaba agotando mi paciencia-

— ¡Bien! ¡Entonces quédate aquí! SOLA.  Yo me largo.

— ¡Me parece PERFECTO!

— NO TIENES PERMITIDO GRITARME.

— TU TAMPOCO.

— ¿Así? En este maldito juego, en el que estamos, yo soy la autoridad, y tu... tu solo debes obedecerme.

— Una mujer que obedece. El paraíso para los hombres como tú.

— Cállate.

— No.

— Más te vale que cambies de actitud si no quieres ser castigada 2 semanas. -me pare de la cama y quede de pie, ella también lo hizo quedando frente a mi, ambos estábamos con el ceño fruncido-

— ¿2 semanas, sin sexo, ni besos tuyos, ni abrazos? PERFECTO.

— ¡Bien! -dije alzando los brazos-

— ¡Bien! -dijo imitando mi acción y salí de su habitación-

No podía con Michelle. No soy un hombre paciente. No estoy para aguantar a una adolescente...
Pero la amo. La amo demasiado. No puedo dejarla, nunca. Y hoy no sería la excepción. Me quedaría con ella todo el día. Ella no tuvo la culpa de nada. Yo si. Yo no supe controlarme.

¿Archie? Cancela todas mis citas de hoy. Solo pospón las importantes. O todas. Encárgate.

— ¿Sucedió algo? ¿Estas bien?

— Si. Me quedaré a arreglar un tema personal.

— Soy tu mejor amigo. Dime.

— Es sobre Michelle. Luego te lo contaré.

— Bien. Adiós.

— Adiós.

Como tenía el día libre decidí dormir de más. Dormí 3 horas más y fue lo mejor. Ya eran las 9:30 de la mañana y tenía hambre, la puerta de Michelle seguía cerrada, así que supuse que aún no despertaba. Luego fui a la cocina a preparar mi desayuno. Un café y rollos de canela que Michelle preparó...
La extrañaba. Luego fui al comedor a y me dediqué a comer. Luego de unos 10 minutos Michelle bajó por las escaleras. Y se dirigió a a la cocina, al notar mi presencia me miró a los ojos y vi su tristeza en su mirada. Realmente la había dañado. Luego dejo de mirarme y busco que comer. Carraspeé antes de hablar. Y ella me miró.

¿Te preparo algo? -ella negó con la cabeza- ¿segura? Puedo prepararte pancakes...

— No. Gracias... -dijo lo último susurrando-

My Baby girl And DaddyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora