Llevaba ya dos días en el hospital, la doctora nos dijo que no había podido darme de alta porque tenía que investigar por que no recuerdo algunas cosas en especial de ese encantador chico que dijo ser mi ex, dijo llamarse Messi y cuando lo dijo un escalofrío recorrió mi cuerpo, fue como si mi cuerpo supiera quién es pero mi mente no. Realmente no sé que más me falta recordar, ya recordé la fiesta de Robb y que fuimos de compras ese día, pero por alguna extraña razón no puedo recordar a Messi, me han contado mucho sobre él; que éramos unos novios muy empalagosos, que siempre estábamos juntos, nos divertíamos y nos reíamos mucho, también se han encargado de contarme todo el daño que me ha hecho gracias a su gata »dijeron que así le decía« Catherine.
Prácticamente todos ya me dieron su versión de Messi, incluso mi mamá que ya sabe todo lo sucedido y está muy al pendiente de mi, y yo nada que puedo recordarlo, cuando me cuentan las cosas las imagino pero borrosas, mi recuerdo sigue ahí, pero está borroso, eso hace que me frustre y siempre, siempre, siempre que hablamos de él eh intento recordar a mi cabeza le dan de martillazos por dentro, es tan horrible.
La doctora dice que no me siga frustrando en intentar recordar, que llegará el momento para que suceda pero eso no es lo único que me preocupa pues mi brazo izquierdo sigue enyesado y se quedará así por otras tres semanas.
-Princesa, ¿porqué has estado triste estos días? No me vallas a salir con qué es por mi, porque es algo que no te creeré.- Digo a Danny y ella ríe por lo bajo. Estos días ella ah estado más al pendiente de mi que nadie, no entiendo, si fuera mi Danny normal estaría pegada al teléfono esperando una llamada de Justin pero por alguna extraña razón del universo ah estado estos dos días junto a mi sin ver el celular y un poco triste, incluso cantamos canciones tristes que canta con un sentimiento que me dan ganas de llorar. Danny siempre ah sido la más sentimentalista, seguida de Arya, después yo y por último Anne a la que admiro por su gran fuerza interior, siempre eh querido ser como ella: fuerte, porque todas las demás somos unas princesitas que de cualquier cosa lloramos.
-Amm... Es que....- Danny estaba nerviosa, colorada y yo me estaba desesperando de tanto titubeo ¿porque no me quiere decir?.
- ¡Daenerys! Ya dimeeee!.- Alzé un poco la voz pero es que necesito respuestas.
-Vale ya... Justin y yo nos hemos.. dado un tiempo.- Danny dio un suspiro profundo y comenzó a llorar, la abrazé y acaricie con suavidad su larga cabellera rubia, la noticia no era una gran sorpresa, llevan dándose tiempos y regresando toda su relación, pero está vez me preocupo más, pues Dany nunca había estado tan deprimida y su récord de volver ya había sido superado, además Arya no tolera la estupidez en el amor, y por lo que Danny me ha contado, siempre éramos nosotras las "sufridas" por lo que Arya decidió no volver a meterse en nuestros asuntos del amor ya que por más veces que nos dijo que no los perdonáramos, nunca le hicimos caso.
-¿Porqué vivieron a darse un tiempo?
-Por lo mismo de siempre, celos.
-Hay princesa, realmente ahora mismo no sé que decir, seguramente si fuera mi "yo normal" te diría algo con lo que te sintieras mejor, pero en estos momentos no puedo entenderte puesto que no recuerdo ese sufrimiento, pero puedo decirte que si te quiere te vendrá a buscar y todo volverá a la normalidad.- Danny me dedico una media sonrisa ante mis palabras, espero y le allán servido porque no sé que más podía haberle dicho.
-Gracias bebé, no sabes cuanto te quiero.
-Lo suficiente para quedarte conmigo todo este tiempo. Deberías despejarte un poco, no sé, ir a tu casa y convivir en familia. No te preocupes por mi, la doctora dice que ya pronto me dará de alta porque lo que me da a entender que ya estoy mucho mejor.
Nos quedamos platicando otro rato y me quede dormida. Cuando desperté la doctora me dijo que ya me habían dado de alta, por lo que me bañe, y me puse unos pans morados que mamá me trajo, estaba sentada en la cama cuando alguien entro por la puerta, pensé que era mamá o la doctora o mis amigas, pero me lleve una gran sorpresa.
-Hola mi cielo, ¿cómo estás?.
-Mejor, gracias. ¿Qué estás haciendo aquí?
-Vengo a llevarte a casa.- Me mostró una hermosa sonrisa y yo no pude contener devolvérsela.
-¿Mi mamá sabe que tu me llevaras a casa?
-Sí, yo mismo le he tenido que rogarle para que me dejará.
-¡Sorprendente! Pero, ¿como es que no me vas a secuestrar en el camino?.- Los dos comenzamos a reírnos.
-Bueno cielo, te informo que vivo justamente atrás de tú casa y créeme que si pudiera secuestraste lo haría pero tus padres me odiarían más de lo que ya lo hacen.
-Cierto acabo de recordar que vives atrás de mi casa porque recuerdo una imagen tuya lavando trastes.- Volvimos a reír y era cierto, recordaba que una vez yo lo espiaba desde la ventana del cuatro de mi mamá y el estaba lavando trastes.- No creo que mis padres te odien tanto como dices.
-Yo creo que sí, te he hecho mucho daño.- Hubo un momento de silencio y al escuchar la palabra »daño« me dieron escalofríos. De repente empeze a recordar varias cosas; yo deprimida en la cama, llorando, sin ir a la escuela, Catherine... Mis recuerdos fueron interrumpidos por Messi que una vez recordado todo, cambie mi opinión respecto a él de "que adorable" a "maldito infeliz".- ¿Nos vamos cielo?.
-Sí y por favor no me llames cielo.
-¿Qué sucede?.
-Nada, ya vámonos no tolero estar en este lugar.- Nos diriguimos hacia su automóvil y una ves fuera del estacionamiento me pregunto:
-¿Vas a decirme que sucede?.
-¿Porqué tendría que suceder algo?.
-Porque te conozco y sé que cuando te pones cortante y seria tienes algo.
-Me conoces tanto que sabías el daño que me harías con los mensajes que le enviaste a Catherine y aún así no te importo.- Su expresión cambio totalmente a sorpresa.
-¿RECORDASTE TODO?.
-Sí, recordé todo.
El resto del viaje transcurrió en silencio y cuando llegamos a casa me acompaño a la puerta y me beso, fue un beso tierno, como si me estuviera pidiendo disculpas, pero el recuerdo de él con Cat apareció en mi mente y lo empuje.
-Mejor vete con tu gata.
-Espero que algún día me perdones.
Entre a mi casa y azote la puerta, mi madre ya sabía seguramente lo que pasaba así que corrió a abrazarme y yo comenze a llorar.
-¿Qué te hizo, cariño?
-Nada, se porto muy lindo, es sólo que pude recordar todo lo que me hizo..
-¿Recordaste todo?
-Sí.Habían pasado ya tres horas desde mi regreso. Ya habiamos comido y estaba a punto de terminar los trabajos de la escuela de los días que falte cuando Anne y Arya llegaron.
-¿Cómo estás hermosa?.- Pregunto Arya.
-Pues ya mejor, Anne ¿como te va con Robb?
-Es muy lindo conmigo, ayer nos quedamos hablando por teléfono hasta que nos quedamos dormidos, pero aún no me pide que seamos novios, dice que primero quiere que nos conzcamos.- Anne de encogió de hombros y sonrió.
-Robb es un buen chico, me gustaría que si tuvieran algo. Harían una bonita pareja.
-De hecho sí.- Comento Arya.
-Y a ti Arya, ¿como te va con Bryan?
-Pues muy bien, aún no puedo creer que ya vallamos a cumplir dos años juntos. Emmy, ¿qué ha pasado con Messi?
-Eso sí es amor. Recordé todo y le cerre la puerta en la cara después de que me besó cuando me trajo del hospital.- Me encoji de hombros como si no importara, en el fondo me dolía porque pude recordar todo y el sentimiento de la depresion volvió a mi.
-Te dije que sigue siendo un pendejo.- Dijo Arya frustrada.
-Ahora lo sé. Oigan, ¿saben cómo está Danny?
-Ya regreso con Justin.- Nos dijo Anne ponido los ojos en blanco.
-¿En serio?
-Sí, esos dos están muy mal, pero así de aman. Espero que Danny ya no sufra.- Dijo Arya.
-Yo también lo espero.
Anne, Arya y Danny que llego más tarde porque había ido al cine con Justin, se quedaron a dormir en mi casa para mañana ir a la escuela, de nuevo; lo bueno es que ya acabe todo los trabajos
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¿Dónde dejamos el amor?
Romance¿Crees que el verdadero amor existe? Emily es una chica normal de 18 años que creía que el amor era lo más importane y perfecto y es que teniendo un novio como Messi ¿Quién no lo creería? Desafortunadamente se dará cuenta de que no todo es color de...