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De vuelta en el límite del azulejo del norte, respiro profundo intentando ordenar la mejor táctica en su cabeza. Seokjin y Hoseok tuvieron que esperar ya muy lejanos el regreso del lobo pues era muy arriesgado que entrarán los tres. Jungkook recorrió con sigilo el lado del azulejo, rumbo a la residencia, hasta ahora ninguna alarma se había activado, menos una guardia de seguridad lo habían visto.

Trató de mantener la serenidad pues faltaba poco, logró ver que habían asentamientos fuera de la residencia, y una extraña obscuridad en el pueblo, sin embargo no pudo descifrar porque simplemente continuó su camino. Llegó al jardín justo frente al ventanal que alguna vez lo llevó junto a su querido príncipe, no se dejó invadir por recuerdos sino que mantuvo la mente centrada.

Observó el pasillo una vez dentro, habían dos guardias al final, por lo que decidió entrar por el otro lado. Así lo hizo hasta que la habitación de la reina fue visible entonces supo que estaba cerca. Ingresó con cautela pues no sabía si la corte estaría dentro para su fortuna sólo la silueta de una mujer fue visible.

La mujer se giró de inmediato asustada pero en cuanto vio quién era sólo pudo quedarse estática creyendo alucinar con la presencia del guerrero.

— Reina _—susurró_—

— están lastimando a mi pequeño, ellos usaron su lazo_—

—Lo sé, vine por ese motivo, usted necesita romper ese vínculo_—

— Sí... sí,.... yo... lo haré_—

La mujer seguía incrédula y trató de ser lo más silenciosa posible, para no despertar a nadie, como la orden lo pedía amarró un nudo a un extremo de la prenda de Yoongi y de una de sus joyas, para después cortarlo, aquello causó algo en su pecho que fue solo momentáneo.

— Ya está, ¿eso es todo? _—

— Sí, gracias prometo cuidarlo_— dispuesto a irse el agarre en su brazo lo detuvo_—

— ¿Cómo está? es un buen lugar en donde viven, si necesitas oro yo_—

— No! su majestad le aseguró que todo está bien, tenemos un nuevo hogar, nosotros_—se detuvo pues no sabía si reverlarlo_—

— ¿ustedes? _— dijo algo ansiosa_—

— Bueno Yoongi la extraña demasiado_—

— Ibas a decirme otra cosa, Jungkook dímelo _



— Nosotros nos... casamos_— dijo con algo de miedo por la reacción, pero sólo la vio sonreír mientras acunaba su mejilla en un gesto de ternura_—

— Suha me lo dijo, que terminaría así, tú y él, lamento no haber estado en ese momento, lo lamento tanto, prométeme que lo harás feliz_—

Jungkook sonrió para asentir varias veces.


— Ahora debo irme, debo volver con mi esposo_— mencionó lleno de una alegría pues tuvo la bendición en su unión de la reina madre_—

La mujer sonrió orgullosa de ello, tomando su mano entre la suya para afirmar que debía irse. Pero en cuanto se acercaron a la puerta, está fue abierta con fuerza, frente a Jungkook estaba Beyrul con el rostro lleno de furia y los ojos vueltos llamas, pues ahora tenía la oportunidad de recuperar a su hermano.

— Aquí estas, Jeon Jungkook_—


El mencionado empuño su espada, dispuesto pelear aún sabiendo que estaría rodeado.


Through your blue eyes [KOOKGI] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora