Te protegeré con mi vida (Terminada)

Epílogo

4 años después.

Valentina.

Han pasado 4 años llenos de muchas locuras y amor, mucho amor. Y qué les puedo decir mi vida ha sido una maravilla mi matrimonio con mi morena hay tanto que decir, pero las palabras se quedan cortas de tanto amor, y sí, estos 4 años como esposas son en sueño, ya que hizo un complemento más a nuestra historia de amor que comenzó hace años y que logramos pasar por mucho.

Hoy somos madres de tres hermosas niñas, y sí, después de 2 años con solo Mia, mis pequeñas mellizas Nathalia y Natasha nos sorprendían con su llegada, ellas eran tan parecidas a mí con cierta mezcla de ambas pero con todo el carácter de mi morena que vivía de puro amor por sus princesas, Mia había reaccionado tan bien con la noticia que mi corazón no pudo ser más feliz.

Ahora se podrían imaginar cuando supieron las tres de la llegada de un nuevo miembro a la familia, porque si, hoy por hoy estamos a la espera de nuestro pequeñito André que viene en camino. Y no podría ser más feliz sinceramente, es más de lo que soñé algún día de mi vida... Porque hoy no solo sueño mi historia de amor sino que la vivo con el amor de mi vida.

Mia: Mami y cuándo regresa mama (seria) ya tardó mucho en ese viaje (viéndola)

Valentina: En unos días mi amor, sabes que tenía que ir (Asintiendo) no te me enojes y ve a jugar con tus hermanas (Asintiendo).

Y qué les digo, mis tres hijas mueren por su mamá Juliana que siempre busca la manera de consentirlas en todo, y ahora que ella no estaba había sido complicado lidiar con ellas que en todo momento querían hablar con su morena porque sí así decían ellas, así que mi morena ya no era solo mía.
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Al día siguiente mis hijas me levantaban con un charola de mucha variedad de comida y para serles honesta se me hizo raro ya que ese día nuestra ama de llaves descansaba y las niñas tenían prohibido hacer algo de la cocina sin alguna supervición.

Valentina: Mia, ya sabes que no debes estar en la cocina sola con tus hermanas (viéndola mientras solo sonreía)

Mia: No estuve solo (viendo entrar al gran amor de su vida) mamá volvió (feliz)

Juliana: Hola mi vida (acercándose a ella para darle un pico)... Te extrañé a ti y a todas mis princesas junto a mi campeón (sonriéndo)

Nathalia: Lo hicimos para todos mami...

Natasha: Siiii, con pelis (sonriéndo viendo a sus madres)

Valentina: Así que es una clase de sorpresa para mi (Asintiendo las cuatro). Gracias!

Nuestra tarde de ese domingo había sido bastante divertida para nosotras y cómo no si las niñas disfrutaban tanto estar así con sus dos madres siendo consentidas por mi morena que adoraba a sus chicas dueñas de su vida completa.

Y yo no podría estar más feliz y enamorada de vivir tanto amor, y mi me preguntaran no cambiaría nada porque simplemente mi vida era mi chiquita junto a mis hijas y ver lo feliz que eran mi felicidad era lo doble.

Como esos momentos al verlas dormidas se había vuelto mi parte favorita de momentos como ese y justo me hacían recordar aquel día en que mi esposa y yo habíamos leído nuestros votos de puras promesas llenas de amor que hoy por hoy seguían al pie.

[Flashback]

Juliana: (Suspirando) Amor de mi vida, hay tanto que decir... que el tiempo no sería el suficiente, así que comenzaré por darte las gracias, porque gracias a ti volví a sentir ese amor que había desaparecido en mí en mucho tiempo (sonriéndo). Me amaste sin importarte nada ni nadie... Y me hiciste la mujer más feliz del mundo. Y te prometo hacerte la mujer más feliz de mundo, no dejarte ni porque me lo pidas, estar a tu lado en todo momento sea bueno o mala, pero juntas mi amor cómo todo (tomó su mano). Te amo con todo mi corazón y sin duda mis padres estarían felices de ver la unión que tanto imaginaban (sonriéndo) y que hoy se cumple.