Caminó alrededor del cuarto y forzó la mandíbula en una línea recta en sus labios. Pateó sus pertenencias esparcidas por el suelo, molesto, mientras recorría el gran desorden. Resopló algo agotado; no estaba listo para esta sorpresa, aunque sí lo hacía, solo que la pequeña charla con Jungkook lo estresó un poco y eso justificaba su dolor de cabeza o su estrés. Pensó en la empresa y que debía volver, pero también recordó que tenía que aclarar todo este asunto con su mente e ideas.
Una de las tantas cosas que debíamos saber es que nada sucedía porqué sí y es por eso que la vida era tan divertida, porque cuando algo importante llegaba a nuestras manos teníamos dos opciones, perderla o guardarla. Y curiosamente, la mayoría de las personas hacían la primera opción.
La gente cree que caer se vuelve costumbre, que uno mentaliza la derrota mucho antes de intentarlo, pero Taehyung creía en la rotunda idea de estrategia, porque a veces uno no caía porque el suelo era cómodo, sino para encontrar otra forma de levantarse.
El rubio estaba tan preparado para esta nueva función en el circo que no se molestó siquiera en esconder objetos de valor, sino que su mayor centro de atención se fijó en la carpeta de archivos que creyó importante y ocultó dentro del colchón, cabe decir que también los reemplazó por otros totalmente falsos, suponiendo que ese era el verdadero objetivo en una corazonada y acertó.
Sí, faltaban mil años para que el destino pudiera burlar a alguien como Taehyung.
—En las habitaciones no falta nada, ya revisé—informó Jin mientras terminaba de bajar las escaleras y se acercaba a ellos en el salón, sentándose a un lado de Yoongi una vez se encontró cerca.
—El resto de la casa también está completa—El teñido se inclinó hacia el círculo aún sentado en el sofá y continuó—. Todos los objetos de valor están en su maldita posición.
—¿Qué hay de ti?—Taehyung se dirigió a Jungkook—¿Revisaste tu habitación?
—¿Crees que alguien robaría una figura de anime?—se burló Yoongi.
—Cállate—fulminó el azabache, dirigiéndose ahora a su hermano—. Y sí, está todo bien.
Taehyung resopló.
—Bien. Jungkook, sube a tu habitación. Tengo que hablar de algo con Yoongi y Jin—bramó.
—¿Qué?—alzó ambas cejas—¿Por qué no puedes hablarlo conmigo aquí?
—Es complicado...—buscó las palabras adecuadas—, es un tema de adultos.
—¿Adultos?—se rió—¿Es por eso que no puedes decirme? ¿Acaso sigo siendo un niño para ti?
—Jungkook, ya hablamos de esto. Sube a tu habitación—ordenó más firme. Jin y Yoongi se removieron incómodos mientras Jungkook hacía caso omiso a sus palabras y desafiaba a Taehyung con la mirada—. Hablo en serio, Jungkook. Sube a tu maldita habitación.
—¿Por qué? ¿Por qué nunca quieres hablar conmigo?—sonó dolido—Siempre es así, siempre.
—Jungkook después hablaremos de esto si quieres, pero ahora sube a tu maldita habitación.
—¿Y si no lo hago, qué?—continuó—Soy parte de esta familia así que tengo derecho a escuchar lo que seas que dirás—Jungkook tomó aire y lo miró a los ojos—. Ya no soy un jodido niño, Tae...
—Y tampoco eres un adulto—le recordó. Jin vio un brillo en los ojos del azabache y supuso que lloraría porque su cuerpo también tembló y la mirada de Taehyung no era precisamente amable—. No te estoy preguntando, es una orden. Subirás a tu habitación te guste o no y te quedarás ahí hasta que yo diga que debes hacerlo. ¿Y sabes porqué debes obedecer? Porque esta es mi jodida casa y vives bajo mi techo.
ESTÁS LEYENDO
Monster ( vkook ) - Primera Temporada
Mystery / ThrillerLa vida de TaeHyung era como un tablero de ajedrez, tan estructurada que nunca falló en sus decisiones, pero la llegada de Kim JungKook aturdirá sus movimientos y traerá consigo un pasado que creía olvidado. ¿Qué será más importante para estos herma...