Danny se tardo horas en arreglarse por lo que llegamos tarde a la primera clase y no nos dejaron entrar así que decidimos irnos a desayunar a la cafetería de la escuela y Arya estaba hecha la furia porque no le gusta llegar tarde y menos que no nos dejen entrar; pero que esperaba Arya si es Español.
-Si te hubieras levantado 5 minutos más temprano, hubiéramos llegado a esa maldita clase Daenerys. Pero no, estamos en la cafetería.
-Arya, tranquila ¿qué más da perder una clase? Además tu tampoco te levantaste muy temprano, no le heches la culpa sólo a Danny.- Dijo Anne tranquilamente.
-Sí Arya, fue culpa de todas, además no me gusta esa clase me cae mal la maestra.
-Bueno, ya está bien, pero a la siguiente clase si tengo que llegar hee.
-Me aseguare de que llegues.- Dijo Danny con una sonrisa.
-Voy por un café, ¿quieren algo?.- Pregunte y todas negaron con la cabeza. Me dirigí a la cafetería y me senté en la barra, pedi un capuchino de crema irlandesa, cuando me lo entregaron iba de vuelta a la mesa cuando alguien choco por accidente conmigo y hizo que derramara mi café en mi ropa.
-Disculpame, no te vi. ¿Estás bien?.- Dijo y realmente se me callo la baba, era un chico alto, de piel blanca con ojos azules y cabello negro, negro extremadamente negro, tenía una buena complexión pues a simple vista se veía las horas que pasaba en el gimnasio. No sé cuanto tiempo me quede admirándolo pero se coloro y yo creó que pensó que lo estaba violando con la mirada.
-Ammm... Disculpa... ¿Pasa algo?.
-¿Qué? Ay disculpa, eres alguien con quién fácilmente se te puede caer la baba.
Soltó una carcajada y descubrí que su voz aguda y hermosa.
-En ese caso dejame comprarte otro capuchino ya que el tuyo lo derrame sobre ti.
-Oh cierto, me perdí tanto que olvide que habías derramado mi café en mí.- Solté una risa nerviosa, este chico me pone nerviosa, debe ser tanta guapura y tantos músculos.- Y te aceptaría el café si supiera tú nombre.
-Cierto, que mal educado soy, me llamo Nathan, pero dime Nate.
-Bueno Nate, soy Emily pero dime Emmy.
-Entonces Emmy, ¿aceptas el café?
-Claro.- Le dirigí una sonrisa y pedimos dos capuchinos de crema irlandesa, mantuvimos una conversación donde nos fuimos conociendo poco a poco. Descubrí que además de atractivo era muy inteligente y divertido.
-Nunca te había visto por aquí, ¿eres nuevo?
-Sí, justamente hoy es mi primer día.
-Genial, bienvenido a la aburricion.- Reímos los dos.
-Y cuéntame, ¿que te paso en tu brazo?.
-Es una larga historia pero digamos que mi ex me aventó hacia una mesa de cristal donde me rompí el brazo.
-¿Tu ex hizo eso? Debe ser el nombre mas idiota del mundo, yo jamas lastimaría a una hermosa dama como tu.- Solte una pequeña risa.
-Bueno, todo el mundo dice que lo es y es que no fue intencionalmente, empezó a golpear a un tipo que bese porque estaba borracha y cuanto los intente separar me aventó.
-Eres un caso grave.
-Lo sé, ¿y que hay interesante en tu vida? Que no sea que recibes reconocimientos cada semestre y eres un ñoño.
-No soy ñoño pero pues creó que no hay nada interesante, me la he pasado estudiando desde que mamá murió y mi ex me corto.
-¿Tu madre murió? Lo siento mucho, tu ex debió estar ciega para terminar con un bombón como tu.- Nate se río de mi comentario.
-No te preocupes, mi madre tuvo un accidente en la carretera y esque según mi ex no le hacía caso por estudiar. ¿Tu sólo te fijas en el físico o qué?
-En verdad lamento lo de tu madre y bueno tu ex estaba loca. No aveces me fijo en la inteligencia.- Volvimos a reír y en ese momento sono la campana para la nueva clase y volví a mundo real donde recorde que tenía tres locas amigas que me esperaban con un café.
-Debo irme, gracias por el café pero ahora tengo que buscar a mis amigas deben estar preocupadas por mi.
-No te preocupes, gracias por aceptar el café y disculpa por derramar sobre ti el anterior. ¿Podemos seguir en contacto por Whats y Face?.
-Claro, ya tienes mi número, ¿verdad?.
-Sí, ¿y tú?.
-También, nuevamente gracias por todo pero debo irme. Te habló por Whats.
Salí corriendo de la cafetería con la esperanza de que encontrara a mis amigas, pero como supuse ya se habían ido pues Arya había dicho que no quería perder ni una clase más.Mis clases transcurrieron en felicidad, pues no podía de dejar de pensar en aquel chico encantador. Cuando salimos al recreo me reuní con mis amigas.
-Bien, Emmy es momento de que nos cuentes porque no regresaste de la cafetería.- Dijo Arya con intrigo, no sabía que seguía en mi nube llama "Nate" hasta que grito.- ¡EMILY SHECCID!, NECESESITO RESPUESTAS.
-¿Qué? Ah lo siento, es solo que no puedo sacarme de la cabeza a ese chico encantador.
-¿Chico encantador Emmy? Creo que necesitamos saber más ha cerca de ese chico encantador.- Dijo Anne y soltamos unas resistas.
-Vale, está mañana después de haber comprado mi café, el tropezó conmigo y el café se derramo sobre mi. Él se disculpó y me compro otro y tuvimos una breve charla en lo que tocaban para la segunda hora.
-¿Y está guapo?.- Pregunto Danny.
-Es guapísimo.
Seguimos hablando del Nate hasta que tocaron para entrar a clase y cuando por fin término la escuela iba directo a mi auto cuando Messi llego.
-Cielo, ¿podrías perdonarme?.- Tomo mi cintura y me jalo hacia el, quedando los dos tan cerca que nuestras respiraciones se agitaron y casi nos besábamos.
-Sueltame...por favor.- Dije pero no sone autoritaria, más bien sonó como un gemido. »Mierda« pensé, no es posible que siempre que haga eso yo sea tan vulnerable.
-Sabes que no quieres que lo haga.
-No, pero esto no es correcto, además no se vale que con venir a ponerme en este estado pienses que te voy a perdonar.- El me soltó y paso sus manos por su cabello, suspiro y parecía frustrado, al parecer el muy idiota pensó que con tan solo ponerme caliente pero prefiero decir vulnerable voy a perdonarlo.
-¿Porque no aceptas de una vez que me amas?
-Porque sabes que lo hago, pero no quiero estar con alguien que solo me hace daño.
-Pero esta vez...- No término de hablar porque yo lo interrumpi.
-No, nada de "esta vez será diferente" solo son mentiras, siempre dices lo mismo y nunca cambia nada.- Mi voz al principio fue potente pero se fue quebrando y las lágrimas empezaron a amenazarme, no quería que me viera llorar.- Por favor... Solo vete.
De pronto Catherine llego y por su maldita precensia me trage las lágrimas y el odio hacía él y hacía ella me invadieron.
-Corazón, ya es tarde, la función empieza a las 3:00 y no quiero llegar tarde, ¿nos vamos?.
-Cat, ¿no vez que estoy hablando con Emmy?.- Preguntó Messi con frustración y le dirigió una bella sonrisa.
»Maldita gata, algún día me las voy a cobrar con este par de idiotas« Pensé.
-Sí, pero se nos hace tarde corazón.
-Esperame en el auto, en seguida voy.- Le arrojo las llaves del auto y Cat se fue contoneándose.
-¿Es en serio Messi?, vienes a pedirne perdón pero invitas a tu gata al cine, ¡debes ser el hombre más idiota en este mundo!.- Dije alzando el brazo bueno con exageración.- Ahora corre ve a olerle el trasero a esa gata, "no se les valla a hacer tarde".- Estas últimas palabras las dije imitando el estúpido tono de voz de Cat, después me subí a mi auto pero el me siguio hasta la ventana.
-No vas a volver, ¿verdad?.- Sin mirarlo dije:
-No me necesitas, tienes a tu gata.- Dicho esto arranque el motor y al llegar a casa les marque a mis amigas para contarles lo sucedido.
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¿Dónde dejamos el amor?
Romance¿Crees que el verdadero amor existe? Emily es una chica normal de 18 años que creía que el amor era lo más importane y perfecto y es que teniendo un novio como Messi ¿Quién no lo creería? Desafortunadamente se dará cuenta de que no todo es color de...