Emily
Una semana, había pasado una semana desde que nos dimos un tiempo. Toda esta maldita semana me la he pasado acostada en mi cama sin querer comer, mi madre me tiene que rogar para que coma. Tampoco me he bañado, eso es muy raro pues soy muy higiénica y no puedo pasar un día sin bañarme, pero en estos momentos no me apetece hacer nada, me siento vacía, rota, no tengo nada por lo que seguir.
No he querido ir a la escuela en toda está semana, pues el simple hecho de tener que verlo y no poder abrazarlo y besarlo me mata, ya me pasara Ayra los apuntes. Mi madre viene de vez en cuando a mi habitación y me abraza pues en estos días no he hecho otra cosa más que llorar y ella me comprende, dice que soy muy joven para sufrir por amor, pero ¿qué se puede hacer? Soy una chica de 18 años con el corazón roto.
Cada día es peor que el anterior, es una tortura horrible y con tan sólo recordar me pongo a llorar como una niña chiquita. No he sabido nada de él pues decidí apagar mi celular para no tener que ver si ya quito nuestra relación en Facebook o si me a mandado mensajes o si se ha conseguido otra novia o si tengo llamadas perdidas o con el simple hecho de ver su puntito verde y que no me hable. Cada idea me aterra pues no sé que ha pasado.
Hoy, el séptimo día de sufrimiento estoy lista para prender el celular, tengo la nececidad de comprobar si me extraña o no. Decidí tomar un baño y hacear mi habitación que estaba hecha un asco. Al terminar opte por ponerme un pans y una sudadera negra y mis nike negros con blanco, amarre mi largo cabello negro en una coleta y me senté en la cama; estaba lista para prender el celular cuando mi madre entró por la puerta sorprendida por mi repentino cambio de apariencia y mi aceada habitación, llevaba un pantalón de mezclilla, una blusa morada al igual que sus adidas. Mi madre es una mujer perfecta de complexión media, piel ligeramente morena y un largo largo cabello marrón que hacía juego con sus ojos, la amaba tanto porque entendía cada situación de mi vida y me hacía sentir bien, aunque no siempre nos entendíamos. Me miro con una sonrisa y dijo:
-¡Que milagro que te allas bañado! Ya apestabas a zorrillo.- Puse los ojos en blanco y ella solto una carcajada.- Lo siento cariño, es que ya estaba creyendo que jamás ibas a reaccionar, ¿ya estas mejor?.- Me regalo una cálida sonrisa y yo se la devolví.
-La verdad es que no, pero no gano nada siguiendo en cama y yo igual pensaba lo mismo. Oye ¿puedes hacerme un favo?- Dije un poco nerviosa.
-Claro cariño, dime.
-No he prendido mi celular desde... Ya sabes y creo que necesitó volver a mi mundo, pero sin él, ¿pondrías prenderlo y archivar los mensajes de él? Aún no estoy lista para leerlos pero quiero hablar con Ayra sobre la escuela y todo eso.
-¿Estas segura?.- Pregunto con una expresión dudosa.
-Sí.
Le tendí mi celular y ella hizo lo que le pedí pero unos minutos después un timbre reconocido sonó, mi estómago se revolvió y mi corazón empezó a latir demasiado rápido.Messi
Hoy es el séptimo día desde que termine con mi Emmy. Cada día es peor que el anterior, la extraño demasiado, extraño sus besos, sus abrazos, sus mensajes tan largos, su sonrisa, sus mordidas, siemplemente extrañó todo de ella. Es lo que más amo en éste mundo, pero sabía que era lo mejor para nosotros, ya no era lo mismo además nunca me creía cuando le decía "Te amo" o que yo no quería nada con Cat, sé que la cage con esos mensajes y no me di cuenta del daño que le cause, pero hice mi mayor esfuerzo por demostrarle que la amaba y no me creyo.
Le enviado unos 500 mensajes en Facebook y Whatsapp, además ya me acabé mi crédito marcándole y dejándole buzones de voz porque nunca me responde por lo que no he sabido nada de ella, ni siquiera me ha dedicado un estado ni nada y eso se me hace muy raro, siempre sabía lo que tenía por sus estados de Face y Whats pero ahora ni su puntito verde me aparece y su última conexión fue hace 7 días. Decidí cambiar nuestra relación de face por un "es complicado" suena inmaduro pero no quiero poner "soltero" pues las gatas como diría ella empezarán a molestarme y no tengo ganas de ligar.
No he tenido fuerza para ir a la escuela: tener que verla y no poder abrazarla y besarla me mata. Todo éste tiempo me la he pasado en casa esperando un mensaje, una llamada o un estado de de ella diciéndo: "te extrañó, regresa" o algo por él estilo. Ayer me la pase llorando hasta que me quede dormido, como lo hago todas las noches, mis hermanos dicen que es sólo una mujer y que no es de hombres llorar por ellas, pero es que no hay nadie como Emmy, ella es... Perfecta.
Me han dado ganas de ir a verla pero mi orgullo no me deja y nisiquiera tengo fuerzas pero hoy cuando desperté decidí ir a la ducha por primera vez en todo éste tiempo, tendí mi cama y me tumbe en ella. Me pregunté que estaría haciendo y si me extrañaría, revisé su muro y su conexión y nada, todo seguía igual. Decidí llamarla por enésima vez y para mi sorpresa no me mando a buzón.
-¿Bueno?.- Dije esperando respuesta, mi corazón latía demasiado rápido.
-Hola Messi, ¿qué se te ofrece?.- Me contestó su madre con una voz fría, debía odiarme por todo lo que le hize a su hija.
-Buenas tardes señora, necesitó hablar con Emmy.
-¿Para qué? ¿No te bastó todo el daño que le hiciste?.- Me odiaba demasiaso y era lógico, sus palabras me hirieron y sentí como mis lágrimas caían una vez más por mis mejillas, desearía que ella me las limpiara con sus cálidos besos.
-Lo sé señora y créame que estoy muy arrepentido, quiero perdirle una disculpa por todo el daño que le he causado. Sé que usted me odia y no la culpo, pero realmente amo a su hija y de todo corazón quiero disculparme.- Lo dije con lágrimas, no me importó que me escuchará.
Se hizo una enorme pausa que hasta creí que ya me había cortado la llamada.
-¿Hola?.- Me dijo una voz conocida, era la de ella.
Se me hizo un nudo en la garganta y mi corazón latio más rápido que nunca.
-Mi amor, te extrañó demasiado, no puedo sin ti, fui un estúpido al dejarte. Te he enviado infinidad de mensajes, pero no me contestaste.
-Oye... Igual te extrañó pero tú fuiste él que me dejo y no he querido saber nada de ti, estaba hecha mierda además no sé porque haces esto, si seguramente ya éstas con alguien más.- Su tono era frío, no la reconocía, ella no era mi chica.
-¿Alguien más? ¿Cómo puedes pensar eso? Yo igual estoy hecho mierda y te extrañó más que a nadie así como te amo.- ¿Cómo podía pensar eso? ¿Qué le pasó a la chava de la que me enamoré? No era ella, seguramente me odiaba.
-Pues símplemente lo pienso y ya. Es típico de ti dejar a una y al otro día tener a otra.
-¿Qué? Emily, ¿no te das cuenta de que te extrañó? ¿no te lo he demostrado con todos los mensajes que te he enviado?.
-No he leído ni uno tus mensajes, es la primera vez que prendo mi celular desde que me cortaste. Me sentía demasiado mal que he perdido bastante peso y no he ido a la escuela.
-En verdad lo siento, yo tampoco he ido a la escuela, ni salido de casa, ni siquiera he ido a entrenar.
-No deberías sentirte así, tu fuiste el que decidiste que terminaramos.- Sus palabras me lastimaron tanto que sentí como mi pobre corazón se rompía una vez más lentamente, empeze a llorar como marica y no supe que decir.-Messi, tengo cosas que hacer y una vida que seguir ¡Sin ti! Fue un gusto, te amo, pero el cuento tú lo terminaste. Hasta nunca.-
Y colgó.
Supe en ese momento que me odiaba y no tenía caso seguir luchando por ella. Continuaría mi vida sin mi corazón, sería feliz sin el amor de mi vida. Así como ella lo hizo.
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¿Dónde dejamos el amor?
Romance¿Crees que el verdadero amor existe? Emily es una chica normal de 18 años que creía que el amor era lo más importane y perfecto y es que teniendo un novio como Messi ¿Quién no lo creería? Desafortunadamente se dará cuenta de que no todo es color de...