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—Mi señor, despierta tenemos entrenamiento_— dijo con voz firme y grave_—

— ¿mi señor? _—

— Vamos Yoongi, debes ir a entrenar_—

— Jungkookie no lo necesito, tú me cuidas_— dijo con una sonrisa y un rostro adormilado_—

Y tal vez haberse convertido en guerrero le dio métodos ortodoxos de despertar a las personas, los demás sirvientes estaban a un lado montando la bañera para el dichoso príncipe que no se digna a despertar.

Una vez concluyeron como ya era de esperarse se retiraron, al menor del clan Min no requería que le sirvieran incluso mientras se ducha era algo incómodo. Ya era de conocimiento de todos allí.
Jeon tomó en peso al menor que se acurrucó entre sus brazos para ser arrojado directo al agua fría.

— Eres imbécil_— reclamó_—

— Te espero en el salón de entrenamiento, ponte tu armadura_—

Jeon se retiró bajo los reclamos del menor, y si hubiera sido otra persona de seguro nunca habría tenido la osadía de aquel acto, pero para Jungkook era una ventaja que aprovechaba de vez en cuando.

Fueron alrededor de treinta minutos o más, hasta que la puerta se abrió con el príncipe y su armadura.

— Debemos comenzar con algo de calentamiento_—

— Jungkookie vamos a pelear, necesito vengarme_—

— Claro que no, no quiero una lesión ya sabes lo básico, movimientos con la espada, comienza Yoongi_—

— Esto es tan innecesario_—

Sin embargo comenzó con aquel entrenamiento al que estaba obligado, Jungkook también lo imitó y pronto estuvieron concentrados en estirar sus extremidades, acostumbrarse al peso de la espada, y sobre todo a controlar sus movimientos.

— Es todo, ahora un ataque directo sin adornos debe ser certero_—

— ¿enserio? _—

Yoongi rió y entonces se colocaron frente a frente, sus miradas estaban en el contrario hasta que se dispuso a dar el primer paso, su espada trazó un ataque certero que su oponente logró esquivar, dando un golpe de regreso que también fue frenado, Yoongi atacó sin opciones y Jungkook casi lo tenía  acorralado tras cuatro ataques seguidos, aún así no deberían subestimar al príncipe que con dificultad pero agilidad se defendió, blandiendo su espada con determinación hasta que el filo quedó apuntando a Jungkook de un momento a otro.

Ambos con la respiración agitada y con sudor por su frente, Jeon levantó la mirada con una expresión de enojo mirando los ojos azules con esa característica muestra de prepotencia, Yoongi sonrió victorioso.

— Jungkookie te tengo!! _—

Aquella sonrisa de victoria desapareció cuando Jungkook comenzó a reír también, y fue tan rápido el movimiento que Yoongi no tuvo tiempo a reaccionar, Jeon con su brazo esquivó el filo que le apuntaba y logró que la espada del príncipe cayera a un lado, mientras a su vez tomó con fuerza el cuerpo contrario, su espalda dio un golpe en seco con el pecho de Jungkook y la espada de este estuvo cubriendo su cuello por milímetros.

— Todavía no me tendrás, Yoongi_—

— Seguimos hablando del entrenamiento, ya me perdí_—

Jungkook solo soltó una risilla y lo liberó no había modo de tomarse algo enserio con su príncipe.

— Si utilizas el ataque que intentaste conmigo, fácilmente te derrotan, a lo que me refiero con directo es tener la certeza que tu rival no podrá escapar de ningún modo_—

Through your blue eyes [KOOKGI] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora