Midnight | Xavier Thorpe.

6

Xavier miraba a todas aquellas familias que no tenían miedo de dedicarse amor públicamente, y pensó, qué tal vez, solo tal vez las cosas hubieran sido diferentes si él hubiera tenido una madre.

Su padre insistía en mantenerlo encerrado en aquella academia porque temía que pudiese arruinar su tan construida reputación.

A su madre no la había conocido y su padre tampoco hablaba de ella, llegó a creer que había muerto en el parte, pero siempre que le preguntaba a su padre, él simplemente le cambiaba el tema.

Lo único que sabía de ella era que había estudiado en Nevermore pero nunca quiso indagar más sobre ella, su padre se lo tenía estrictamente prohibido, y a este punto aún no entendía porqué lo obedecía.

—¿Todo está bien? —le sorprendió escuchar una muy conocida voz detrás de él. Algo que nunca había pasado. Ella se había acercado.

—Espera, creo que estoy alucinando. —dijo con un poco de diversión.

La chica le dio una mala mirada.

—Me iré por donde vine si tanto te desagrada mi presencia. —cuando se estaba dando la vuelta para irse, Xavier la tomó de la mano para que se quedara.

—Creí que estarías con tu familia... —Midnight se mordió ligeramente el labio. Ese gesto no pasó desapercibido para el chico, quien carraspeó y soltó su mano. —digo, son muy pocos fines de semana que puedes verlos, cualquier adolescente aprovecharía esa oportunidad.

—Creo que a estas alturas ha quedado claro que no soy cualquier adolescente. —inquirió con molestia.

—Claro.

—¿Tus padres no vendrán? —Ella preguntó sin interés.

—No tengo padres.

Midnight abrió la boca para decir algo, pero simplemente nada salió de su boca. Xavier notó ese gesto y le divirtió mucho.

—No es cierto, sí tengo... —paró algunos segundos teniendo la total atención de la Addams —al menos un padre. —terminó en un susurro.

—Quédate con los míos, son un dolor de cabeza.

—No sabes lo que dices.

—Lo sé, es abrumador vivir con la pareja Addams. —giró los ojos.

—Al menos tienes a una madre que te quiere. —Midnight bufó sarcásticamente. Parecía que Xavier había olvidado lo que le contó.

—Vaya.

—No he olvidado nada, solo... siento que tu resentimiento hacia ellos no te deja ver lo que realmente sienten por ti. —El chico se paró frente a ella para verla directamente a los ojos.

—Repulsión. Yo no soy Merlina Addams.

—Y eso está perfecto, Mid, no tienes que ser como ella para que las personas te quieran.

—No necesito que nadie me quiera. —la pelinegra estaba tomando una actitud defensiva.

—¿Qué pasó con ellos?

Midnight dudó si contarle o no. Xavier no parecía ser ese tipo de persona que contaba los secretos de todos a todos. Parecía de fiar. Y más que nada, ella se sentía cómoda con él. Un sentimiento que jamás había experimentado.

—Lo de siempre. Empezaron a sermonearme y a compararme con Merlina. Siempre es Merlina.

Xavier notó algo en el rostro de su amiga. ¿Tristeza tal vez? No lo sabía. Era algo que nunca había visto en ella y le costaba reconocer la emoción.

—Pero no importa. —Por primera vez, trató de forzar una sonrisa. A su amigo se le hizo raro porque nunca la había visto sonreír.

—Mi padre nunca me ha hablado de mi madre. —él dijo después del largo silencio que se formó. —Creo que murió. Ni siquiera sé su nombre.

—¿Tienes alguna foto de ella? Quizá alguien la conocía.

—Sí... hace años, buscando un documento en la oficina de mi padre me encontré una foto de anuario, era de una mujer muy parecida a una foto que mi padre había quemado hace años. Creo que era mi madre. Tenía el uniforme de Nevermore.

—Una excluida.

—Lo era.

—Llegué a pensar que tu madre era una normi.

—Yo también había vivido bajo esa mentira, mi padre no sabe lo que descubrí aquel día... No entiendo porque se empeña tanto en ocultarme la verdad sobre mi madre.

—Algunas personas tienen un sentimiento llamado dolor, —Xavier rió. —tal vez recordarla le produce eso.

Él asintió. —Puede ser.

Ambos volvieron a quedarse en silencio.

—Tienes que ir y afrontar la situación con tus padres. No puedes huir cada que sientes algo, Midnight.

—No siento.

Xavier disimuló un sentimiento que se produjo en él al oír aquello. No quería pensar demás las cosas.

—Estoy seguro de que tus padres te aman... en su retorcida forma, pero lo hacen.

—Iré... solo si me prometes que investigarás más sobre tu madre. —Ella realmente quería saber que pasaba.

—Hecho, solo si tú me ayudas. —Él sabía que que quizá se estaba metiendo en un serio problema con su padre, pero realmente quería respuestas.

—Lo pensaré.

—Lo tomaré como un sí.

Midnight asintió.

—No hay nada más interesante que hacer en este lugar.

Ella asintió nuevamente hacia él pero ahora en forma de despedida y se encaminó hacia donde estaba hacía algunos minutos con sus padres. Tenía que afrontar y dejar de huir tal como dijo Xavier. Ella sabía que no era Merlina y no tenía porque importarle que la compararan con ella. Sabía que podía ser mejor.

Y se los demostraría.

J011222