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Aquella tragedia sacudió a todo el azulejo del norte y no sólo a los lobos, otros clanes se enteraron y pronto la noticia sorprendía a todos como un lobo de sangre pura había sido asesinado por panteras. Después de enterrarlo en un terreno justo en la cumbre de las montañas donde estaban sus antecesores la manada Min descendió de vuelta bajo la sombría niebla que les acompañaba compadeciente del vacío que ahora cargaban.

Se dictaminó 8 días de luto en los que se prohibieron uniones, festejos, ninguna celebración de ningún índole. Los líderes evitaron hablar de mando por respeto a la familia y por esos días todo quedó a la deriva de un futuro incierto, donde la niebla se encargo de perpelejar aquellos días que vendrían.

Yoongi no supo cómo afrontar una pérdida, no sabía que hacer o cómo actuar, seguía despertando creyendo que estaría todo en orden, pero era como si la realidad le abriera los ojos y le reviviera aquel dolor que no podía controlar. Tuvo tanto temor al no conseguir afrontarlo, ¿cómo te acostumbras a su ausencia? algo como eso era posible, no lo creía.

Después de la ceremonia abandono la residencia y caminó hacia el jardín, claramente su fiel sirviente le acompañó, Yoongi se sentó arrastrando la tela de su vestimenta, arrastrando su corazón, con tanta lástima que podría ser reflejada en cada hábito. Sus ojos desgastados, la palidez en su piel por el cansancio, y aquella aura tan gentil, tan vivaz casi inexistente.

Por lo que supieron todo fue una emboscada, tan bien planeada que sorprendió la efectividad de aquel malévolo plan. Se dijo que al llegar a los límites pronto se vieron dividos de manera exacta, con tanta precisión que el rey quedó a total soledad enfrentando a cinco panteras líderes. Jungkook y Beyrul fueron tomados prisioneros atacando sus puntos débiles como si fueran conocedoras de ellos, y con ambos guerreros fue fácil desarmar el ejército de lobos.

Nadie supo de dónde obtuvieron la información, pues hace pocos días una amenaza de toma de terreno le había llegado al azulejo del norte por lo que se apresuraron a las expedición y campañas de rectificación, encontrando la sorpresa de aquella batalla. ¿Por qué lo hicieron? era una incógnita pues nunca se habían mostrado capaces de enfrentar a los lobos, y siendo honestos cada clan prefería cuidar su terreno y no poner una disputa por vanidad, ahora de pronto parecía que aquello dejó de importar a las panteras que acabaron con el líder del clan sin perder la oportunidad.

Yoongi no terminaba de entender, su padre, su preciado padre.

- Va a desaparecer algún día, este dolor_- preguntó con agonía a su guerrero junto a él_-

Jungkook se sentó a su lado y dejó que el príncipe recargue su cabeza en su hombro.

- no desaparece, sólo aprendes a lidiar con ello_-

- No puedo, Jungkookie es demasiado_-

Volvió a desmoronarse en lágrimas y jadeos lamentando cada segundo que pasaba y él ya no estaba.

- Perdóname, no pude protegerlo y te causé este sufrimiento_-

Jeon apretó sus manos en puños llenos de ira por su incompetencia, tanta rabia al pensar que sí hubiese puesto más atención, si se hubiera dado cuanta a tiempo de la emboscada su señor no estaría en esta condición.

Su culpa fue intervenida por las manos frías que sostuvieron las suyas.

- No es tu culpa, cómo podrías saber lo que ocurría, incluso te hirieron, sé que luchaste para salvarlo, pero no se compadecieron_-

- Yoongi perdón_- susurró_-

- ¡Basta! no tengo que perdonar no fuiste tú, fueron las panteras, mataron a mi padre, te hirieron, fueron ellos_-

Through your blue eyes [KOOKGI] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora