Seducción Perversa. // -KOOKV-

Capítulo 2:

"El egoísmo te hará jugar primero porque luego tendrás los sentimientos a tu completo control sobre las relaciones."

-¿Tae? - Jimin movía su mano rápidamente frente al rostro del castaño -Tierra llamando a Taehyung ¿Me recibes? - Lo mira burlón.

-¿Qué? - Parpadea repetidas veces mientras sacude su cabeza -Oh, lo siento.

-Te has quedado atontado pensando en Jackson ¿No? - Eleva una ceja inquisidoramente -Sí que eres apasionado.

-¡Oye! No es eso - El tono burlón que uso el rubio hizo ruborizarlo -Es como un hermano mayor para mí.

-¡Pero que aburrido eres! - Exclamó Minjae -De todos modos, vayamos a comer antes de que se acabe la comida - Engancha uno de sus brazos con el del castaño y el otro con el del rubio.

-Vayan ustedes - Taehyung se suelta del agarre y les sonríe a ambos -Yo los alcanzo enseguida.

Jimin se encoge de hombros y se va junto a Minjae. Taehyung, por el contrario, se dirige hacia Jackson.

-Oye, tú - Jackson levanta su vista y observa cómo el menor se acercaba hacia donde él. Le sonríe sin mostrar sus dientes, manteniéndose callado -¿Qué te sucede?

-Siempre he sabido qué llegaría este día, pero ahora que estamos aquí es algo muy diferente - Sentencia con tristeza.

-¿A qué te refieres? - Cuestiona con el ceño fruncido.

-A que te vas - Murmura con pesadumbres -Supongo que nunca pensé que lo harías.

-Pero si tú me ayudaste a encontrar el apartamento en Seúl - Dice el castaño mientras sus ojos intentaban conectar con los impropios, pero éstos parecen querer esquivarlos a como diera lugar. Observaba todo a su alrededor, menos al chico frente a él -¿Querías que viva en Sarley para siempre? - Pregunta en tono burlón.

-Lo sé. No tiene sentido ¿No? - Suelta una pequeña risa sin gracia.

-Si te sirve de algo, también me asusta lo que viene después - Jackson lo abraza, mientras suelta un suspiro –Está a solo una hora en tren – Rompe el abrazo -Puedes visitarme cuando quieras - Le anima.

-Si pero... - Vacila -No es como verte todos los días - Sonríe sin ganas -No es como tenerte aquí a mi lado.

-Te echare de menos también - Le sonríe dulcemente -Sabes que siempre nos tendremos el uno al otro.

-Me estoy comportando como un idiota, lo siento - Dice apenado mientras agacha la mirada hacia sus manos que se encontraban jugando con sus dedos en nerviosismo -No quiero fastidiarte el día - Levanta el rostro -Estoy emocionado por ti... de verdad – Se plasma en su rostro una enorme sonrisa para acto seguido, besarle la mejilla.

Siempre fue tan dulce.

-¿Ya estás bien? - Cuestiona Taehyung alegre al ver más animado a Jackson.

-Ya estoy bien - Responde con un leve sonrojo en sus mejillas de vergüenza por la escena que realizó momentos atrás.

-Está bien, tengo que irme. Jimin y Minjae van a matarme - Taehyung suelta una risueña risa y se da la vuelta para comenzar a caminar hacia la entrada del internado. Esperando y rezando que no se hayan matado en su ausencia. Pero en ese instante escucha, nuevamente, la voz de Jackson.

-¡Taehyung, espera!

-¿Hmm? - Se da media vuelta para volver a mirar al mayor, percatándose que los ojos del contrario se encontraban apagado y teñidos de pena nuevamente.

-Mentí –Su voz era baja -No, no estoy bien. Taehyung, no quiero que te vayas.

-Pero sabes que debo hacerlo - La suavidad de su voz era notable -Y no sólo porque ya tengo qué, sino que yo también me quiero ir.

-Pero... ¿Y si tuvieras otras opciones?

-¿De qué estás hablando? - Jackson quedó en silencio, rumiando las palabras e ideas aglomeradas que tenía en su mente -Dilo y deja de hacer el tonto - Espeta Taehyung impaciente. El contrario asiente lentamente apretando sus labios y convirtiéndolos en una fina línea.

-Quiero casarme contigo, Taehyung.

El nombrado suelta una estruendosa carcajada, como si le hubiesen contado el mejor chiste del mundo.

Jackson lo observa desconcertado con el ceño fruncido. El castaño comienza a detenerse al no escuchar la risa del mayor acompañando la suya y lo observa. Su sonrisa también desaparece en el camino lentamente. Jackson no se estaba riendo.

Mierda, va en serio.

-¿Qué? - Abre los ojos y boca en sorpresa -¿Casarnos? ¿Nosotros dos? - Se queda pasmado ante esa idea.

-Sabes que nos amamos - Jackson agarra la mano de Taehyung y la aprieta ligeramente, en un intento desesperado por trasmitirle al menor sus sentimientos.

-Sí, pero no así - Taehyung aparta la mano del agarre -Te quiero como a un hermano - Al oír aquello, el rostro del mayor se desfiguró en decepción -Jackson... - El castaño intenta agarrar su mano, pero el contrario se aparta despacio, mientras lo mira y le dedica una sonrisa forzada.

-Lo siento - Ríe bajo mientras niega con la cabeza -Supongo que he sido demasiado brusco ¿Verdad? - Su voz era seca -Siempre estaré a tu lado, Tae - Le da unas leves caricias a su cabello y se va con una máscara de indiferencia, dejando al menor petrificado en el lugar y con un revuelo de pensamientos.

Tal vez Taehyung lo sospechó, pero nunca lo esperó y está vez no era la excepción. Jamás creyó que Jackson expondría con valentía y seguridad sus sentimientos y menos de aquella manera... con petición de matrimonio. El amor entre ellos, para el castaño, siempre la consideró sincero y natural, más nunca imagino que floreciera algo más allá del amor de amistad.

Taehyung se sintió aterrado por la vergüenza de su rechazo hacia Jackson. Aunque no haya pronunciado explícitamente las palabras directas, se le encoge el corazón de sólo recordar el entero manto que cubrió y opacó los ojos de Jackson al notar que sus sentimientos no eran correspondidos.

Jackson olía familiar, pero no quería acariciarlo, no quería besarlo hasta sentirse intoxicado y para nada advertía afectación con su presencia. No le pregunten porqué, pero la verdad era que él no olía como su hogar, no olía como amor sentimental y romántico. Olía, simplemente, como amistad, y ahora estaba teñida de una sensación agridulce.

Suspiro abatido mientras veía perdido el camino que minutos atrás era atravesado por el mayor. Obligó a sus pies a moverse y volvió a encaminarse hacia el internado al encuentro con sus amigos, decidiendo, por el momento, a no seguir pensando en ello.