¿Dónde dejamos el amor?

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Nate despierta antes que yo, cuando yo me despierto él ya se baño y está listo sentado en una silla a lado de la puerta observándome.
-Buenos días.- Digo dando un bostezo y frotando mis ojos.
-Buenos días, el desayuno está en la mesita.- Me muestra una débil sonrisa y me siento mal por ello, extraño a mi Nate alegre. Me levanto de la cama y me dirijo a la pequeña mesita, me siento en una silla y veo que hay un sándwich y un café de desayuno.
-Gracias por el desayuno, ¿tú ya desayunaste?.- Preguntó empezando a comer el sándwich.
-Sí, desayune lo mismo que tú.
-¿A qué hora te paraste?
-Mm.. Como a las 7:30.
-¿Porque tan temprano?, ¿qué horas son?
-Me desperté a esa hora y no me pude volver a dormir así que decidí arreglarme he ir por el desayuno. Son las 10:45.- Decido no intentar hacer más preguntas, por el tono en que me contesta, creo que no quiere hablar.
Termino de desayunar y me dirijo a la maleta para sacar las cosas para bañarme, cuando termino le digo Nate que me voy a bañar y me meto al baño.
Cuando salgo ya estoy toralmente arreglada, Nate se ah acostado en la cama y está jugando con su celular.
-Estoy lista.- Nate me mira asiente y no veo en él ninguna expresión, me lastima que este así.
-Emm... Nate, ¿vamos a estar así?.-
-No lo sé Emmy.
-No me gusta que estemos así, me lastima.
-Lo siento, en verdad, pero es que necesitas tiempo para decidirte.
-¿Decidirme? Sabes cuál fue mi decisión, te elegí a ti.
-Sí Emmy, pero lo sigues queriendo a él.
-Bueno sí, pero dijiste que me ayudarías a olvidarlo para poder quererte sólo a ti.- Nate suspira y se hace una larga pausa.
-Lo... Lo siento Emmy, es sólo que desearía que me amarás como lo amas a él.- Se cubre la cara con las manos y yo me acerco a él. Le quito las manos de la cara y lo obligó a que me mire.
-Estoy contigo, es lo importante, te elegí a ti, entiende eso.- Lo beso y él me toma de la cintura y me coloca sobre él, seguimos besándonos, cada vez más intensamente.
Sin darnos cuenta, ya estamos en ropa interior y sin ganas de parar.

Llegue a mi casa a las cinco de la tarde y se me termino de ir el día en sacar las cosas de mi maleta, cuando termine ya eran las 10:30. Mi madre me subió una taza de atole de nuez y un pan para merendar, cuando termine me lave mis dientes y me acomode en la cama, al instante me quede profundamente dormida.
Al día siguiente sonó mi alarma y me prepare para ir a la escuela nuevamente. Cuando llegue, empezaba otro semestre de la universidad, aún me faltaban algunos, pero ya era uno menos.
Llegue y me encontré con mis amigas en la cafetería para organizar nuestros nuevos horarios y materias.
-Hola guapas.- Dije sonriendo.
-Emmy... ¿Cómo te fue con Nate? Quiero saberlo todo.- Arya luego luego al chisme.
-¿Hubo mucho setso?.- Preguntó Anne la pervertida.
-Ya cálmense, si la dejan hablar tal vez pueda contarnos.- Intervino Danny.
-Bien... Pues fueron geniales, visitamos muchos lugares, Nate no sabe muy bien el inglés y yo era como su "traductora" y...- No termine de contar cuando Anne me interrumpió.
-Yo solo quiero saber si hubo setso.- Creo que notaron la respuesta a esa pregunta en cuanto vieron mi cara sonrojada.
-Ahh... ¿Y la pervertida soy yo? Quiero saber todo.- Dijo Anne golpeando la pesa y exagerando dramáticamente.
-Amm... No sé cómo contarles, es decir, no tengo palabras para explicarlo.
-Bueno, dinos, ¿duele?.- Preguntó Arya con intriga.
-Sí, demasiado, no podía ni caminar.
Me siguieron preguntando sobre ese tema hasta que tocaron para entregar nuestros horarios y la verdad es que nunca me había sentido tan incomoda como con esa platica. Continuamos nuestro día normal, y me doy cuenta que tengo tres clases con Nate y que él ya volvío a normalidad.
No he visto a Messi en todo el día ni a Cat, eso me hace un nudo en el estomago, no quiero preguntarle a mis amigas, pero siento la necesidad de saber qué pasa con el, tiene dos meses que no lo veo. Para mi suerte me encuentro a Robb.
-¡Emmyyyyy!.- Grita Robb , me levanta del suelo en un abrazo mientras gira.- Que bueno verte otra vez, te he extrañando.
-Yo igual Robb, ¿que tal te fue?.
-Pues muy bien, ya ando con Anne y nos la pasamos muy bien, salimos en varias ocasiones y ella es maravillosa.- Robb suelta un suspiro y me doy cuenta de que Anne lo trae loco.- ¿Y a ti como te va con tu fortachón?.
Suelto una risa y la verdad es que a Robb no le cae bien Nate, tienen diferentes formas de ver el mundo.
-Fuimos a la playa, fue divertido, conocimos muchos lugares de Estados Unidos.
-Me alegra que te diviertas con él, sólo espero qué no salga igual de pendejo qué Messi.
-Sí, lo sé... Y ¿sabes algo de él? No lo he visto.
-¿Querías verlo? No vendrá a la escuela esta semana y no se si la que sigue.- Robb se encogió de hombros, pero se veía preocupación en sus ojos y eso me intrigó.
-¿Porqué no?
-Esta en la cárcel.- Mi corazón empezó a latir muy rápido, ¿en la cárcel?, ¿que demonios hace el en la cárcel? Era demasiado, necesitaba saber.
-¡¿QUÉ?! ¿Porque esta en la carcel?.
-Ay Emmy, hay te has perdido de tantas cosas.- Response Robb con una sonrisa siniestra, eso hace que me enoje, odio que sea así.
-Eres...- Intento calmarme porque se que no traera bada bueno.- Sólo dime de una vez que hizo.-
-Esta bien, mira hice una fiesta el vienes, ya sabes alcohol, mota, cigarro, marihuana...-
-¡Robb! Al punto.- Lo interrumpo bruscamente.
-Bien, el punto es que Edson empezó a hablar de ti y de que te iba a coger y ya sabes Messi escuchó todo, se enojo y se pelearon, otra vez. Pero esta vez no podíamos separarlos y tuvimos que llamar a la policía. Se llevaron a Messi y no lo han podido sacar porque Edson lo demando.- Aveces odiaba tanto a Edson, no se como ese enano puede arruinar la vida en segundos. Todo esto había sido por mi, bueno "literalmente" pero aún así, haré cualquier cosa para solucionarlo.
-Demonios, todo lo que puede pasar...Quiero ir a verlo.-
-Emmy no creo que sea buena idea, lo tienen con mucha seguridad porque intento escapar dos veces.-
-Bien. ¿Y qué con Cat?.-
-No sé, el día de la fiesta se fue muy enojada por la pelea, desde entonces no la he visto.- Suena la campana para la última hora.
-Tengo que irme, te veo luego Robb.
-Sí, bye.
No importa lo que me diga Robb, saliendo de aquí iré a verlo.
Le mando un mensaje a mi mamá para avisarle que llegare muy tarde con la excusa de que tengo un proyecto.