Seducción Perversa. // -KOOKV-

Capítulo 23:

"Causante del placer y víctima de la pasión"

Lo buscó por casi toda la mansión, siguiendo cada lugar en el que podría llegar a estar. Escuchando el sonido de sus pisadas en el suelo, le llevó un buen rato sin logro alguno, no había rastro de él. ¿Dónde está?

Para ese entonces, lo único que le quedaba por revisar era el ancho gimnasio, y la idea de que estuviera allí se extendió por toda su mente. Mientras se encaminaba por los pasillos, se le cruzaba las infinitas posibles razones por las que Namjoon oculto las veracidades que los rodeaba.

-Te he estado buscando – El tono de voz inusual que utilizo Jungkook y el intercepto inadvertido, provocó una pequeña parálisis en el cuerpo de Taehyung. Sonaba como un animal sigiloso que está al acecho de su presa.

-Estoy un poco ocupado ¿No puede esperar? – Una muy sencilla pregunta en tono amable era más que suficiente para que Taehyung no esperará respuesta del contrario. Así que, siguiendo su camino hacia el destino elegido, comenzó nuevamente su marcha. Sin embargo, el apretado agarre en el brazo lo hicieron detenerse abruptamente.

-No, no puede – Lo miró fríamente y con algo de irritación –Siéntate. Quiero que discutamos algo, ahora – Bramó con voz autoritaria.

Un suspiro lastimero salió de los labios del castaño. Sin opción e impaciente por lo que tenía que decir, se sentó en el sofá frente a él.

-¿Qué sucede?

-Quiero que me digas la verdad – Más calmado que antes, el pelirrojo desvía la mirada hacia su costado.

-¿Acaso te he mentido alguna vez? – Su ceño se frunció y le lanzó una mirada incrédula. Realmente tiene malas habilidades con la gente.

-No, eso no viene al caso – Negando con la cabeza, levantó la vista conectándola con la impropia -Puede que otros te estén influenciando.

-¿Influenciando? – Esto era el colmo -Puedo pensar por mí mismo. Gracias – Taehyung podía sentir los cambios de emociones en su cuerpo. Sus ánimos se desvanecieron porque lo sentía, prácticamente, ofensivo escucharlo. De alguna manera, la necesidad de que Jungkook asumiera insultantemente que le mentiría, lo hacía poner enfermo.

-No hay necesidad de enfadarse – Levanta la mano en forma de rendición, mientras suelta una pequeña risa. Taehyung arquea una ceja en respuesta, de verdad no entendía cuál era la gracia del asunto. Tal gesto solo hizo intensificar la risa de Jungkook. Una melodía para los oídos del menor en otras circunstancias –De acuerdo, lo siento. Empecemos de nuevo.

-Está bien – Golpetea el suelo con uno de sus pies impacientemente.

-¿Tú y Jin firmaron un pacto juntos?

Los ojos de Taehyung se abrieron, su respiración se congeló y el movimiento de su pie se detuvo. Quedó inmóvil por algunos segundos.

-¿Quién te lo ha dicho? – En un susurro casi inaudible, suelta finalmente con temor.

-No hace falta que nadie me lo diga. Simplemente lo sé – Mirando a los ojos del demonio, podría jurar que parecía que lo mataría con esa simple y fija mirada.

-Entonces ¿Por qué me preguntas si ya lo sabes? – Apretó los labios fuertemente volviéndolos blancos. Sentía que estaba comenzando a sudar frio.

-Solo lo estoy confirmando – Dice en tono distraído, mientras una risa dolorosa sale de sus labios.

-No es que sea de tu incumbencia, pero sí hemos firmado un pacto.