🐾Capitulo🐾17

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Zee

Por un momento hasta olvide cual era la razón por la cual estaba aquí y que en ese preciso momento no me perecio tan importante y hasta me plantee la idea de dejarme llevar por el calor del momento y quien sabe quizá y nuestros cuerpos tengan un mejor entendimiento táctico, incluso que las palabras; mismas que en este instante salían sobrando pero aún así salían a relucir.

—¿Quién eres tú para mí Saint?— era algo que deseaba preguntar desde el primer momento que lo tube frente a mi en aquella habitación, ese día que hasta hoy se sentía tan lejano.

Era una de las tantas preguntas que rondaban en mi un tanto vacía memoria y era esta una de las que más anhelaba respuesta.

¿Que era el para mi?, porque estaba casi seguro que amigos, amigos solo no, algo más tenía que pasar y creo que odiarnos no era la respuesta ya que no le cuentas a tu enemigo acnesico la historia de su vida sacándole de un grave error o si.
Además la última vez que tocamos el tema tenia la sensación de que algo faltaba y habia algo que no encajaba, algo estaba de más y hoy no salgo de esta casa sin obtener respuestas.

        ******'***.            . *********

Saint

Era confuso..... Quizás

Era una pregunta de fácil.... Si que lo era.

Solo tenia que pararme enfrente mirarle a los ojos y después soltar el aire que de seguro iba a estar conteniendo, solo debía decirle algo así como:

¡Si, sabes antes de todo este lio del accidente y luego tu supuesta muerte éramos novios y sabes una cosa mas, fui yo quien te quito lo hetero y lo pinche amargado de paso, y no, no me agradezcas fue un placer!

Era solo decir unas cuantas frases nada difícil para mi ya que es un milagro cuando duro un minuto entero sin hablar es el punto donde hasta yo lo considero así. Pero mirándole aquí en mi puerta, frente a mi, en mi casa, en mis brazos, tan cerca sintiendo sus manos en mi....dejémoslo en espalda, las palabras simplemente no quieren salir y por mas que trato solo se traban haciendo mas grande el nudo en mi garganta.

Porque simplemente no puedo decirle lo mucho que me gusta, lo mucho que lo e extrañado, la falta inmensa que me hizo estos años y lo que sentí y sentía al pensar que nunca lo volvería a ver pero desde el punto de vista de un amante y no solo del de un simple expectador.

Me encantaría decirle algo tan cursi y empalagoso que termine dándole diabetes o algo peor.

Te diría que te amo y que sin importar que nunca deje de hacerlo, que todas la noches cuando después de llorar me quedaba dormido solía buscarte en mis sueños tan cruel que ni aún así lograba encontrar un astivo de tu ser aunque de cierto modo me conformaba con solo escuchar tu voz llamando mi nombre sin importar que eso solo fuese un callejón sin salidas que terminaba llevandome en circulos, como el que cada noche sin falta tu chaqueta favorita fuese mi única compañía, que tus fotos se volvieron algo así como un abrazo de consuelo, tus cartas fieles testigos de mis lágrimas mudas y que fue solo unos meses después de tu muerte que al fin tube una tumba a la cual llorarle pese a negarme a creer que ahí estabas tu, y tenía razón, que fuiste y serás mi más grande y único amor que nunca pude olvidarte y que a pesar del tiempo tengo tan grabada tu esencia en mi, que había momentos de quimera en los que creía tenerte justo a mi lado, que creí enloquecer cuando ese día llegue a nuestro refugio y creí escuchar tu voz aunque muy en el fondo supiera que no era cierto, aun así eso no me detuvo de buscarte por todo el lugar así como tampoco evitó que la decilución fuera tan grande cuando a 180 choque con la realidad; tu no estaba ahí, ya nunca más te vería y ya no estarías para mi.

Te contaría del maremoto de emociones que me sofocaron cuando llegué a la casa de Max y te vi, te diría que tube que hacer un mayúsculo esfuerzo para contenerme y no lanzarme a la seguridad de tus brazos en ese precio instante.

De tanto que quería decir no podía decir nada.

No salía nada.

Solo me quede ahí... observando te, así que hice lo único racional que se me ocurrió en ese preciso instante.

Era ese algo que tenía que ver con mahoma  y una montaña.

Si las palabras no funcionan tendré que valerme de acciones.

No te olvidéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora