"Reencuentro de dos corazones rotos"

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Ya era lunes y tenía que regresar a la escuela de una manera u otra.
Me desperté a las cinco con una flojera eterna y me fui a la ducha; decidí ponerme un pantalón de mezclilla, una ombliguera color rosa pastel (que me quedo muy bien debido a mi extrema perdida de peso) y mis converse blancos, me deje mi pelo suelto y arregle mi cuarto.
Cuando termine apenas eran las seis así que tenía veinte minutos para revisar Facebook y chatear un poco cuando me pregunté sí en algún momento había pensado en mi desde la última vez que hablamos, lo traté muy mal pero es que no supe que hacer ¿cómo se le ocurre sólo pedirme perdón y luego por teléfono? Admito que estoy sorprendida por la infinidad de mensajes que me dejo diciéndome que me extraña, que fue un idiota y que regrese, pero ¿espera que le diga que regresemos por Facebook? Es lo ultimo que haría: regresar con él por Facebook, sí realmente me quiere, me buscará en persona y no por Facebook y WhatsApp.
No sé si realmente me extraña o no porque él día que hablamos si se oía muy mal y se me partió el corazón, recuerdo que estábamos llorando y mis últimas palabras fueron: "Te amo, hasta nunca" sentí tan horrible al decir esas palabras que no espere respuesta alguna colgué y me la pase llorando todo él día, no me volvió a llamas desde esa vez y me dije a mi misma >>Te hubiera seguido rogando si le importarás, deja de sufrir por alguien al que no le importas>> Mis pensamientos fueron interrumpidos cuando mi madre entro con una sonrisa:
-¿Lista para regresar a la escuela?
-Eso creo.- Le mostré una débil sonrisa y nos fuimos hacia la escuela.
-Buena suerte cariño, me llamas si necesitas algo.- Dijo cuando llegamos y me dio un fuerte abrazo y un beso de despedida.
Salí del auto y estaré por la enorme puerta roja, al entrar me dieron escalofríos, la escuela se veía diferente, habían podado los árboles del jardín principal y colocado unas bancas, me quede contemplando hasta que alguien llego y me abrazo por la espalda.
-¡Bienvenida a la escuela!.- Dijo Ayra con una enorme sonrisa. Tenía la piel demasiado blanca y en su cara había ligeras pecas cafés, el cabello lo tenía castaño y largo como yo, sus ojos eran de un color miel y se ocultaban bajo sus lentes, su cuerpo era de complexión media al igual que yo y llevaba un lindo vestido rosa con sus vans llenas de flores. -¿Porque no habías venido? Y ¿Porque no nos has contestado ni uno de nuestros mensajes? Te enviado docenas de ellos, nos has tenido muy preocupadas a Anne, Dany y a mi.- Dijo con el seño fruncido.
-Lo siento mucho, es que me enferme.- No tenía ganas de contestar el cerro de preguntas que Ayra me haría sí le digo que mi novio me termino.
-Eso no te lo cree ni tu abuela, anda cuéntame el chisme.
- Ya te dije que me enferme.- Conteste un poco molesta.
- Valla que milagro Emmy. ¿Dónde diablos te habías metido?.- Llego Anne con su cabello rojo a los hombros, sus ojos verdes, que le resaltaban lo blanca que era. Anne era la más pequeña de todas y era demasiado flaquita. Llevaba un short de mezclilla y una blusa de tirantes verde agua con sus converse blancas como las mías.
- Estaba enferma, ¿dónde está Dany?.- Pregunte para que me dejaran de hacer preguntas sobre mi desaparición de una semana. Daenerys era la más alta de todas nosotras y de cariño de decíamos Dany. Su cabello era rubio y le llegaba a la cintura, sus ojos eran azules y su piel era blanca como todas nosotras, su cuerpo era de complexión media.
- Aquí estoy, lamentó el retraso pero ya saben que vivo muy lejos.- Nos saludo dándonos un beso en la mejilla, se me quedo viendo y dijo.- Emmy, ¿eres tú? Hace siglos que no te veo.- Lo que me faltaba, ahora ya no podría safarme del interrogatorio que me harían.
-Emmy dice que estuvo enferma pero no le creo porque ni siquiera a leído uno de los cientos de mensajes que le eh enviado.- Dijo Ayra y me miro con cara de "quiero respuestas".
-Ya dinos que paso hermosa.- Dijo Anne con una sonrisa.
-Sí dinos.
-Vale, es un poco difícil de explicar y la verdad es que no tenía fuerza para venir a clase y lidiar con ello, lamento no haberles respondido ninguno de sus mensajes, apague mi cel y apenas él viernes lo prendí.- Sé me hizo un nudo en la garganta y mis ojos empezaban a llenarse de lágrimas, ¿porqué a mi?.
-¿Qué pasó?.- Me dijo Danny y sus caras cambiaron a una expresión preocupada.
Solté un largo suspiro y me mordí el labio para no llorar.
-Termine... Con...- Pronunciar esas palabras fueron lo más difícil.
-¿¡QUÉ!?- Soltaron las tres al mismo tiempo.- Voy a matar a ese desgraciado.- Grito Ayra furiosa.
-¿Porque terminaron?.- Preguntó Anne.
-Porqué según él ya no era lo mismo desde la ultima vez que nos peleamos por su gata.
-Hijo de su madre, no estés así hermosa. Tú vales demasiado para estar sufriendo por hombres como él.- Me tranquilizo Danny al ver que las lágrimas habían empezado a caer por mis mejillas.
- Lo sé pero es que... Saben que lo amo demasiado.
-Sí, pero recuerda cada tontería que te hizo y además si el te amará no te hubiera cortado, sólo habría hablado bien contigo para que llegaran a un acuerdo y estuvieran bien.- Resopló Arya.
-Lo sé y por eso no he respondido ni un mensaje de él ni le conteste las llamadas. La última vez que hable con él fue el sábado y me regó que lo perdonará pero le dije que tenía una vida que seguir sin él.
-Hiciste bien amiga, tranquila pronto lo olvidaras. Sabes que cuentas con nuestro apoyo pero ahora tenemos que ir a clase de biología y se nos está haciendo tarde, saben que odio llegar tarde.- Dijo Arya y juntas nos fuimos a la clase. El miedo me corría por las venas, no quería verlo.
La clase de biología se me paso volando y agradecí que no fue a esa clase, nuestro horario era casi idéntico excepto por tres clases, así que todavía no me salvaba.
Seguía lingüística, esa era una de las clases que no teníamos igual, así que me fui con calma y en el camino me encontré con Robb.
-Mily, lamento mucho lo de tu pendejo.- Dijo dándome un fuerte abrazo. Robb tenía los ojos negros como su cabello ondulado, era muy alto y fuerte tan fuerte que podría levantarme como si fuera una almohada, tenía la piel un poco morena y admito que era atractivo. Llevaba unos Nike con sus pantalones extremadamente entubados y una playera azul marino.
-No tienes nada que lamentar, simplemente paso y ya no puedo hacer nada para que cambie. ¿Cómo te enteraste?
-Sí, pero sé que lo amabas mucho. Todo el mundo se enteró, tal vez porque su estado en Face paso de ser relación a es complicado y ahora es "soltero".
-Ah, no he revisado Facebook con determinación.
Robb soltó una carcajada.
-No lo hagas, yo sé lo que te digo.- Me giño el ojo y se fue a su clase.
Maldito Robb siempre me deja con dudas.
Continúe mi camino y mis cuatro próximas clases transcurrieron en paz excepto por la infinidad de personas que "lamentaban que hubiera terminado con Messi".
Seguía el recreo y tenía miedo porque había escuchado que si había venido y que había estado evitando las clases que me tocan con él, así que era el momento de comprobar ¿cómo podía evitarme después del daño que me había hecho?. Busque a alguna de mis amigas y encontré a Arya besándose con Bryan; su novio que era demasiado alto con fuertes músculos y una piel clara, ojos miel, cabello entre rubio y café quebrado. Se me partió el alma al verlos tan felices que no pude evitar llorar, no quería interrumpir su hermoso momento así que me fui corriendo al baño para que nadie me viera llorar, ¡valla era la segunda vez que lloraba en esté día!.
En el camino alguien choco conmigo y me hizo tropezar, me ayudo a levantarme y cuando nuestros ojos se encontraron, mi corazón empezó a latir rápidamente, no sabía que hacer estuve todo el día rogando para que no me lo encontrará y resulta que me tengo que tropezar con él, ¿porqué mi vida es tan cruel?
-Lamento eso.- Dijo con una voz temblorosa.
-Amm... Ya me acostumbre a que me hagas daño.
-Emmy...- Dijo en un susurro.- Lamento todo el daño que te he hecho, en verdad.
No sabía que decir, lo necesitaba más que nada, pero me había hecho sufrir demasiado, sin darme cuenta las lágrimas había empezado a caerme.
-No, por favor no llores.- Dijo mientras secaba mis lágrimas con sus dedos.- Sé que no te merezco pero en serio estoy muy arrepentido de todo lo que te hice, ¿podrías perdonarme?
-Siempre te perdono y siempre termino sufriendo otra vez. Ya me cansé de que siempre es lo mismo.
-Te juro que esta vez voy en serio, no quiero perderte de nuevo. Mi vida no tiene sentido sin ti.
-¿Y por eso has estado evitándome todas las clases?
-No, es que estaba ocupado.- Se puso muy nervioso, sabía que mentía.
-¿Ah sí? ¿En qué?.- Dije retándolo.
-He estado con Robb todo el día.- Que mentira tan grande.
-Mira que curioso porque justamente me encontré con Robb a la segunda hora.
-Ahh... Es que ah esa hora tenemos clases diferentes.
-Te creería si no me supiera tú horario de memoria, basta ya Messi en serio ya he sufrido bastante por ti para que me sigas mintiendo, quieres que te perdone y ni siquiera puedes decirme la verdad. ¿Porqué...- No pude terminar mi oración cuando pego sus labios a los míos, sus labios eran perfectos y se amoldaban a los míos, volví a sentir la química que nos unía. Supe que me amaba tanto como yo a él y ambos nos necesitábamos, me deje llevar por su inesperado beso y sin despegar sus labios de los míos dijo:
-¡TE AMO!
-¡TE AMO!.- Le dije.
Cuando el beso termino nos miramos fijamente y entonces recordé que ya no estábamos juntos, que esto no era real, que seguramente era un juego por parte de él.
-¿Porqué haces esto?.- Pregunte mordiéndome el labio para no volver a llorar.
-Porque realmente TE AMO.
-Sí me amarás no me hubieras dejado.
-Sabes que ya no era lo mismo, no hubiera funcionado, pero apenas me doy cuenta que te necesito más que nada.
-Entonces, ¿porqué me besaste si ya no somos nada? No te das cuenta de que me confundes.
-Es que no lo pude evitar, eres algo irresistible.- ¿Pero qué demonios? Primero soy una fiera y ahora soy irresistible, ¿porqué hace esto?.
-¡Basta de mentiras! Mejor dime ¿qué va a pasar con nosotros?
-No lo sé, volver no tendría caso, dos veces ya no es lo mismo.- Sus palabras me hirieron, ¿qué mierda le ocurre? Primero me dice que lo perdone que no me quiere perder de nuevo y ahora me sale con que no va a ser lo mismo. Agg esto no es posible, ¿porqué tuve que haberme enamorado de alguien tan bipolar?.
-¿Pero a ti que te pasa? Me ilusionas diciendo que te perdone y que regrese y ahora resulta que no funcionará.
-Yo nunca te dije que regresaras conmigo, te dije que me perdonará además tu me dijiste que tenías que seguir una vida sin mi. ¿Sabes cuánto me dolió eso? ¡Imagínatelo! Rompiste los pedazos de los pedazos de mi corazón.
Las lágrimas inundaron mis ojos, no lo pude evitar ¿porqué tiene que ser tan cruel siempre? Lo amaba y lo odiaba pero me odiaba más a mi misma por haberme ilusionado en cuestión de segundos para que después me botara ¡que estupidez! Ya no quería estar ahí, quería alejarme de él para siempre, no tenía caso seguir amando a alguien que sólo te hace daño.
-Entonces te pido perdón, por haber creído que eras el amor de mi vida, por entregarte todo de mi sin recibir casi nada a cambio, porque haberte confiado sin dudar mi corazón, porque me acabo de dar cuenta que no te extraño a ti ¿sabes? extraño a la persona que creí que eras, a la persona de la que me enamoré y que aún sigo enamorada, esa persona que no le importaba nada más que nosotros, esa persona con la que planeaba un futuro ¿recuerdas?, esa persona que dejo todo por mi, que no se fue a otros estados a jugar por mi sin importar cuando le doliera, dejo todo por mi, extraño a mi cielo, al amor de mi vida, a mi corazón que decía que íbamos a estar juntos por siempre y que llegaríamos al altar y nos dirían "los declaro marido y mujer" ¿recuerdas? Pero ahora no sé dónde está esa persona de la que me enamoré, es más, no sé si exista porque ahora veo a otra persona completamente diferente.
Nos quedamos un rato en silencio hasta que la campana sonó, el recreo que había terminado.
-Tengo que ir a clase.- Dije y no esperé respuesta, me dirigí a mis tres siguientes clases y me dio igual si en todas estuviera él, me lastimo tanto que ya no quería saber nada de él, no me importaba lo mucho que lo necesitará y extrañará porque comprendí que no importaba todo él amor que sentía por el porque siempre la que iba a terminar sufriendo era yo, porque yo había sido la que lo había entregado todo y el sin embargo nunca lo valoró.
Al salir de la escuela me encontré con mis amigas y quedamos en ir de compras para que yo me distrajera al atardecer.

¿Dónde dejamos el amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora